22: La cárcel

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Mi abuela es mi mayor inspiración para continuar con esto, aunque duele como nada me ha dolido antes. Si me pidieras un numero te diría que me duele como tres infinitos y cuatro eternidades, solo por mencionar una medida, pero no podría darte una forma de calcular este dolor que me abraza por las noches preguntándome porque estoy aquí, porqué me pasa esto, porqué los estúpidos a los que tanto odio que maltratan a las chicas de una forma increíble, pueden ser aparentemente felices sin demasiados contratiempos, ¿Es mi físico? ¿No encajo en los estándares sociales para ser como ese chico que tiene un estilo endemoniadamente hundido en la moda?

Este día le hice muchas preguntas a Liz.

-¿Qué es lo que hay de malo en mí? - Los dos estamos en nuestro lugar especial

-¿Por qué preguntas eso? - Me miró desconcertada

-¿Por qué todas se van? ¿Qué tengo de malo? ¿No soy una persona a la que se puede amar? -Le dije casi llorando

Suspiró, alzó su mirada al cielo

-Creo que el problema real son las personas, tú no tienes nada de malo

-Pero hasta ahora me he encontrado con que, todas tienen algún problema para estar conmigo, ¿Qué hago de malo? Les regalo lo único que nunca podré recuperara; lo digo así porque todo el tiempo le estoy pensando

-Es ese el verdadero problema. Haz creado una cárcel en tu mente, y estás tan cómodamente sentado en tu seguridad aparente, que no haces nada para salir. No necesitas a alguien para sobrevivir Michael -Sonrió- necesitas comer, respirar pero no a alguien para continuar respirando

-Me estoy quedando sin aliento y siento, como poco a poco mi esperanza en las personas muere -La miré

-A veces perder toda esperanza es el inicio del camino para salir de la cárcel. ¿Puedo hacer algo por ti, para que te sientas mejor? -Preguntó

-Solo abrázame -Extendí mis brazos

Por un momento el mundo no tenía problemas, no había si quiera algo que me preocupara, el refugio que me dio, fue como el impacto de una bomba, pero como el ruido de una caricia.

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Vicky tenia fijados sus ojos en cada movimiento que realizaba todos los día como una forma de divertirse/fastidiarme, lo cual me provocaba en ocasiones a esconderme de ella, porque de cierta manera representaba un peligro para mi integridad física, a causa de que podía fracturarme de alguna manera, en vista de que sale de la nada encima de mí.

-¿Porque no se lo pides a Liz? -Me preguntó

-¿De qué hablas? -La miré rápidamente

-Ustedes son bastante compatibles y se entienden muy bien, ¿Por qué le pides que sean pareja? -Puso cara de incógnita

A mí me parecía que era lo más divertido que alguien me había dicho en mi corta vida

-¿En serio crees que ella y yo? - Respondí riendo todavía

-¿Qué es tan divertido? - Me miró seriamente

-Lo que dices es muy divertido, ¿Cómo puede ser que Liz y yo...? - Volví a reír - No creo que lo sepas pero, Liz está saliendo con Dick, y aunque esto no fuera así, ella y yo solamente podemos ser amigos porque es mi hermana menor

-¿En verdad son hermanos? No lo sabía - Miró a un lado totalmente desconcertada

-No, no de esa manera, es algo así como la hermana que he elegido

-¡Ah! Entiendo, pero aun así deberías de considerarlo -Pasó sus dedos sobre mi espalda y se fue a su lugar

Charlie este día no apareció pero nosotros ya sabíamos su razón; fue a 'testear' a Kristen al <<Lugar Mágico>>

Con Liz hay dos elemento que siempre de cierta manera hemos odiado/amado porque es una espada de doble filo cuando el viento nos golpea de frente, por un momento puedo sentir que me quiebra por dentro con enorme facilidad y la lluvia que lentamente inunda cada parte de mi interior sin, siquiera tocarme.

Angie estaba al final de los pasillos cerca de su Salón reunida con sus amigas, solamente podía verle el cabello, el cual era movido por el viento, y me parecía una verdadera obra de arte con solo el hecho de mirarle de la forma que fuera, aunque tuviera puesto un enorme vestido de su color favorito con el cabello muy arreglado, y unos cuantos pendientes que resaltaran su inigualable rostro o simplemente tuviera puesta una pijama, me seguiría pareciendo despiadadamente hermosa.

Puedo verle, pero no me atreví a hablarle, no creo que sea el momento luego de darme cuenta que está saliendo con alguien es posible que interrumpa eso, y no quiero causarle problemas.

Desde que ella me informó de lo que estaba sucediendo, me siento más melancólico de lo normal, porque a pesar de que mis amigos están cerca todo el día, por la noche cuando estoy en mi habitación no hay nadie que me pueda salvar de mis propios demonios.

Las 7 Reglas De La CárcelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora