Veintiuno.

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La peliazul seguía con su "trabajo", escribir los libros. Se escuchó el eco de zapatos dirigiéndose hacia ella, el Dios ojimorado se puso al lado de ella.

Esta no lo miraba, pues concentrada estaba escribiendo.

—Lo siento.

La Diablo paró de escribir, para mirar ligeramente al Dios.

—No fue tu culpa, no tenías porqué saber.

Y aunque fueron simples y casi secas palabras, fueron lo suficiente para sacar un poco de culpa en Fumus. El mismo se sentó en un sillón, cerca de Indie, leyendo lo que escribía.

Nunca se había fijado, pero Indie tenía una linda caligrafía, un casi perfecta.

Nunca conoció a alguien con una caligrafía así, por lo que era un gusto apreciar aquella bella letra.

La de ojos negros comenzó a incomodarse por la mirada del fumador, suspiró. En donde un punto y aparte iba se quedó, seguiría más tarde.

—Tienes una linda caligrafía.

Indie lo observó.

— Así que por eso mirabas tanto— Dios asintió, mientras aguantaba las ganas de prender un cigarro—, gracias.

Hubo silencio, se miraron a los ojos. Indie apartó la vista, nunca le gustó tener contacto visual por mucho tiempo con alguien. Volvió a mirarlo, este miraba a un punto fijo de la pared, como aguantando algo.

— Ahg, puedes fumar— El Dios se sorprendió—. Si si, pero a la ventana, que se llena de humo la biblioteca.

— Gracias.

Mientras encendía el cigarrillo se iba acercando a la gran ventana, por la cual a través se podía ver el cielo azul.

La imagen que veía, por más exagerado que suene, estaba para un concurso de fotografías profesionales. El aspecto pensativo, el cigarro en la boca, la luz contra su cuerpo, los ojos con luz apagada, las ojeras bajo sus ojos, el humo saliente de su boca...

Daba hasta casi una imagen angelical.

— Tan angelical que pareces, lastima en realidad ocultes lo sádico que eres en esa máscara, Dios.

Paró de fumar, su mirada se oscureció. Lento, se fue acercando poco a poco hacia la Diablo de aquel mundo. Cuando llegó, apagó el cigarro en un cenicero que hizo aparecer.

Se inclinó, y la miró penetrante. Esta vez, la unicuerno mantuvo la mirada.

— ¿Qué sabes de mi?— Sonrió de manera retorcida, Indie utilizó su tono de voz mas frío.

— Yo se toda la historia de todos, Fumus— Aquel tono, aquellas palabras.

Podría causar en cualquiera un escalofrío, pues al Dios casi le da uno.

La tomó del mentón y la acercó más.

— ¿Me odias?— Indie sonrió de costado.

— Todos los Dioses son mierda para mi.

— cuidado con tu vocabulario, Indie.

— ¿Si no quiero?, ¿Me torturarás al igual que Taffy?— Desafió, a centímetros de Dios.

— Cuidado, podría tomarte la palabra...

Así se quedaron, Indie reaccionó al sentir la respiración del Dios chocar en su rostro. La sangre le subió al rostro, pero no podía apartar la mirada del maldito Dios.

A no ser que un grito se escuche desde la cocina, como no.

Se levantó rápidamente y salió corriendo,Fumus suspirando, salió después de ella.

Al llegar, agitada se encontró algo muy cómico.

"Mamá Lyan" se encontraba con sartén en mano, las chicas detrás de ella y Surreder pisando la espalda de lo que parecía ser un Diablo de pelo negro.

«No me digas que...»

— ¡Este tipo estaba acosándonos!— Vociferó Lyan.

— Ah, él es así— Habló con suma tranquilidad Fumus.

Era Satanick.

Ese Diablo.

Tu Diablo, ¿Verdad?

Oh bueno, no sabes a quien me refiero.

Sólo queda leer.

Ahora que lo pienso, ¿Por qué escribo esto, si muchas veces me trae amargos recuerdos?

Todos los mundos tienen su historias escrita aquí.

Esa es una razón.

La otra, es que aún recuerdo cuando me dijiste que la historia de este mundo debería ser escrita.

¿Lo recuerdas también, Mirai?


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Quien sea fan del Fumindie, odieme por el casi kiss (?)

Quien no espere al siguiente capítulo, amargad@ (?)

AHRENO

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⏰ Última actualización: Dec 20, 2020 ⏰

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「Indie」:「 The History.」[Cancelado y desactualizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora