Capítulo 13: Perfect Two.

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-¿Pero se puede saber para qué quieres unos calentadores en España?

En unas horas McFly se iba de viaje a España, y el muy desastre de Dougie todavía no había hecho la maleta.

-¿No hace frio?

-No Dougie no, hace calor, mucho calor.

Yo estaba sentada en su cama doblándole camisetas y metiéndolas dentro de la maleta, él sacaba cosas del armario y me preguntaba.

Al cabo de una hora estaba la maleta hecha, cerrada y Dougie y yo tumbados bocarriba sobre la cama.

-Te voy a echar de menos -e dijo.

-Y yo a ti... -me acarició el brazo con la yema de sus dedos. Yo me volví para mirarlo.

-¿Me vas a dejar con las ganas? -enarqué una ceja.

-Con las ganas de...

-Tú tienes que decirme -se aclaró la garganta para imitar mi voz-, Dougie por favor no te vayas a España, quédate aquí conmigo, no podré soportar cuatro días sin ti -comencé a reír.

-¿De qué te ríes? -no podía parar-. ¿Tanta gracia tiene que quiera que me digas que no quieres que me vaya?

-Lo que tiene gracia es lo tonto que eres.

-Ya ves tú si soy tonto que me he buscado una novia que ni me echa de menos... -calmante en el hombro-. Ayy que bruta eres.

-Métete con los de tu tamaño Poynter -entrecerré los ojos en señal de guerra.

-Con que esas tenemos ¿no?

Me levanté corriendo de la cama porque sus intenciones se veían claras. De un salto y con ayuda de mis brazos salté la cama, nos quedamos cada uno a un lado.

-Muajajajaja -grité-, no vas a poder conmigo.

-Eso ya lo veremos.

Dougie me imitó y saltó la cama igual que yo, pero para entonces yo me había ido de allí y estaba al lado del armario. Dougie vino hacia mí y me pegó aun más al mueble, yo no me escapé.

-Con que no iba a poder contigo... -me hablaba demasiado cerca.

-Es que te he dejado.

-Pues no deberías de haberlo hecho.

-¿Por?

De un momento a otro me cogió y se fue directo al baño. Se metió en la ducha conmigo y le dio al grifo. El mango de la ducha estaba enganchado de la pared, por lo que no fue muy difícil que el agua nos pusiera empapados enseguida.

-Poynter eres estúpido -le dije enlazando los brazos alrededor de su cuello y comenzando a besarle.

-Lo sé -él se había unido a mí y sus manos recorrían mi espalda. Le quité la camiseta. El agua seguía corriendo entre nosotros.

-Me encanta tu tatuaje -dije poniendo mi mano sobre su pecho.

-Y a mí el tuyo -él hizo la misma acción que yo. No sé si veis la diferencia...

-Voy a hacer como que no has hecho ni dicho nada -rió bajo mis labios.

-¡POYNTER! ¡TENEMOS QUE IRNOS YA Y COMO NO DEJES A WILLY QUIETO VOY A TENER QUE ENTRAR AHÍ Y SACARTE ARRASTRANDO DE LOS HUEVOS! ¿ME OYES?

De repente nuestras bocas pararon. Dougie se separó de mi echándose el pelo con la mano hacía atrás y mordiéndose el labio inferior. Yo tuve que agarrarme al grifo... ¿Cómo se podía ser tan jodidamente sexy?

No tienes que decir nada (McFly)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora