Cap. 15 Nunca más te abandonaré

2.1K 116 4
                                    

—¿Que rayos paso aquí? —pregunté entrando al salón de Claire.
Todas las carpetas estaban desordenadas, papeles en el piso, ventanas abiertas, ventiladores encendidos, cortinas casi rotas, entre otras cosas.
Parecía el fin de ciclo, pero aún faltaba un mes para ello.
—Desorden adelantado de fin de ciclo. —dijo sonriendo.
Ella era la única en su salón ya que era salida, vine a verla.
—¡Fin de ciclo ya! —exclamó Tyler entrando al aula.
Clar río.
—Derrochas emoción hasta por los poros amigo. —le dije sonriendo.
—¿Enserio? —sonrió.
—¿Que paso? —pregunto Clar.
—Pues que ¡Al fin!, Jane aceptó salir conmigo. —contó.
—¿QUE? —exclamamos a la vez.
—Así es —su teléfono sonó y respondió.
Se despidió ya que al parecer era su madre, mientras yo aún no podía creerlo.
Creí que ya habian salido, pero Jane es tan difícil, que le da mucho trabajo a Tyler.
—¿Claire puedes apurarte?, Austin no nos llevará hoy. —le dije.
—Pues tu tienes a Dylan para que te lleve, debería ser yo la preocupada. —Se quejó.
—Que tenga Dylan, no significa que te dejaré sola.—le dije.
Ella sonrió.
—Lose, tú jamás abandonas a tus amigos.
—¿Interrumpo? —su voz invadió el aula.
Giré a ver al pelirojo para luego dejarlo solo con Clar.
Sabía que tenían que hablar, así que fui a buscar a mi idiota.
Pase por su casillero y lo encontré ahí, leyendo un libro.
Lo abracé por detrás y él cogió mis manos que estaban en su pecho.
—Amor... —saludó.
Sonreí, como amaba que me llamará así.
—¿Te digo algo? —pregunté.
Él asintió.
—Me encanta que te preocupes por tus estudios. —él giró para mirarme a los ojos.
—¿Enserio? —preguntó sonriendo y acariciando mi mejilla.
Asenti.
—Que linda eres... —dijo
—Lose... —sonreí.
Él río y me dio un beso en la mejilla.
—Ehm... Dyl ¿puedo hablar contigo? —nos interrumpió una voz.
—¿Si...? —respondió él.
Aquella chica era... Leanna.
Nisiquiera me miró, solo tenía ojos para él, al igual que yo.
—Te espero en el estacionamiento ¿si?—me dijo.
¿QUE? ¿ME ESTAS HABLANDO ENSERIO, DYLAN O'BRIEN?
—Claro... —asenti.
Él me miró profundamente a los ojos antes de irse y yo no sabía como reaccionar.
¿Porque Leanna buscaba a Dylan? ¿De que tenían que hablar? ¿porque él aceptaba ir con ella?
Todos sabemos las intenciones que tiene hacía Dylan, confío en él pero no en ella.
Lenna se había alejado de Dylan desde que estamos juntos, porque le dejo bien en claro cuales eran sus intenciones conmigo y no quería hacerme daño.
Sin embargo, a ella le da igual si me hace daño o no con tal de conseguir lo que quiere.
—¿Porque esa cara? —me preguntó Jane
—Nada... Solo estoy esperando a Dylan. —le dije cruzandome de brazos.
Estaba hace más de quince minutos en el estacionamiento, esperando a Dylan.
—Dylan ya se fue. —me dijo Tyler entrando a la conversación.
—¿Que? —preguntamos a la vez Jane y yo.
—Si... Dijo que tenía que llegar rápido a su casa, pero creí que se fue contigo _________.—explicó Tyler.
Jane apoyo su brazo en mi hombro y no dijo nada.
Tyler seguidas veces intento salvar a su amigo pero solo fueron intentos fallidos ya que Jane lo interrumpía diciendo que no diga ninguna palabra más porque no es justificable irse con alguien más sabiendo que había alguien esperando.
Tyler se ofreció a llevarnos ya que Thomas había llevado a Clar.
En el camino, no dije ninguna palabra, solo estaba esperando la llamada de Dylan para saber donde se encontraba y porque se fue sin mí.
Al entrar a mi casa no encontré a nadie, sé que Austin se quedó con su asesor académico para la exposición de mañana y que papá trabajará hasta tarde para poder llegar mañana a tiempo.
Fui a mi habitación a dejar mis cosas y encendí mi laptop.
Necesitaba distraer mi mente un rato.
Abrí mi facebook y juró que me arrepiento de haberlo hecho.
En inicio me apareció el estado de Leanna.
-"Una hermosa tarde contigo rey, gracias por escucharme" —se siente bendecida😇 con Dylan O'Brien"-
Y lo había publicado hace media hora, así que seguía con ella.
¿Pero que rayos tenía que hacer con ella?
¿Porque no me llama?
¡Diablos Dylan!
Apagué mi laptop y me tiré en mi cama.
Di un suspiro y giré para ver mi mesita de noche.
Ahí tenía una foto con mamá y atrás una con Dylan.
Extrañaba mucho a mamá, me hacía mucha falta, necesitaba escuchar sus consejos ahora mismo.
O simplemente escuchar que me cuente como estuvo su día y las cosas que hizo con una sonrisa, describiendo cada detalle, eso bastaba para estar tranquila y feliz.
También extraño a la abuela, quien amaba peinarme.
Me hacía trenzas cuando mi cabello era largo, ella siempre decía que yo era como mi cabello, grande, fuerte y recia.
¿Porqué no la llamo?
—¡Hija! —exclamó feliz.
Sonreí y pase mi cabello hacía atrás.
—Abue... —conteste con la voz apagada.
—¿Te olvidaste de esta anciana? ¿Porque no me llamabas cariño? —preguntó y enseguida sentí su tristeza.
—Lo siento abuela, la universidad me tiene ocupada y...
—Lo entiendo querida, pero dime ¿como estás?
—Bien abuela, te extraño. Espero que almenos en vacaciones pueda ir a verte.
—Me encantaría que vengan. —dijo.
Sonreí.
Le hable sobre Austin y también sobre las locas amigas que tengo en la universidad.
Le conté que Austin mañana daría una exposición en la universidad y ella estaba orgullosa, me dijo que tomé muchas fotos para enseñarle.
—Abuela... Me encanta hablar contigo, me hace olvidarme de mis problemas por un minuto. —le dije.
—Sabes que siempre tendrás a tu abuela para que te escuche y aconseje.
—Gracias abue.
El timbre de mi casa sonó.
—Espera... Seguro debe ser Austin, para pasartelo. —le expliqué.
—Me encantaría hablar con él, Jade me dijo que esta muy guapo. —dijo la abuela.
Mientras yo bajaba las escaleras para ver de quién se trataba.
Jade es una prima en común que tenemos y seguidas veces va a visitar a la abuela. Ella se quedo en Londres y siempre nos comunicamos por facebook, talvez vio las fotos de Austin.
—Si abue, esta muy guapo. Las chicas no lo dejan en paz. —reí.
Ella también río.
—El sarcasmo siempre será parte de ti mi niña. —reí aún más y finalmente abrí la puerta.
Mi sonrisa se borró en un instante al ver a Dylan en la puerta de mi casa.
—¿Sigues ahí __________? —preguntó la abuela.
—Si.. Si estoy aquí.
—¿Y quién es? ¿Austin? —preguntó.
—No, es...
No quería decirle a la abuela que tenía novio, eso implicaría contarselo hoy mismo todo, y por todo me refiero a describir a Dylan, contarle como nos conocimos, como nos enamoramos, como me trata, cuantos años tiene, porque me fijé en él, etc.
Y para ser sincera no tenía ánimos para recordar esos lindos momentos, almenos no ahora.
—Hola... —susurró él.
—Abuela... Te llamo luego ¿si?
—¿Paso algo? —preguntó algo nerviosa.
—No... Solo recordé que tengo que terminar un trabajo y....
—Te entiendo mi niña, no te preocupes, hablamos luego. Cuidate.
—Gracias abuela, te quiero.
—También yo.
Colgué y acaricie el celular en mis manos.
—Puedo... ¿pasar? —pregunto él, aún en la puerta.
Camine hacía mi sala dandole el pase.
Él entró y cerro la puerta.
—Sé que debes estar molesta...
—¿Porque me abandonaste por irte con ella? Si, ¿porque no me avisaste? Si, ¿porque te pareció poco irte con ella y dejarme en la universidad sola? Si.
—Ok... Si estás molesta.
—Dylan no se que haces aquí, ve con tu puta. —le dije mirandole a los ojos.
Él se acercó más a mí para acorralarme en la pared.
Lo estaba tomando todo como un juego, se supone que tiene que explicarme, es un momento serio.
—Me encanta que te pongas celosa. —me dijo.
—Más que celosa, estoy furiosa. —le dije— porque me dejaste por irte con ella Dylan.
—La batería de mi teléfono se descargo.
—Si claro. —dije rodeando los ojos.
Él saco su teléfono y me lo enseñó, es verdad, estaba muerto su teléfono.
—Ni bien terminé con ella, vine a explicarte como fueron las cosas.
—Yo no necesito que me expliques nada.
—¿Enserio? —preguntó confundido.
Asenti.
Tenía un plan en mente y veremos si también le gustará.
—Pero no quiero que estemos peleados, ella solo....
—Shhh... —puse mis labios en los suyos para callarlo.
—Uhmm... —se quejó y se separó lentamente para verme a los ojos.
—¿Que pasa? —le pregunte.
—¿Segura que estas bien? No me molesta explicarte lo que paso.
Cogí sus mejillas y deje un pequeño beso en su perfecta nariz.
—Confío en ti —le dije— ¿tú confías en mí?
Él estaba un poco extrañado por mi reacción.
—Plenamente.
—Bien.
Lo volví a besar y luego lo abracé.
No te imaginas lo que te espera O 'Brien.
Pero solo tenía que encargarme de que me prometa algo.
—¿Me extrañaste? —preguntó sonriendo.
—Mucho... —sonreí— no lo volverás hacer ¿verdad?.
Él me pego más a su cuerpo entrelazando sus manos alrededor de mi cintura.
—Nunca más te abandonaré. —me dijo.
—Prometelo. —me colgué de su cuello.
—Lo prometo.
—Tienes que decir las palabras. —le dije.
—Prometo no dejarte sola nunca más. —sonreí.
—Muy bien. —le di un beso y el sonrió.
Me miraba profundamente tratando de decifrar que estaba pasando.
Porque el sabe que soy muy orgullosa y fácilmente no le perdonaría.
Pero ni se imagina lo que le espera.
No es por ser vengativa ni nada, pero hay que poner las cosas en orden, le daremos un poco de su propia medicina.

Mi Ángel Sin Alas Dylan O'Brien Y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora