Podría partir esta carta de tantas formas que no me decido cual es la mejor, tantas cosas tengo que decir sin saber como comenzar, mi cuerpo tirita, mi mente tiene una mezcla de recuerdos que en este momento me hacen dudar y mi corazón late con fuerza al aceptar la decisión que me llevó tanto tiempo tomar.
Perdón, perdón es la palabra que mas leerán en este papel, perdón a mi madre, mi padre y mis hermanos, le pido Perdón a mis amigos, a mi pareja. Pero, creo que a la persona que mas le pido perdón es a mí, a mi vida por no ser lo suficientemente fuerte para salir adelante, para intentar salir de este vaso que cada vez me ahoga más. No saben cuantas noches lloré encerrado en mi habitación, cuantos días llevo sin comer mirando mi reflejo contra el espejo. Ningún dolor sería suficiente para ocultar este que llevo conmigo de hace tanto tiempo, no habría acción posible para que mi mente dejara de dar vueltas por las escasas opciones que me quedan. Me ahogo, me hundo y ya no quiero pelear más, ya no quiero seguir luchando contra esto, quiero desaparecer, dejar de sentir y que mi mente se apague de una puta vez.
Madre, mamita mía, partiré por ti, lo siento tanto, no sabes cuanto pense en ti al tomar esta decisión, sé que la pasarás mal pero, por favor mamita linda entiendeme. Detesto no ser bueno para algo, odio que siempre alguien sea superior a mi en todo sentido, no soy bueno para nada y no soy bueno para mi. No lo estoy pasando bien, llevo tanto tiempo así que ya me ahogo en mi propia mierda. No quiero levantarme de la cama mami, me siento tan mal con mi persona, necesito ser otro, volver a comenzar y esta es mi oportunidad.
Papi, viejo, amigo, compadre. Perdón por mi cobardía, por querer detener todo esto de la forma más sucia y rápida, se que no me enseñaste esto pero, ya no quiero más, no quiero más. Sé que me criaste de otra forma, que los valores que me entregaste eran distintos y lamento tanto no poder respetarlos.
Hermanos, pueden ser mejores que yo, cuiden a los papás y hagan lo que les gusta en la vida. No se dejen llevar por lo que les dice la gente, sean felices. No cometan el mismo error que yo, busquen su felicidad ahora que están a tiempo.
Amor, Nicolás, Dios como desearía poder decir todo esto a la cara, si me dieran un deseo en la vida seria tener el valor para mirarte por última vez, besar esos labios que me enamoraron desde el primer día que te vi. Día a día doy las gracias por conocerte, cada día agradezco haber tenido tu hermoso rostro junto a mi en la cama, siempre te amé negro y podría jurar que te amaré incluso en la otra vida. Fuiste un pilar fundamental en todo el camino que recorrí y te pido perdón por todo lo que alguna vez hice, por hacerte llorar cuando encuentres esto y por no ser hombre suficiente para ti.
Gracias, gracias a todos por darme lo necesario para sonreír más de una vez, por acompañarme en las noches frías y los días alegres. Gracias por confiar en mí sus secretos y dolores, lamento no ser igual y poder detener esto. Me doy asco, no soy capaz de mirarme al espejo sin ver la mierda de persona en la que me convertí, en lo infeliz que soy a pesar de tener tantas cosas lindas a mi lado. No puedo, no puedo ser feliz, quizás no lo merezco y por eso hasta el mismísimo Dios dejo de escuchar mis plegarias últimamente.
No puedo pedirles que no lloren por mí, sé que todo esto es egoísta de mi parte, pero lamento hacerlos llorar. Lamento que tengan que pasarla mal debido a mi persona y les pido, con todo mi corazón y las pocas fuerzas que me quedan, déjenme ir. Esto es lo que yo quiero, no piensen de más, no justifiquen mi acción, solo perdonen mi egoísmo y recuerden que los amé con toda mi alma.
Los amo, te amo y espero puedan perdonarme.
~Jaime Navarro.