Love&Conflicts HIGHLIGHT (비스트 B2ST)

Capítulo 2

Mi corazón latía muy rápido, hoy era el día, el día en el que lo volvería a ver, mis manos temblaban, me sentía muy colorada.

Sin pensarlo dos veces me monte en aquella Van negra que iría a buscar a Doojoon, claro, el no sabía nada de que yo iba ahí, además que seguramente muchas admiradores iban a estar merodeando por ahí.

Llegamos a aquel campo de entrenamiento, mi corazón volvió a estar ansioso, según Yoseob tendría que ser una sorpresa, cuando llegaramos a la casa, yo lo sorprenderia por detras, hasta entonces él no me podía ver.

-Bienvenido Doojoon- Invitó el chofer a que entrara en la van con una sonrisa que le iba de oreja a oreja.  Por una pequeña rendija entre los asientos, pude verlo subir, su cabello esta corto, estaba usando un sueter ancho, de un color azul opaco, más unos pantalones negros un tanto anchos.

-¿Vamos al departamento señor?- Preguntó el chofer mientras, introduciendo la llave en el orificio

para asi arrancar el motor del auto móvil.

Noté el silencio que había un silencio muy incomodo, ya que no respondía, sentí luego como mi celular vibraba para luego sonar el estresante tono de Line.

-¿Fue tu celular?- Preguntó Doojoon al oir aquel sonido que habia interrumpido el silencio de la van negra.

-Ah S...si- Respondió tartamudeando nerviosamente, él obviamente tenía el plan totalmente claro, por lo tanto sabía que me tenía cubrir cualquier inconveniente.

«¿Estas en tu apartamento?» Fué lo que leí al abrir el mensaje que casi hacia que me descubrieran, mis mejillas se calentaban, apretaba mis labios, sintiendo que mi corazón se estaba desbocando. Lo primero que él hizo al salir de Servicio, fue escribirme, eso me causaba mucha felicidad.

«Vete a descanasar, nos vemos en la noche» Le escribí una tanto preocupada por como lo iba a tomar, si fuera por mi, ya hubiera saltado a sus brazo ahorita mismo, pero era algo que habían organizado los chicos con tanto esmero, Cuando me acerqué a ver la expresión de Doojoon, fue de disgustos lo cual hizo que mi corazón se estremeciera

«Te quiero ver, voy a tu apartamento» Dijo autoritariamente, imaginandome que no me permitiria excusarne para que no fuera. Ahora no sabía que iba a hacer.

-Vamos al centro- Ordenó Doojoon el cual obedeció a regañadientes, porque el plan no se estaba siguiendo como lo habiamos conformado.

Le mandé un mensaje a Yoseob, notificandole que ibamos a retrasarnos, por culpa del señorito que no queria descansar.

-Ya llegamos Señor- Notificó mientras observaba con recelo el edificio donde esta viviendo, yo no soy millonaria, pero me sentia a gusto en ese pequeño pero acogedor departamente, al lado de la entrada había una bodega donde vendian unas manzanas rojas y deliciosad.

-Gracias- Hizo una pequeña reverencia, para luego abrir la puerta de la van, vio a los alrededores, con su gorra roja y sus lentes ray ban negros, cuando notó que no había nadie bajo del auto, sin perder la precaucion de las fans.

«Ya estoy abajo» Mandó otro mensaje a mi Line, ví por la ventana, estaba esperando parado firmemente viendo la puerta de mi apartamento, tenía la puerta de la van abierta, por si alguien lo reconocia, saltaria en ella rapidamente, sentí como mi telefono empezó a vibrar, no era un mensaje era una llamada.

-¿Estas tan desesperado por verme?- Dije en broma mientras me asomaba a la puerta, cuando el volteó, no pude evitar sonreir, e instintivamente salté a sus brazos, lo cual él me correspondió, casi asfixiandome, pero estaba muy feliz, tanto que algunas lágrimas emergian de mí.

-Estuvistes en la Van todo este tiempo- Posó su frente contra la mía- Que cruel eres- Dijo haciendo pucheros, pero lo único que pude ver fue su sonrisa de felicidad, lo cual hacia que mi corazón se agitara, más de lo que estaba.

-Se suponia que cuando llegaras a Casa, yo te iba a dar la sorpresa- Comenté, limpiandome con una mano aquellas lagrimas de felicidad.-Pero alguien no quiso ir a casa- Lo mire reprochandole eso, pero en verdad estaba contenta de que no lo hubiera hecho, este momento era algo privado, solo para nosotros dos.

-¿Podemos subir?- Preguntó él, notandolo un poco ansioso.

-Pero, nos esperan en tu apartamento-Comenté, un poco preocupada por dañar lo que los chicos habian preparado con tanto esmero.

-Ahorita solo quiero estar contigo-Confesó mirando directamente a los ojos, lo cual hizo que mi corazón pegara un brinco, sentí mis mejillas ponerse rojas.-Por favor- Suplicó acariciandome la mejilla y acercandome poco a poco mas a el, sentí que me iba desmayar.

-Entremos- Sonreí de a poco, mientras ponia distancia para asi no colapsar, tome las llaves y abrí la primera puerta.

Subimos las escaleras, mi apartamento estaba en el primer piso, pero a pesar de ser corto el trayecto, Doojoon nunca soltó mi mano, estaba aferrado a ella, lo cual hacia que mis mejillas se pusieran rojas.

-Ya llegamos- Dije mientras abría la puerta y entrabamos, cuando Doojoon cerró la puerta, me tomó por la cintura, atrayendome en un veloz movimiento hacia el, para luego posar sus labios sobre los mios, cerre muy fuerte los ojos, sentí mis mejillas ponerse rojas, Doojoon no me permitia separarme, me sentía nerviosa, no estaba preparada.

-Cuanto te extrañe- Susurró acariando mis labios con las yemas de sus dedos, haciendo que entre abriera mi boca, cuando esto paso, me volvió a besar, pero esta vez un beso, mas profundo, más apasionante, un beso que quemaba, esto era lo que habia retenido por esos 2 años en los que se fue.-Te amo- Susurró en mi oido, al separarse, dejandome con la respiración entre cortada, no tenia nada de aliento y el estaba muy normal, era algo que me ponia en ascuas, pero era ese efecto que aunque me molestaba, no podia hacerle nada porque le queria, seguimos besandonos, cada uno mas exigente, más apasionado.

»Ding~Dong« Sonó el timbre de la puerta, Necesitaba aire puro, necesitaba bajar estos incesantes latidos, que hacian que me mareara.

-Maldición- Golpeó con fuerza la pared lo que me causó mucha gracia.-Siempre alguien que nos interrumpe- Miró con furia la puerta para luego mirarme con ojos de perrito triste.

-No te enojos- Le dije mientras abría la puerta, cuando vi quien era, me quede helada y petrificada en el lugar,  no sabía que hacia "ella" aquí- Mamá- Sonreí un tanto por obligación, mientras veia sus maletas, ella rapidamente me abrazó a lo cual yo le correspondi pero aún en shock.

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Hola Chingus~

2do Capítulo, disfruten, mama llegó a Corea, ahora que pasara, como le explicara Paola la situacion.

Tratare de subir un capítulo cada 10 días pero no prometo nada~.

Gracias por leer, Los quiero <3

Pao~