ENCIERRO | M-H-Y 11

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Mini-Historia Yuri 11

(Guardia) Y estas son las celdas, escucha bien Valeri, estas personas en cuanto te vean empezaran a causarte todo tipo de molestias, si creías que el pabellón de los hombres era desagradable el de las mujeres no es mejor, el jefe me pidió trasladarte si no sientes que das la talla para este trabajo, dime ¿Estas segura de esto?

(Valeri) (Incomoda) Estoy segura, ya no soporto estar en el pabellón de los hombres.... M-Me dan escalofríos

(Guardia) (Compasivo) ¿Segura que quieres ser guardia? Este trabajo requiere ser fuerte y tener paciencia, no te culpare si después de unos días quieres volver a tu oficina

(Valeri) Quiero estar aquí, ya estuve gran parte de mi vida sentada en una silla ya sea estudiando u ordenando papeles, si sigo así engordare

(Guardia) (Bromista) Para eso existen los gimnasios

(Valeri) ¿Te parezco el tipo de persona que va al gimnasio?

(Guardia) No {Tampoco pareces el tipo de persona que viene a trabajar de guardia en una prisión} ~Suspiro~ Esta bien, en todo caso buena suerte, esta semana empezaras en el turno matutino, la siguiente semana empieza el turno vespertino y si vemos que no tienes problemas te dejaremos el turno de la noche en tu tercera semana

(Valeri) (Confiada) Tranquilo estaré bien! Me crie con 4 hermanos mayores

(Guardia) {Me preocupa} Esta bien, ve a ordenar tu casillero nuevo empiezas mañana

(Valeri) Ok! –Respondió emocionada-

Al día siguiente

7am

Narra Valeri

Este pabellón era más silencioso que el de los hombres en la mañana, las prisioneras estaban silenciosamente dormidas y el corredor estaba solo, mi rutina de vigilancia era patrullar el primer piso por 30 minutos, revisar las celdas del piso en el que estaba y también las de los otros pisos sin abandonar mi puesto, después subía al segundo piso y repetía rutina, hice esto 3 semanas y me asignaron otra vez el turno de la mañana, al parecer no era la gran cosa el turno nocturno, a esa hora todas las prisioneras estaban dormidas

Un día después de mi día de descanso regrese a mis patrullajes matutinos y note un cambio

(Valeri) (Confundida) –Frente a la celda 45- ¿Y ella quién es?

La celda numero 45 siempre estaba vacía, a veces en las noches entraba a dicha celda y bueno.... Atendía una de mis necesidades sexuales, ¿Quién podría culparme? Tengo 24 años y no he tenido novio desde que estaba en segundo de preparatoria, soy humana déjenme!, bueno volviendo al punto, ahora la celda numero 45 ya no estaba vacía, asumo que durante mi día libre internaron a una nueva prisionera

Cuando la vi por primera vez me quede sorprendida, era una hermosa mujer alta, más o menos de un metro ochenta, con un hermoso cabello negro que le llegaba a los hombros, un par de hermosos y profundos ojos color verde oscuro y con un atractivo cuerpo que forzaba a su uniforme de prisionera a estirarse lo más que podía haciendo destacar su delgada cintura y sus sensuales caderas, sin mencionar la envolvente mirada que poseía

Tener frente a mí a semejante mujer, quien me devolvía la mirada, me hiso perderme en mis pensamientos hasta el punto de olvidar completamente mi rutina de vigilancia

Minutos después

(Valeri) (Sonrojada) H-Hola, ¿C-Como te llamas?

Ella al escuchar mi pregunta me sonrió y guiñando el ojo me dijo

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