17

303 33 23
                                    

17. Bienvenido a la realidad.

ALESSIA/NICOLE.

Su semblante decidido y serio me hace preguntarme por qué. ¿Por qué me hace esa pregunta si se supone que no oyó mi verdadero nombre?

Aunque, la respuesta la tenía justamente en sus palabras. Fui una ingenua al pensar que no lo había escuchado. ¡Por supuesto que había sucedido lo contrario a lo que me imaginaba! ¡Y es muy normal que me pregunte!

En un caso aparte no me estaría replanteando si mentirle o no, pero Renee le capturó por mi culpa. Él ha estado metido en el ajo tanto como yo y se merece saber la verdad sobre mí. El problema es la persona por la que me ha preguntado, es decir, Normand.

Si le cuento todo sobre mí, también deberé incluirle a él, porque dudo de que se enterase de lo que Normand le dijo a Renee. Y no puedo decirle así porque sí que está metido en una red de mafiosos para encontrar a un asesino serial de la misma calaña que Renee.

¿Merecerá la pena?

Normand no tiene porqué enterarse.

-No-le admito-No es mi verdadero padre.

-¿Y por qué estás aquí con un agente del FBI?

No me extraña que sepa que Normand es del FBI y no el porqué de que esté en Francia conmigo. Cuando Normand le salvó, Renee estaba alejada de él, pero cuando soltó "la bomba" estaba sujetándole la barbilla.

-Mi madre y él fueron mejores amigos desde la infancia, así que decidió hacerse cargo de mí ya que tenía que venir aquí por una misión y yo iba a ser enviada a algún país del mundo por el programa de protección de testigos.

-¿Programa de protección de testigos? Uau-silba incrédulo, pero a la vez entusiasmado-Eso es la polla, ¿no?

-No te...creas-respondo, dubitativa-¿Solo te ha importado eso o qué?

-Pues si te soy sincero, sí. ¡Tengo una amiga con una falsa identidad! Tú no sabes lo guay que es eso.

Sonrío ampliamente debido a su reacción. Christophe es tan tonto...Parece un niño de tres años que acaba de descubrir algo impactante.

-Supongo que no.

El timbre suena y hago amago de levantarme, pero al hacerlo Chris sigue sujetándome la mano y no tiene intención de soltármela. Al menos, no aún.

-Ya abrirá tu padre.

-Mi padre a lo mejor se ha ido a trabajar mientras tú y yo hablábamos.

Pero que la puerta de mi habitación se abra para dejar ver a un chico con un sobre marrón entre sus brazos solo significa que mi padre no se ha ido.

Mi estupor se expande a límites insospechados cuando veo a Alan enfrente de mis narices. Él también parece sorprenderse porque me ve cogida de la mano con Chris, y mi mejor amigo mira impasible a mi primo.

-Si pillo en mal momento yo...yo...me puedo ir.

-Da igual. Me voy yo.

Tormento. #VIPAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora