Bellatrix Malfoy y James Potter: enemigos eternos.⛓

Espías

Bellatrix y Albus llegaron a la choza a pie del Bosque Prohibido.
Ninguno de los tres se imaginaba que sus padres lo observaban escondidos detrás de las piedras como cuando eran niños.

-¿Qué quieres, Potter?
-Vete, Albus.
-No, él no se va. ¿Qué quieres?
-Deja que se vaya, en serio.
Bellatrix le soltó y dijo enfadada:
-Dime ya que quieres.
-La marca...
-¿La marca que? Dimelo rápido porque he e venido exclusivamente aquí por eso, no porque me apetezca hablar contigo.
-Cuando te duele algo a mí me duele la marca. Cuando tenias la serpiente en el brazo yo la notaba. Cuando te has quedado congelada yo también. Cuando te has puesto pálida yo también. Y cuando has pensado en el recuerdo para el Patronus, he visto en que has pensado.

Bellatrix se quedo quieta. Estaba asustada pero no iba a dejar que un Potter la viera así.
-¿Y a mí que me cuentas?
James chasqueo la lengua.
-No se puede hablar contigo, joder.
-No, ¡tú no puedes hablar conmigo! ¡POR TU CULPA MI PATRONUS ES UN MALDITO LEÓN Y TÚ ERES UNO DE MIS BOGGARTS!
James no dijo nada. Bellatrix lo miró esperando una respuesta. Como no hablaba lo hizo ella:
-¿Y cuál es tu maldito Patronus, Potter? ¿Una leona? ¿Una serpiente? No, mejor. ¡Algo que no dependa de tu peor enemigo!

Dicho esto se dio la vuelta y subió corriendo hasta el castillo. En la cima de la colina vio unas sombras que se movían detrás de una piedra.
La rodeo y vio a los Potter y a los Malfoy detrás.
-¿¡SE PUEDE SABER QUE HACÉIS!?
Ginny habló:
-Estamos espiando a... James. Solo a James.
-Eso.-dijeron a coro los demás.
-¿Si o qué?-dijo alzando una ceja.- No vais a ver nada interesante, solo os lo digo.
En ese momento apareció James y hablo dirigiéndose a todos:
-Si, entre nosotros no vais a ver nada. Pero si la espiáis cuando está con Zabini vais a ver cosas mucho más interesantes.

Bellatrix quiso matar a James. Draco y Astoria se volvieron hacia su hija:
-¿QUÉ QUIERE DECIR POTTER CON ESO?
Bellatrix se puso roja por la vergüenza y por la ira.
-¡QUIERE DECIR QUE GRINDELWALD SE HA EQUIVOCADO, Y QUE EL ES UN MALDITO ENTROMETIDO QUE SOLO QUIERE PROBLEMAS! ¡ESO QUIERE DECIR!

James le dedico una sonrisa burlona:
-¿Quieres que nombre a más gente, Bella?
Draco y Astoria se pusieron pálidos y miraron a su hija como si no la conocieran.
-¿Cómo que a más gente?
Bellatrix se giró hacia James y le dio un puñetazo en la cara de nuevo.
-¡Imbécil! ¡No es mi culpa que a ti no te quiera la gente!
Los padres terminaron de pillar con eso lo que James quería decir. Astoria habló:
-¿Qué tienes con Zabini, Bellatrix?
-¡Nada!
James se rió por lo bajo y dijo en tono vacilon:
-Nooo, que vaaa...
Bellatrix le dio una patada y se dirigió al castillo corriendo.
Sus padres la llamaron. Puso oír cómo los Potter echaban una bronca a su hijo por meterse donde no le llamaban.

Draco la cogió y Astoria también los alcanzo:
-¿Qué decía Potter de Zabini?
-¡Nada!
-¿Sois novios?
-¡Qué no! Solo... Bueno, no importa.
-Si importa. ¿Qué habéis hecho?

Como no, James llego para molestarla.
-Señores Malfoy, no se preocupen. Solo se han besado.

Astoria se quedó de piedra y Draco no reaccionaba. Bellatrix miró a James, que se quedó de piedra. Bellatrix tenía lágrimas en los ojos. James se sintió fatal sin saber por qué. Entonces entendió algo. Zabini se llevaba bien con los Malfoy, pero no era completamente sangre pura, vamos, que nunca la dejarían salir con el. Por su culpa Bellatrix Malfoy estaba llorando.
En otras circunstancias se habría reído de ello, pero por alguna razón si Bellatrix parecía triste, él estaba triste.

Draco cogio a su hija por el hombro y la dijo muy serio:
-Que no-vuelva-a-pasar.
Bellatrix apartó el brazo de su padre y le miro con los ojos llenos de lágrimas. A su madre se la partió el corazón. Bellatrix nunca lloraba. Nunca.
Draco también lo notó, pero no podía permitirlo.
Ella los miró por última vez y volvió al castillo. Quería matar a James lentamente... Muy lentamente... Que sufriera. Todo era por su maldita culpa.
Al llegar a la sala común todos hicieron como que no había pasado nada y la felicitaron.