CAPÍTULO 27

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-En multimedia: el río Asenjo con Victor y Mandy-



—¡¡Lo sabía!! —exclamo —sabía que había alguna trampa....

—Tranquila, mañana me voy a la ciudad un par de días...

—¿Y cuando vuelvas qué?

—Sabes.... —me cuestiona Víctor cambiando de tema— aun no has respondido si quieres ser mi novia. ¿Qué me dices, continuamos donde lo dejamos hace 10 años?

Me quedo callada sin saber que responderle.

¿Quiere salir conmigo de verdad? ¿O solo quiere estar cerca de mí para cuando se aproxime la fecha de "mi accidente"?

—Oye — sugiere inocentemente —que te quedes tanto tiempo callada sin responderme no significa nada bueno....

—Está bien —le sonrío coquetamente —Acepto.

Algo en su mirada me dice que no parece muy satisfecho con mi contestación.

—No te fías de mí... —dice con pesar.

—No es eso...

—¿Dime princesa cuando yo te he fallado?

Trago saliva sin saber que decir, ya que siempre me ha intentado ayudar incluso cuando yo me fui hace años sin despedirme de él.

—Nunca —suspiro.

—Entonces dame esta oportunidad y te demostraré que puedes confiar en mí, que soy ese mismo chico de 17 años que sigue enamorado de ti.

—Está bien — esta vez mi sonrisa es más sincera — Seré tu novia, pero con una condición.

—Dime.

—Estos diez días que voy a estar aquí contigo, no se puede enterar nadie. —indico — si después de estos días, todo sale bien, comunicaremos a los demás nuestra situación.

—Trato hecho. —me tiende la mano y se la estrecho — ¿Qué te parece si vamos a tu casa a recoger tus cosas y las traes aquí?

—Bien. Vamos.

Al poco rato de entrar en mi casa, llegan Ángel y Alfonso, y les explico que ya pueden empezar con la cocina y el comedor, ya que me hospedaré en el hotel durante diez días.

—¿Puedo preguntarte algo jefa? —la simpática voz de Ángel me interrumpe.

—Claro, ¿qué sucede?

—Tengo que ausentarme dos días por asuntos personales. ¿Me los concedes? Puedo asegurarte que no se retrasará la faena.

—Vale no te preocupes Ángel. —le indico.

—No se preocupe señora que yo iré adelantando lo que pueda hasta que vuelva —explica Alfonso.

—Está bien, no hay problema.

—Si necesitáis más días, porque vais atrasados o algo —interrumpe esta vez Víctor — no os preocupéis, pues los cargos del hotel correrán a mi cuenta.

—No señor —interviene Ángel dirigiéndose a Víctor — mi ausencia estos dos días no repercutirá que en 10 días hayamos acabado lo más ajetreado.

—¡Entonces perfecto! —exclamo contenta —Voy a recoger mis cosas.

Víctor se queda con el equipo A preguntándoles detalles sobre las modificaciones que van a hacer, al salir me ayuda con la maleta y un par de bolsas y nos vamos al coche.

Conectada a ti.    \#wattys2016/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora