Mi Ángel Sin Alas Dylan O'Brien Y Tu

Cap.4 ¡Te gusta!

Nuestra tarde/noche en el Mall se nos hizo corta, ya que hicimos un montón de locuras.
Empezando por jugar en las escaleras electricas, el de seguridad nos regaño y casi nos echan.
Después de esa embarazoso situación fuimos al cine.
Insiduos 3 estaba más que perfecta, fue la mejor aún que las otras dos también son buenisimas.
Claire nos dejo en mi casa y entramos un rato para terminar de comer la pizza que compramos.
Austin había salido quién sabe con quien y papá me llamó avisando que hoy no vendrá a casa.
Él estará mañana, para el almuerzo.
Así que teníamos la casa sólo para nosotras.
Oh si, noche de chicas.
Nos tomamos un selfie y la subí a facebook.
Con la descripción de: girls night everyday! Naa mentira solo por hoy.
Love you Janie & Clar.
Ellas enseguida entraron a sus facebooks y le dieron me encanta.

—Chicas, no se olviden. Este fín de semana tendremos nuestra party time. —nos dijo Clar.
—Eso esta dicho Clar, solo tenemos que saber como iremos vestidas. —le dije.
—No se preocupen, pueden venir a mi casa para arreglarnos, vivo solamente con mi hermana.—nos dijo Jane.
—¿Enserio? —preguntamos Clar y yo al mismo tiempo. Sorprendidas.
—Yo vivo con mi mamá y mi hermano pequeño, es un infierno. —dijo y reí.
Joe no era tan molesto, solo era muy entrometido como cualquier otro niño.
—En cambio yo vivo con mi papá y mi hermano mayor.—bufe.
—Cuando tengamos mas edad tendremos nuestro apartamento ¡ya veran!—nos ánimo Janie.
—Si, eso espero.—dije.
A los segundos escuchamos la bocina de un auto.
Seguramente era la hermana de Janie, quien venía a recogerla ya que Claire vive por otra calle y se le haría más tarde llegar a su casa.
Janie cogió su bolso y salimos para despedirla y además dijo que nos presentaría con su hermana.
Me pregunto como sera, ¿rubia igual que ella? ¿ojos verdes?
—Chicas ella es Emma, mi hermana —Clar y yo sonreimos— Emma ellas son ________ y Claire.
—Hola —dijimos al unisolo Clar y yo.
—¿Que tal chicas? —preguntó ella.
—Bien —volvimos a contestar al mismo tiempo.
Ella río.
—Gracias por aceptar a mi hermanita, a veces se le hace difícil hacer amigas—sonrió, Jane la fulmino con la mirada.
Enseguida el auto de Austin se estaciono en la cochera y él bajo feliz.
Jugando con las llaves del auto.
—Hey! —le dije y giro a vernos.
—Ah, hola chicas.. —saludó.
Pero se detuvo y se acerco a nosotras.
—Ah perdón, Emma él es mi hermano Austin.. —le presente.
—Qu.. Que gusto —sonrió con una cara de bobo.
Dios mío, otra vez cayó.
—Aus, ella es la hermana de Janie.
—Ho..hola.. —respondió Emm, se puso nerviosa y lo noté.
Miré a Clar y tenía una sonrisa en sus labios.
Ya sabíamos que estaba pasando aquí.
Ellos hacían contacto visual mientras nosotras nos burlabamos sin que ellos lo notaran, porque.. Estaban en su mundo.
Como me paso hoy, con el idiota.
—Bien, Emma ya tenemos que irnos. —le dijo Jane.
Reí.
—Ah si claro.. Adiós chicas —alzamos la mano en forma de despedida— Adiós.. —le dijo a Austin.
—Adiós.. —susurro él sin dejar de mirarla.
—Por Dios, tu hermano si que es muy predecible. —me dijo Clar.
Sonreí.
—¡Aus! —lo llamé.
El auto de Emma se alejaba cada vez más y él aún seguía viendolo.
—¡Stevens! —le grito Clar.
—¿Que..? ¿porque tantos gritos? -se quejó.
—Deberías ir saliendo de Emmalandia. —le dijo Clar.
Yo reí.
—¡Y pronto! —agregué.
Él nos fulmino con la mirada.
—Bueno, tengo que irme —avisó Claire.
—Ya era hora..—dijo Austin.
Reí y Clar también.
—Adiós Stevens!—se puso de puntitas y beso la mejilla de Austin.
Él hizo una mueca de desagrado y reímos.
Nos despedimos con un abrazo y ella se fue.
Al entrar a casa no pude evitar molestar a Austin.
—¿Te gusta? Fue amor a primera vista ¿no es así?.
—Dejame en paz.
—Vamos dime, se que te gusta!, se notaba en como la mirabas.
—Basta, Stevens menor.
—Austin te conozco hace diecisiete años y se como te portas en frente de una chica.
—Hasta mañana.. —se fue a su habitación.
—¡Aún que lo niegues, se que te gusta, cretino!—exclame.
—¡LOCA! —gritó y escuche su risa.
Rayos, me hizo acordar al idiota.
Con una sonrisa también decidí irme a descanzar, la noche se nos había pasado volando.
Ya casi era medianoche.