Capítulo 33 - Nota de suicidio

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Hace un día

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-No me gusta hablar de mis problemas, Íkaros.

-¿Por qué? -Pregunta Íkaros a Leticia-

-Las personas tienen demasiados problemas, como para que alguien venga a molestarlos con los suyos propios, además, ¿qué tanto le puede importar a alguien lo que te pasa? Al final, lo único que te dicen es que todo va a mejorar. ¡Estúpidos!, por eso yo misma resolveré mis problemas, pero gracias por preocuparte, Íkaros.

-Sigo sin entender ¿por qué me alejas de mis amigos? Me encantas Leticia, pero no puedes tan solo tomarme y ya.

-Si puedo, eso es lo que estoy haciendo.

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Lena luego de salir del hospital donde estaban Beth y Noah

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-Este tal Ethan me cree idiota... -Comienza a decir- ¿Cruce a la derecha? Luego... ¿A la derecha de nuevo? Y sigo a la derecha y otra vez a la derecha, me pone a dar vueltas en círculos, ¡Es un idiota! ... Ah mira, aquí cambio de ruta... ¿Por qué no simplemente me dio la dirección y ya? ¡Yo viví en Nueva York, Ethan!

Lena leía las indicaciones, eran solo cruces, no indicaba dirección específica alguna, mientras más leía del papel, menos sentía que llegaría, y era tan largo el bendito papel, que ella ya quería romperlo.

-Luego llego a un semáforo... Perfecto, ¿Y ahora? cruzo a la derecha otra vez... ¡Maldito Ethan! Veamos, leeré y me saltaré todas las vueltas innecesarias para llegar, tiene que haber un fin... Tiene que haberlo...

Al pasar un rato leyendo y siguiendo las direcciones a su modo, Lena se estaciona detrás de una casa.

-"Salta la cerca" ... ¿En serio debo saltar la cerca? ¿Será una trampa? -Dice Lena mientras cae al otro lado de la cerca- Porque si la es, ya caí... "Entra por la puerta trasera", está bien... ¡Está abierta! Perfecto...

Lena se queda sin palabras, esas paredes las reconoce... No puede creerlo.

Se da media vuelta y...

-Lena. -Dice Ethan desde el interior de la casa- ¿a dónde vas?

-Aquí vivía yo... No puedo estar aquí, no quiero..

-Lo sé, lo sé... Por eso no te di dirección alguna en el papel, y te hice perder tiempo para llegar hasta acá antes que tú, sé que si llegabas, te irías, y si te traía, también te irías... O simplemente ni te dejarías traer...

-¿Para qué me quieres acá? ¿Qué tienes en mente? -Pregunta Lena aterrada-

-Ve a la habitación de tu hermana. -Ordena Ethan-

-¡No!, no quiero estar aquí, ¡no voy a estarlo!

-No te preocupes, no será nada malo... -Aclara él-

-Me quiero ir, Ethan.

-¿De qué huyes? Si lo que llevas dentro te seguirá a donde vayas.

-Yo... Tan solo... Ethan...

Ethan abre sus brazos y sonríe.

Lena lo observa, se le coloca la piel de gallina, y de un segundo a otro frunce su ceño.

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