Muerta de miedo

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Lo miré de frente, encapuchado, me miró a los ojos, me tocaba mi cabello.  Estaba largo otra vez como lo tenia antes de cortarmelo y me dijo...
"vas aser mia Daiana".

Me desperté sobresaltada.
Diosss..... otra pesadilla, gracias a Dios habia sido otro mal sueño.  Me levante de golpe y vi que la puerta estaba abierta.  Me extraño que así fuera y traté de mirar hacia el otro lado.  No veia mucho, solo ladrillos y paredes.  Miré la reja donde estaba y traté de buscar una salida.  No paso mucho tiempo en observar que había un boquete, estaba  remendado, bastante mal porcierto. Volví a mirar y supe que no seria tan fácil salir por alli.  Estaba un poco pegado a la pared, asi que tendria que bajarme, doblarme como pudiera y subir por la misma reja.
Gracias a Dios era muy delgada y eso me ayudaria, pero antes tendria que asegurarme donde estaba mi secuestrador. Era raro que hubiera dejado la puerta asi, abierta.  No iba a llamarlo, eso seria contraproducente.  Tendria que ariesgarme, eso me atemorizaba de una manera horrible, pero no podia hacer otra cosa.

Traté de no hacer ruido y me dispuse a salir por donde ya estaba segura lo lograria.  Me agache lo mas que pude, y empezé a sacarle los amarres de alambres a la reja, cortándome las manos,  pero no le di importancia, asi que  segui con mi plan.  Habia logrado soltarlo completamente y me empezé a doblar.  Me lastimaba la piel, pero seguia subiendo como podía, hasta que logré salir por el otro lado, pegándome contra la pared, lástimandome mas la espalda.  Tenia que girarme de frente, subir y saltar.  Después de mucho esfuerzo y sin hacer mucho ruido, lograba hacerlo.  Mi corazón se desbocó y me llené de energia ya que vendria lo mas dificil, no encontrarme con el.  Nada mas el pensamiento se me enchinaba la piel y mi cuerpo empezó a temblar.  Pero ya llevaba la mitad de mi objetivo logrado, no iba a dar marcha atras, no lo haria.  Así que
segui caminando lentamente.  Tenia una sandalia rota y los pies me dolian.  Llegué hasta la puerta por donde entraba el y miré hacia todos lados.  No estaba, así que segui dispuesta a salir, pero pude percatarme que habia una libreta encima de una mesa, fue tanta la curiosidad, que la tomé en mis manos y la abri.
Pasé rapidamente todas las hojas, estaban vacias, pero entre medio de dos paginas habia algo, que era?, un papel, una nota, una foto quizás.  La sostuve entre mis dedos y la giré sintiendo que me desmayaba.  Tambalee por no caer sintiendo que el miedo se apoderaba de mí.

Era yo, yo estaba en esa foto, con un vestido negro, el que abia usado en mi fiesta de graduacion al terminar mis estudios. Llevaba mi cabello largo, un poco mas abajo del hombro, estaba muy sonriente.  Pero habia algo mas, aquella foto la habia tomado alguien sin que yo me hubiera percatado.   Alguien me seguia ese dia, seria el? me conocia desde antes? o era un sicopata que perseguia chicas?
Tiré la foto y me quise largar de alli en aquel preciso momento.

Escuché un ruido, pero venia de lejos, corri hacia la otra puerta que daba a la salida y vi una casa vieja de madera.

Escuché un ruido, pero venia de lejos, corri hacia la otra puerta que daba a la salida y vi una casa vieja de madera

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Mi secuestrador vivia alli entonces y me tenia en un calabozo hecho a ladrillos, no muy separado de su casa.
Entonces iba y venia, se quedaba en su casa y me llevaba cosas desde alli.  Seria mas fácil irme, asi queria creerlo.

Me decidí a salir cuando escuché el animal ladrar y él dándole algo, quizás  comida.  Lo observé mientras le hablaba a su perro y pude notar que no tenia la capucha puesta. Dios que tonta habia sido, no la traia puesta. Estaba dispuesta a verle la cara, pero estaba lejos, solo lo veia de espaldas. Pude notar que efectivamente estaba rapado, era calvo.  Se veia joven, con mucha agilidad y bastante rapidez.

-Dios si se volteara.....
-dije sin dejar de miralo un segundo.

De pronto el perro dejo de jugar y miró hacia donde yo estaba. Él siguio la mirada del animal, quedándose unos segundos petrificado.

Me entro un miedo infernal y no hice otra cosa que salir corriendo como una loca hacia el bosque. No podia huir como queria ya que tenia una sandalia rota, así que me deshice de ella y así poder correr mas. Escuché que el animal ladraba detrás de mi y lo escuche a el cuando le dijo........

-Atrapala......

Corria y corria pero el animal pudo mas que yo, alcanzándome, tirándome sobre el suelo.  Se me abalanzó sobre mi cuerpo jalándome las ropas, rasgándome todo el pantalón.  Me volvi loca gritando tratando de sacarlo de encima de mi cuerpo y logré levantarme.  El perro volvió a tumbarme al suelo al mismo tiempo que el llegaba corriendo, dándole órdenes al perro de que me soltara.

Noté que se habia puesto la capucha.  El perro lo obedeció, demostrando lo fiel que era y él...... él me miró con la mirada mas malévola y cruel llena de furia que no habia visto yo jamás en mi vida.

Sentia pánico ante su reacción, ante aquella mirada tan amenazadora ya que estaba segura de que  me mataria.

-Ahora vas a pagar por lo que has hecho.  -dijo intimidándome, al mismo tiempo que me levantaba del suelo por el cabello.  Me levantó de un solo tirón, casi arrancándomelo de la cabeza y empezé a gritar, a llorar desesperada ya que el dolor en mi nuca era insoportable, pero eso a él no le importó.

-Porfavor.... porfavorrr.... lo siento, te juro que lo siento, no lo volveré hacer, me lastimas, sueltame.... decia desesperada tratando de zafarme de sus grandes manos.

Me arastró por el cabello hasta que me levantó completamente obligándome a caminar, empujándome al mismo tiempo. Me llevó nuevamente a mi celda, porque eso era para mí aquello, una celda.  Me empujó con su cuerpo para que yo entrara primero que el. 

Yo estaba llorando, pero no quise mirarlo ya que tenia mucho miedo. De pronto no escuché sus pasos y me atreví a mirar hacia atrás.  El estaba cerrando la primera puerta, y porque?

No tardé en saberlo y me quise morir en aquel mismo instante.

SECUESTRADA (PARTE 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora