-MI BAILARINA-

CAPITULO 5

  CAPITULO 5.
Mentiras.


-Quiero sacarlos de aquí –Trate de que mi voz sonara fuerte y segura, pero en vez de eso conseguí que se quebrara, Kendall solo asintió y salimos juntos de ahí.

-Dije buenos tratos, así que los sacas ahora mismo de ahí –No deje que dijera ni una sola palabra

-Lo que digas preciosa –Se acercó peligrosamente a mí, pero Kendall se interpuso.

-Los dejaremos en la habitación de alado, está bien? –Cerré los ojos, gracias Kendall, me estaba poniendo verdaderamente nerviosa

-Bien –Dijo con fastidio

-Tráelos y Kendall, Tn_____ será tu trabajo, no quiero que la dejes sola ni un segundo –Pero que idiotez pensaba este hombre, que me escaparía? No sería mala idea, pero con mis hermanos aquí, no podía darme ese lujo.

Cuando el estúpido de Jason se fue Kendall me mostro mi habitación, estaba en buen estado, reluciente, después de un pequeño e irritante paseo por ella, salimos con rumbo hacía mis hermanos.

-Tn_____, no vuelvas a dejarnos solos –Ambos seguían llorando

-Tranquilos, ahora levántense, iremos a otro lugar –Dije calmada, tenía que mostrarme fuerte, tenía que demostrar que todo estaría bien, aunque era todo lo contrario.

-Nos iremos de aquí ya? –Dijo Lizzy con cierta emoción en su voz

-Solo... -Me tarde un poco en contestar

-Iremos a un mejor lugar –No podía mentirles, simplemente no

Kendall me miraba desde el umbral de la puerta, notaba preocupación y tristeza en su mirada, forcé una sonrisa, no por que quisiera si no porque era la única manera de la cual podía.

Salimos de aquella habitación y subimos escaleras para ir a donde sería la habitación de mis hermanos, Kendall trataba de hacerlos reír pero eran unos niños muy listos y sabía que estaban tensos.

-Bueno enanos llegamos –Pronuncio Kendall mientras abría la puerta de aquella habitación, mis hermanos entraron rápidamente seguidos de Kendall y yo.

-Podemos pintar tu parte de rosa –Se puso en cuclillas frente a Lizzy, ella sonrió débilmente

-Y el tuyo –Señalo a mi pequeño hermano Mike

-Azul oscuro y podemos pintar esqueletos de dinosaurios –Dijo recorriendo una parte de la habitación y señalando las paredes

-Eso estaría genial Kendall –Fue hasta él y le regalo un abrazo

Kendall conocía muy bien a mis hermanos y los quería muchísimo y ellos a él, estaba segura que gracias a el ninguno de mis dos pequeños hermanos había sufrido.

-Que hacemos aquí? –Dijo Lizzy mirándome, pero no sabía que contestar, mire tensa a Kendall buscando ayuda

-Ella tiene que trabajar pequeña y ustedes se quedaran aquí solo un pequeño tiempo –Un gran nudo se formó en mi garganta, y si no era pequeño? Qué tal si ese Maslow es difícil? Lograre enamorarlo?

-Y por qué no nos quedamos con Papa y Mama? –Dijo con su dulce voz, mi mandíbula se mantenía apretada

-Ellos han salido a trabajar por un tiempo en otro lugar
–Dijo Kendall, sabía que le fue difícil decirlo pero debía saber exactamente que sabia

-Yo me encargare de ellos, lo prometo –Dijo cerrando la puerta después de que mis hermanos durmieran, solo asentí y caminamos hacia la habitación de la izquierda en la cual me quedaría yo

-Mañana será un largo día, descansa –Se acercó y beso mi frente

-Kendall –Me miro rápidamente

-Que les pasa a mis padres? –Solté esperando la peor respuesta

-Hablamos de eso mañana ok? –Se tensó

-Por el beneficio de los niño –Tenía razón si era algo malo lloraría sin parar y ellos se darían cuenta

-Bien –Bese su mejilla y entre la habitación

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