No tienes que decir nada (McFly)

Capítulo 25: When Tom Met Tom.

Estaba delante del espejo forzándome a respirar tranquilamente y repitiéndome a mi misma que todo iba a ir bien. En cualquier momento llamarían a mi puerta y sería la hora de irnos. Abrí los ojos y me eché un último vistazo. Zapatos altos de tacón color camel, vestido blanco corto, ajustado y de manga cortita. El pelo lo llevaba un poco recogido atrás y con gruesos tirabuzones que caían sobre mi espalda. Como complemento llevaba un bolso con pequeños brillantitos del color de los zapatos.

Llamaron a la puerta.

—¿Estás lista? —Dougie asomó la cabeza. Se había quitado la banda rosa del pelo, lo llevaba un poco engominado y revuelto. Una camisa blanca, una cazadora de cuero negra y vaqueros grises había sido la vestimenta escogida por Dougie—. Tú lo que quieres es que me levanten la novia esta noche.

—Que tonto eres —sonreí. Cogí el bolso de encima de la cama, le di un beso y salimos hacía el hall donde Gi y Tom nos esperaban.

Giovanna estaba guapísima. Llevaba un vestido negro y entallado, de manga parecido al mío, pero con el cuello cuadrado dejando ver algo de escote. Los filitos de las mangas estaban decorados con pequeños encajes.

Después de decirle lo estupendos que estaban los dos, salimos en coche directos a la premier.

Me iba a dar algo. Dougie no me había soltado la mano en todo el trayecto, pero ni sus piropos ni sus pequeños besos habían conseguido tranquilizarme. Era mi primera aparición pública, y si no la cagaba con la prensa ya habría tiempo de liarla con los actores... había noche de sobra.

Cuando me quise dar cuenta, ya habíamos llegado. Dougie se había bajado del coche y me ofrecía su mano y su sonrisa para que saliera. Se la cogí y le eché valor. Tampoco podía ser para tanto. Hay muchos cantantes famosos... muchos tienen novias... yo era una más, no había que hacer una montaña de un grano de arena... ¿no?

Y salí del coche. Notaba como los flashes de las cámaras me pegaban en la cara. Venga, venga que solo son un par de fotos. Dougie no me soltó ni un instante, comenzamos a caminar cogidos de la mano por una larga alfombra roja hasta donde se encontraba el photocall.

—Lo estás haciendo genial —me susurró.

—Porque todavía no he abierto la boca majete. Prepárate para perder la poca reputación que te queda.

Pude ver a Danny y a Harry con sus respectivas al final de la alfombra roja. A mis espaldas escuchaba como me llamaban y me pedían un segundo de atención.

—¡Annet! Estás preciosa —me dijo Izzy.

—Muchas gracias, vosotras también.

Tom y Gi no tardaron en llegar. Ya sí que teníamos que entrar todos juntos para las fotos.

Dougie me agarró de la cintura y sonreí ante su gesto. Otra tanda de flashes se disparó sobre nosotros para captar esa mirada de complicidad. Las chicas nos retiramos para que ellos se quedaran haciéndose fotos de esas que les gustan tanto. Una vez dentro todo estaba muchísimo más calmado.

—¿Cómo estás? —me preguntó Gi con una gran sonrisa.

—Fuuuuuuuuuuuuuuf —eché todo el aire que llevaba dentro—, mucho mejor ahora.

Todas rieron, de verdad, es que estaba muy nerviosa.

—Ya estamos aquí —nos dijo Dougie cuando llegaron.

Me cogió las manos y me las puso en su cuello. Me abrazó por la cintura y me besó.

—No sabes lo que significa para mí que estés aquí conmigo.