— Pues vamos a arriesgarnos. — prosigue la marcha hacia la entrada del hotel — No te creo capaz de que me bajes los pantalones y los clientes vean este "menudo paquete".
Mis dedos se paralizan en el botón. Mierda. Ha repetido los pensamientos que tuve el primer día que lo ví.
—¿Me escuchabas desde el primer día? — pregunto atónita.
— Al principio si. — suena regocijado.
Como sigue caminando hasta la entrada del hotel le desabrocho el botón y de un impulso le bajo los pantalones.
"Toma ya" Mi yo interior salta de alegría traviesamente.
"No te hacía capaz" oigo su voz nuevamente.
"Y yo no te hacía capaz de entrar así en tu propio hotel" le replico divertida.
Va caminando como un pingüino ya que los pantalones se le han bajado hasta casi los tobillos. Entrando en el hotel me cobijo detrás de su espalda para que los clientes no me vean.
"¡Maldita sea!" oigo como me exclama. Me pongo en alerta y en menos de un segundo estoy en el suelo de pie nuevamente.
Víctor se agacha y rápidamente se abrocha los pantalones tras subirlos. Yo me agarro a su brazo ya que toda la sangre la tenía a la cabeza, provocándome un leve mareo.
Cuando enfoco el motivo de su detención reparo en sus padres hablando con Sarah algo alterados y justo después girarse hacia nosotros. No puedo evitar soltar una risotada.
— Esto no acaba aquí — me dice por lo bajo.
—Hijo. — su madre le da un abrazo— estábamos preocupados por ti. Lucas nos ha contado lo sucedido esta tarde.
—Tranquilos. No ha pasado nada. Estaba con Mandy.
— Hola Daniela. Marcos. — les saludo estrechándoles la mano y devolviéndole el saludo.
— No lo vuelvas ha hacer. Nos ha dado un susto de muerte cuando Lucas nos lo ha contado.
— No se volverá a repetir.
Sonrío involuntariamente. Parece un niño pequeño arrepentido de verdad.
—¿Entonces, ibas a acompañar a tu amiga a casa no? — el padre de Víctor sugiere sagazmente y yo no puedo evitar enrojecer de vergüenza.
— Quería deciros que ella es mi novia. — Sonrío amablemente y mi corazón da un vuelco al presentarme oficialmente ante sus padres como su novia.
—¿Entonces para cuándo la boda?— Daniela pregunta inocentemente.
— Para cuando ella decida mamá. — contesta Víctor con una sonrisa.
Mi cara se paraliza atónita. Cuando yo decida. Piensa casarnos.
"Quita esa cara de susto, que parece has visto un fantasma"
— Hija, ¿puedo llamarte así? —asiento aturdidamente con la cabeza a Daniela — Espero que sea pronto así me des nietos enseguida.
Abro los ojos sorprendida ante la prisa de su madre.
—¡Mama no la asustes! — exclama Víctor pasando un brazo por mi hombro.
Ellos ríen y yo finjo reír también con ellos.
Su esposa.
Yo.
Hijos.
Sigo asimilando sus palabras. Acabamos de discutir y recién le he admitido que le quiero. No había pensado en boda aún.
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Conectada a ti. \#wattys2016/
Romance¿Qué pasa cuando el chico que te gusta es capaz de escuchar tu mente? Esa pregunta me la hago todos los días. Lo peor de mi situación, es que se comunica conmigo telepáticamente. Ya sé, no es algo normal. Pero no estoy dispuesta a que pueda indagar...