Strong [The King. 1/4] Borrador

Capítulo 34 "El dolor siempre estará"

Capítulo 34

Punto de vista Adam.

Miro a mi novia, acurrucada entre mis brazos. Beso su cabello y acaricio su espalda. Cada vez duele más verla así. Ella intentando salir adelante pero siempre algo interponiendose.

Mi celular vibra a mi lado, lo tomo y bufo.

Nuevo mensaje.

Adzelene.
Tic toc, el reloj avanza cariño. ¿De verdad quieres esa vida para ella? Sólo me confirmas que no la amas.

Paso una mano por su espalda nuevamente y otra vez beso su cabeza. Ni Adzelene ni nadie me haría alejar de Isabella, ella ya tiene mucha mierda como para que yo la deje.

«No me dejes, no tu. Tu no»

Se lo prometí, no iba a dejarla. Iba a ser lo suficientemente fuerte para los dos. Iba a evitar las cosas que pudieran dañarla, pero no la dejaría.

Yo ya era parte de su vida y ella era parte de la mía. Llevamos poco tiempo juntos pero es algo muy profundo para explicarlo o para que la gente lo entienda. Estamos hechos el uno para el otro, y cuando alguien encuentra a su otra mitad, dentro suyo, sabe que esa persona es la indicada. Isabella es mi chica indicada.

Mi novia se mueve entre mis brazos y yo acaricio su cabello. Ella levanta su cabeza y me mira. Acaricio su mejilla y ella vuelve a cerrar sus ojos.

-¿Qué hora es?.-Susurra con su voz ronca.
-Son las siete.-Le digo y ella me abraza.
-Debo ir a casa, ¿Vienes?.-Pregunta ella.
-Claro. ¿Nos damos una ducha?.-Pregunto y ella me mira.-Digo, tu primero y yo luego... No de darnos la ducha juntos.
-Creo... creo que podemos hacerlo juntos.
-¿Crees?.-Pregunto depositando un beso en su nariz.-Amor, no debemos hacerlo. No sientas que te presionó para algo.
-No lo siento, Adam. Sólo... creo que si me haces el amor podré olvidarme por un momento...
-¿Y si sólo te asusta?
-¿Entonces no haremos el amor nunca por miedo a que yo me asusté?.-Pregunta ella, tomo su mano y la llevó hacia mis labios.
-Entonces, esperaremos hasta que estés lista.-Le digo y ella se aleja de mi.
-¿Hasta que yo este lista? ¿O hasta que a ti te deje de dar asco mi maldito cuerpo?.-Dice ella molesta. La miro confundido.
-Nada de ti me da asco.-Le digo apresuradamente.
-No mientas Adam. A veces, te veo como me miras.
-Te miro como un estúpido enamorado que le duele demasiado que su novia este mal y no poder hacer nada para poder ayudarla. Isabella, no se de que demonios estas hablando.
-Dejalo Adam.-Dice ella y se pone de pie, luego sale de la habitación. Me pongo de pie y la sigo.

Voy hacía la cocina donde ella se encuentra apoyada en la mesada bebiendo un vaso de agua. Me acerco a ella y la rodeó con mis brazos por la cintura. Me apego a su cuerpo y depositó un beso en su hombro.

-Tu no me das asco.-Le digo en un hilo de voz.
-¿Por qué simplemente no puedo sentirme bien y ya?
-No lo se, cielo.
-Esto ya me está cansando. Intento estar bien, lo juro.
-Lo sé. Te veo todos los días, Bella. Y todos los días me enamoro más de lo fuerte que eres.
-¿Cuánto más tiene que doler, Adam?
-Lo suficiente. Princesa, no va a dejar de doler, pero te acostumbraras a vivir con eso. Siempre tendremos esa perdida con nosotros.
-No quiero.
-Pero así lo es, linda. Lamentablemente así lo es. El no está acá con nosotros. Pero nos cuida desde otro lugar.
-¿Qué hice mal?
-Nada, tu no has hecho nada mal Bella.
-Siento que lo hice. No logró entender que otra cosa pudo haber pasado.
-Yo pase, Bella. Llegué a tu vida y con mi llegada vino toda la mierda que mi mundo trae.
-No, tu no eres el culpable. No lo pienses nunca. Tu eres mi apoyo.

Respiro hondo, ella se da vuelta en mis brazos y acaricia mi mejilla. Cierto los ojos y dejó que su caricia me haga sentir ese cosquilleo.

-¿Has pensado eso todo este tiempo?.-Pregunta en un hilo de voz.
-Desde que dijeron que había problemas.
-No mi amor.-Dice poniéndose de puntillas de pie y dándome un beso.
-No pienses que me das asco, eres lo más bonito que mis ojos hayan visto. ¿Si?
-Te amo Adam.

Tomo la mano de mi novia mientras nos acercamos a la puerta de su casa. Ella toca timbre, al no vivir más aquí siente que debe darle cierta privacidad a sus padres. La puerta se abre y nos deja ver a un hombre que por lo menos, tiene mi edad.

-Noah.-Dice sorprendida. El chico me mira a mi y luego a mi novia. Ella suelta mi mano e inmediatamente es abrazada por el. Miro la escena un tanto confundido.
-No puedo creer todo lo que has pasado y que yo no estaba aquí para ti.-Dice el besando su cabeza.
-Fue un tiempo difícil.-Dice ella alejándose de él. Me mira y toma mi mano.-El es mi novio, Adam.
-Soy Noah, su hermano. ¿Tu eres el padre del bebé?.-Pregunta Noah.
-Si.-Respondo. Mi chica me mira y yo apoyo mi cabeza en su cabeza.

Entramos a la casa y caminamos hacia la cocina donde se encuentran sus padres. Ambos la abrazan durante unos minutos y luego me saludan a mi. A diferencia de antes, ahora ellos creen que les he robado a su hija.

- Me sorprende que hayas venido.-Dice su padre. Mi chica camina hacia mi y me abraza por la cintura.
-Adam me ha dicho que tengo que venir.-Dice ella y sus padres me miran.
-¿Acaso no viene?.-Dice su hermano confundido.
-Estamos viviendo juntos.-Le digo sin mirarlo.
-Isa, hoy ha venido un amigo tuyo y le dije que podría venir a cenar.
-¿Qué amigo?.-Pregunto con el ceño fruncido.

Punto de vista de Isabella

El timbre suena y mi madre me da una sonrisa y va a recibir a su invitado.

-Pensé que habías dicho que no tenías amigos.-Dice Adam a mi lado, captando las miradas de mi hermano y de mi padre.
-¿ Es que no puede tener amigos?.-Pregunta y Adam frunce el ceño
-Yo también pensaba eso.-le digo a Adam.
-Cariño mira quién vino.-Dice mi madre entrando a la habitación seguida de nada más ni nada menos que Felipe. Que viene con su sonrisa coqueta y victoriosa.

Mi cuerpo se tensa y el de Adam también. Miro a mi novio que tiene su mandíbula apretada y sujeta mi mano con fuerza.

-Tanto tiempo, amiga.-Dice el y Adam de repente está sobre el golpeandolo.