17. Todo ha cambiado.

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Cuando oí la puerta cerrarse de esa manera tan brusca, mis piernas por fin reaccionaron y empezaron a andar deprisa por donde se había ido Louis.

-Emily, no vayas ahora-Habló Harry mientras su rostro seguía teniendo ese mismo tono pálido. Seguramente estando igual que yo, o incluso peor.

-Necesito ir ahora, lo siento-Contesté y cerré la puerta trás de mi. 

Sabía perfectamente que no era el mejor momento para hablar, pero necesitaba hablar con él. Volvía a tener esa misma sensación de cuando casi me acuesto con Harry y no era nada agradable.

Quizás estaba actuando de una forma verdaderamente estúpida, casi beso a Harry, y ahora me sentía mal por Louis, verdaderamente tonto, si. Pero es que la forma en la que me miró transpasó mi cuerpo como una corriente de aire frío. Me miró como nunca antes me había mirado, como si yo le hubiera decepcionado, avergonzado. Y es que alomejor era cierto que sentía algo por mi.

Entonces no me lo perdonaría nunca.

Cuando salí a la calle, pude ver como su coche de gama alta de color negro estaba apunto de pasar por mi lado. Entonces pensé que sería mejor ser una masoca atropellada que nunca hablar con él. Así que, temiendo lo peor, me puse en mitad de la carretera -por la que no había nadie, ya que era un calle poco transitada-. 

Cerré los ojos con fuerza temiendo lo peor, y un fuerte frenado por parte del coche de Louis se escuchó. Después de unos segundos, al saber que no me había pasado nada, los abrí de nuevo. Un Louis muy enfadado se bajó del coche.

-¿¡Estás jodidamente loca o que te pasa!?-Me gritó acercándose a mi señalándome con su dedo índice.

-Y-yo-Balbuceé avergozada aún con el susto en el cuerpo-Solo quería hablar contigo.

-¿Y esa es la única forma?-Se cruzó de brazos y alzó una ceja. 

-No ibas a parar si te lo pedía.-Escondí un mechon trás mi oreja.-Seguro que no quieres hablar conmigo.

-Es cierto-Sus ojos azules seguían mostrando esa decepción haciendome sentir la peor persona del universo-No quiero hablar contigo.

-Esta bien-Suspiré y andé hacia la puerta del copiloto-Hablaremos por las buenas-Abrí la puerta-O por las malas.

**

El camino a su casa que estaba en un ático dúplex fue bastante silencioso y sobre todo incómodo. Sabía que era demasiado cabezona como para que la cosa se quedara de esa forma, así que sin rechistar, accedió a llevarme a su casa.

Aunque intentaba mostrar tranquilidad, sus manos apretando el volante hasta que sus nudillos llegaban a ser blancos, mostraban todo lo contrario. No me miraba, no decía una palabra, solamente tenía la vista en el camino mientras tomaba fuertes respiraciones. Sabía que estaba tratando de controlarse para no gritar o decir algo que me hiciera daño.

-Bien-Abrió la puerta de su casa y pasamos al amplio salón con colores llamativos.-No me hagas perder el tiempo Emily-Soltó las llaves de su coche encima de un armarito.-¿Sobre qué quieres hablar?

-¿Enserio me lo preguntas?-Le miré y él se encogió de hombros.-¿Quizás sobre lo que has visto o has oido?

-Ah, ya-Dijo sin importancia-Lo he oido y visto todo, tranquila.

Miré el suelo nerviosa sin saber que decir. Harry y yo nos habíamos delatado solos, haciendolo todo mucho más complicado. Volví a subir la mirada.

-¿No tienes nada que decir?-Pregunté extrañada. Su comportamiento me estaba dejando bastante anonadada.

Y lo peor aún estaba por llegar.

-¿Quieres que te felicite por casi acostarte con mi mejor amigo?-Sonrió superficial.-Esta bien, te felicito.

-No Louis-Murmuré.-Yo .. no sé porque casi le beso.

-No tienes que darme explicaciones-Dejó caer todo su peso en la pierna derecha-No te las he pedido y tampoco las quiero.

-Deja ya ese rollo, por favor-Le rogué mordiendo mi labio inferior. 

Puso otra de esas falsas sonrisas que me dejaban congelada. Aunque él me quería hacer ver con esa sonrisa que le daba igual, su mirada mostraba totalmente lo opuesto. 

-¿Sabes una cosa?-Preguntó pasando una mano por su nuca-Que me da igual.

-A mi no-Confesé sintiéndome cada vez más débil.-Joder, Louis. Sé que de verdad te importa.

-¿Por qué piensas eso?-Dio unos cuantos pasos con lentitud hasta acercarse un poco más a mi-¿Importarme?-Soltó una pequeña, pero falsa risa-No me importa. ¿Piensas de verdad que aún te quiero?-Negó con la cabeza mientras esa sonrisa desaparecía y mostraba nuevamente su ira.

Tragué saliva sintiendo como poco a poco cababa mi propia tumba. Los ojos me comenzaron a arder, dando señales de que quería derramar esas lágrimas que llevaba tiempo guardandome. 

-No. Estás totalmente equivocada-Frunció el ceño-No voy a negar que te tengo cariño, porque un día fuiste alguien importante para mi. Pero ya no-Añadió-Las cosas se acaban Emily. ¿Piensas que te llamo porque quiero volver contigo?

Me miró directamente a los ojos, como si pudiera leer cada parte de mi. Sus palabras se mostraban rotas y sus ojos azules ahora brillaban con dolor, aunque lo estaba diciendo con tanta firmeza que me lo creí. Yo seguía ahí, sin reaccionar, escuchando sus palabras que para mi eran como cuchillas clavándose en cada parte de mi ser.

-Estás demasiado confundida-Suspiró-Solamente me daba pena verte con ese tal Jorge, te veia tan sola que sentía verdadera lástima por ti ¿Acaso no lo entiendes?

-Mientes-Tartamudeé sintiendo como la realidad me golpeaba de frente.

-He cambiado-Habló muy cerca de mi-Serás mejor que te vayas con Harry, él quizás si te quiera-Se encogió de hombros-Mientras tanto solo puedo decirte que tienes razón. No soy el mismo chico de Doncaster, lo siento.

-No puede ser verdad-Quise gritar pero solo me salió un patético susurro.

-Será mejor que te vayas-Andó hacia la puerta y la abrió-Creo que es suficiente con que tú salgas dañada ¿No?

-No te reconozco Louis-Pasé por su lado y le miré con los ojos inundádos en lágrimas.

-Yo tampoco a ti-Susurró con la voz quebrada mientras sus ojos brillaban mucho más de lo usual y empezaban a ponerse rojos. Tal vez, tratando de no derrumbarse delante de mi.

¿Quizás lo que acababa de decir era una indirecta? Cuando estuve fuera de su ático, me miró una vez más y agachando la mirada cerró la puerta justo delante de mi. Parecía que sus palabras no concordaban con lo que su rostro me hacía ver. 

Entonces, un dolor desgarrador que hacía que no sentía unos años apareció dentro de mi. Dejándome casi sin respiración. Las lágrimas se desbordaron por mis mejillas como si se tratara de un embalse de agua que se acababa de abrir. Me monté en un ascensor, apoyé mi espalda en una de las paredes para tratar de cobrar aire, aunque parecía imposible.

Me sentía totalmente atrapada y estúpida. Sus palabras habían pasado por mi cortándome en millones de pedazos, como si hubiera sido un simple jarrón tirado con fuerza contra el suelo. Hacía tanto que no sentía ese insuperable dolor que cuando volvió, lo hizo de una manera mucho más cruel.

Todos decían que él me quería, pero vaya, había demostrado todo lo contrario. Derrumbándome de nuevo. Y lo peor de todo, me lo merecía.

Había vuelto a caer, había vuelto al principio de todo.

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¡HOLA! BUENO, PUES AL FINAL SI HE PODIDO SUBIR CAPÍTULO HOY Y HE HECHO UN GRAN ESFUERZO EN SUBIR POR VOSOTRAS. Y COMO NO OS QUERÍA DEJAR CON LAS GANAS ¡AQUÍ LO TENÉIS!

EL SALSEO CONTINUARÁ EN EL SIGUIENTE CAPÍTULO NARRADO POR LOUIS, CHAN CHAN CHAAAAAN.

MUCHAS GRACIAS POR LOS VOTOS Y COMENTARIOS, ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO MUCHO <3

Go Back |L.T| CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora