II.Sin futuro

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Daniell Fabozzi.

Se que estamos haciendo lo contrario de lo que nuestros padres nos pidieron pero estoy seguro de que ellos estuvieran haciendo lo mismo.

—La señorita Jhonson y sus acompañantes por favor—dije sonriendo.

La señora asintio, reviso el papeleo, esperamos unos minutos y los chicos aparecieron juto con un oficial de policia, vaya suerte.

—espero que esto no se vuelva a repetir—dijo en un tono cortante el policia.

—te lo podría jurar Tobias—dijo Addison.

—pero no lo hace señorita—dijo Tobias.

Addison sonrió de mala gana.

—¿Que fue lo que paso esta vez?—pregunto Lana.
—La señorita Jhonson destrozo con su auto una tienda y se estrello con un poste de luz—dijo el oficial.

¿Solo eso?

—¿en serio?—pregunte fingiendo mi asombro.

—si pero ni que fuera la primera vez—susurro Brueks.

—Espero que el maletin compense todos los daños y espero que jamas nos volvamos a encotrar—dijo Addison entregando le el maletin.

—Su madre no estaría orgullosa de lo que esta haciendo —dijo Tobías.

Todos volteamos a ver lo, encendió algo en nosotros 9 que no debió de haber hecho, sin querer mis dedos tocaron él metal frío de la navaja.

—Usted no sabe lo que mi madre pensaría, así que por favor no se atreva a mencionar la—dijo Brueks y Tyson la tomo de los hombros.

Todos salimos de la delegación y Sofia que do parada observando a Tobías, luego sonrió y nos siguió.

Salimos de la estacion y Brueks se subio conmigo en la moto.

—No quiero que Sofia me regañe—dijo ella.
—Solo yo le digo sofia pero si cada dia esta mas amargada—dije.

y sobre todo buena.

Encendi la moto.

••••

Hay demasiado calor, siento que me derrito, no sabia que era el calor hasta en estos momentos, me ire a la alberca

Me levante de la cama, busque unos shorts, me los cambie, me quite la camisa y tome mi toalla.

sali de mi habitacion directo a la alberca.

Empece a caminar por el pasillo, escuche gritos, llegando a la sala se escuchaban mas fuertes y esos gritos los conozco como la palma de mi mano.

Me recargue de la pared y ahi estaba gritando en italiano con su telefono, se veia realmente chistosa.

Colgo, tiro el celular en el sofa y hasta que se sento se percato de mi presencia.

—Dani—dijo Addison sorprendida.
—Hace tiempo que no me decis asi—dije.

Era cierto, la ultima vez fue en la secundaria, aun lo recuerdo.

—Lo siento Daniell—dijo.

Diablos Daniell, siguele abriendo la bocota.

—¿por que gritabas?—pregunte.

—Son temas que no te corresponden—dijo.

Comencé a cercar me.

—De seguro alguien no hizo lo que tu querias y te enojaste como siempre—dije sentandome a su lado.

Contra Mafias ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora