Cuatro 'No estas sola'

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Capítulo 4

Miro nerviosa por la ventana de mi casa, esperando el momento donde mi mejor amiga aparecerá y podré desahogarme.

Cuando la veo aparecer por la esquina, bajo rápidamente las escaleras y le abro la puerta. Ella corre los pocos metros y entra a mi casa rápidamente.

La abrazo pero no me permito llorar. Necesitaba este abrazo. Necesito hablar con mi mejor amiga y decirle esto.

-¿Que pasa Isa? me preocupas.-Me dice. Me alejo de ella y camino hacia la cocina sirvo dos vasos con jugo y le doy uno. - ¿Me contarás?.-Pregunta ella.

Miro mis uñas y suspiro. Levanto la vista y veo que ella no ha tocado su vaso, lo que significa que esta muy nerviosa.

-Yo... Estoy un poco... Embarazada.-Le digo mirándola. Su boca se abre sorprendida y me mira asustada.
-Dime que es una mentira, Bella dime que es una mentira. Que estas tomándome del pelo.
-No. Yo... Joder estoy embarazada y asustada como la mierda. ¿Como pude embarazarme en Felipe?
-Dejando que te follara. - Me dice y yo la miro. Niega con la cabeza y toma mis manos. - Soy tu mejor amiga así que es mi derecho decirte esto. Eres una estúpida, pero se que no eres tan estúpida para cometer el error más grande de tu vida.
-Ya lo he cometido. - La interrumpo.
-No un bebé no es un error. Se que ni eres tan estúpida para cometer el peor error de tu vida. Se que te pondrás los pantalones y enfrentarás esta situación. Que esperarás los nueve meses cuidando a ese bebe que crece dentro tuyo y luego serás la mejor mama que el pudo haber elegido. Se que lo amaras.
-¿Como sabes todo eso?. - Pregunto limpiando las lágrimas que salen por mis ojos y corren por mis mejillas.
-Eso es sencillo, eso es lo que haría mi mejor amiga. Estoy aquí para todo. Y si en imbecil de Felipe no quiere hacerse padre... Solo recuerda que no estas sola. - susurra y yo me tiro a sus brazos en busca de un abrazo que signifique que todo estará bien o que eso me haga pensar.

Me acerco a mi papa y lo abrazo. El besa mi cabeza y acaricia mi espalda.

-¿Todo esta bien, princesa?.-Pregunta papa y yo asiento dándole una sonrisa.
-Todo lo está. - Susurro. El se separa de mi y toma mi rostro entre sus manos.
-Has llorado, hija mía. ¿Que te ha pasado?. - Pregunta preocupado. Yo suspiro y niego con la cabeza.
-Estoy bien, papá. - Susurro y el me mira unos segundos más. Luego niega con la cabeza.
-Mientes. Te conozco como si te hubiese parido. Así que dime.
-¿Prometes no decirle a mama?. - Pregunto en un susurro, el frunce el ceño y niega con la cabeza.
-El secreto de que dure mi matrimonio con tu madre es que ninguno de los dos guarda secretos.
-Entonces no te lo diré, papá. - Le digo separandome de el.
-Mira Isabella, eres mi hija y te amo. Pero no te eduque para que le guardes secretos a tus padres. Así que me lo dices queriendo o te tendré que obligar.
-Promete que no le dirás a mama, por favor. Dame un poco de tiempo para decirle a ella.-Suplico. El suspira y pasa una mano por su cabello.
-Esta bien, dos semanas cuando y mucho eh. - Me dice y yo suspiro aliviada.

Me alejo otro par de pasos y pozo mi mirada en mis pies. Me da vergüenza mirarlo a la cara. El aun piensa que soy virgen y aquí le vengo yo, con la noticia que estoy embarazada.

Suspiro y comienzo a jugar con mis dedos. No quiero ver su mirada de decepción. No quiero ver la mirada de decepción de mi madre. No quiero ser su decepción.

-Entonces me encuentro aquí, esperando a que te dediques a hablar Bella.- Dice mi padre. Suspiro y levanto mi mirada.
-Yo... Estoy embarazada, papá. - Digo y noto como sonríe un poco.
-Hija, nada puede ser tan malo. Dime que te pasa.
-Estoy embarazada. Estoy jodidamente embarazada. - Digo y el se apoya en la pared y lleva una mano a su pecho. Lo miro asustada.
-¿Embarazada?. - Dice casi sin creerlo. - Bella, no puedes estar embarazada. Tu aún eres virgen.
-No lo soy papa. No lo soy más.
-Dime que esto es una broma o llama a la ambulancia por favor.
-No lo es. Mira, lamento estar decepcionandote ahora mismo. Yo no quería quedar embarazada y menos de quien es el padre. No quería que esto pasara y estaba cien por ciento segura que esto no podia pasar. Lo lamento papa. Se que no me educaste así.

El se queda callado un momento. Abro la nevera y le sirvió un vaso con agua. El lo bebe rápidamente y me mira.

-Es mi culpa.-Dice el y yo frunzo el ceño. - Yo no quise que mamá hable contigo sobre ese tema.
-Papa.-Susurro el niega con la cabeza y me abraza.
-Eres mi princesa. Lamento mucho que esto te este pasando. ¿Que es lo que harás?. - Pregunta y yo miro la pared.
-Lo tendré. - Susurro y el besa mi mejilla antes de separarse.
-Si me necesitas yo estoy aquí princesa. No estas sola. - Me dice y logra sacarme una sonrisa. - ¿Y su padre?.-Pregunta y yo suspiro.
-El no lo sabe aun.-Respondo y el asiente.
-Ven, tomemos un te. Hay una historia que quiero contarte.

Nos sentamos en la mesa y con nuestras tazas de té. El toma mi mano sobre la mesa y me sonríe con ternura.

-Cuando yo era joven, me encantaban las mujeres.
-¿y que paso?. - Pregunto mirándolo.
-Amaba a las mujeres y odiaba a las relaciones. Tu madre era todo lo contrario. Estuve con ella sin ser mi novia.
-¿Mama tuvo sexo fuera del matrimonio?. - Preguntó divertida. El me mira mal y bebe de su te.
-Tu hermano no fue creado dentro de una relación fuerte. Ella un día vino llorando hacia mi. Supe que algo iba mal.
-¿Estaba embarazada?. - Preguntó y el asiente. De repente una sonrisa aparece en sus labios y sus ojos se llenan de lágrimas.
-Me dijo llorando 'Seth estoy embarazada. Mis padres me han corrido de mi casa... No se que hacer' ella pensó que yo no iba a enfrentar eso con ella. Ella pensó que yo le daría la espalda. Me dijo que si no estaba desesperada como lo estaba no me lo iba a decir... Pero me necesitaba.
-¿Porque me cuentas esto papa?.-Preguntó y el asiente.
-Vi esa carita tuya hija mía. Cuando te pregunte por el padre la has puesto. Solo quiero que no cometas el error de no decirle por miedo. No sabes lo que el quiere. Déjalo elegir.
-¿Y si me dice que no quiere ser parte?.-Susurro horrorizada.
-Ahí estará tu querido padre para castrarlo. - Me sonríe y yo le sonrió.
-Llegue. - Dice mi madre entrando a la cocina. Mi padre me mira y levanta dos dedos. Yo asiento.

Dos semanas. Solo dos semanas me ha dado.

Hola! Espero que les guste el capítulo. Quiero dedicarle este capítulo a quien me recordó subirlo. Ailu-Horan eres una de las mejores lectoras que conozco. Espero que les guste y que está historia les este resultando distinta a mis otras historias. Besos y abrazos para todos.

-Juls.

Strong [The King. 1/4] Borrador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora