Black Velvet † H.S

Capitulo 33

Habían estado durante varios días entre cafeterías y hostales, siempre procurando abandonarlos a primera hora volviendo a los caminos que los llevaban a un sueño que para Charlotte se veía poco probable. No veía una meta en los ojos de Harry. Solo una vieja ilusión que quería mantener.

Parecía que había olvidado la última vez que cepillo su cabello, ahora estaban en dos trenzas desordenadas a cada lado. Su rostro pálido se reflejaba en los espejos del vehículo cada vez que se bajaban. Suspiro sentándose sobre el césped viendo a su alrededor, ni siquiera sabía cómo se llamaba el lugar. Solo que estaban demasiado lejos de casa.

-Buen día, baboso.-Murmuro viendo cómo él se sentaba bostezando, observo el muelle en frente con algo de confusión.

-¿Dónde estamos?

-Creía que tú eras el que tenía un plan, una brillante idea.-Le respondió ocultando un poco su negatividad sobre todo esto, le dio una mirada viendo como el asentía con seguridad.

-Lo soy, claro que lo soy.-Murmuro con seguridad estirando sus extremidades, dormir en el piso ya no era tan bueno para su cuerpo. Aunque amaba hacerlo.

-Ya han pasado semanas, Harry. Una mierda de pueblo detrás del otro...

-Ah, Charlie, no es el lugar de destino. Todo se trata del viaje, somos Bonnie y Clyde del 2009...tour americano fuera de la ley.-Murmuro soltando una risita mientras besaba la mejilla de la chica.

-Hablo enserio, ¿Dónde carajos vamos?-Pregunto sonando quizás muy desesperada, pero en cierto modo lo estaba.

-Estamos aquí. Es aquí. Este pueblo.

-¿Por qué?

-Porque es aquí donde vivía mi padre, antes de que todo se fuera al tacho de la basura. Teníamos una linda casa aquí, sé que ese bastardo sigue aquí.

-¿Qué planeas hacer? ¿Vengarte?-Murmuro viéndolo ponerse de pie, imito su acto siguiéndolo con bastante preocupación.

-Escucha, necesito que me apoyes en esto. Solo iré le presentare a mi novia y fingiré que no pasa nada. Le quitare todo lo que era de mi madre. No le dejare ni un peso. Luego tomaremos un vuelo a donde quieras ¿Vale?

-¿Estás loco? Ese hombre es peligroso, no necesitamos hacerlo solo vámonos de aquí. Harry por favor.

-Ven aquí, sé que eres buena actuando.-Le tomo la mano guiándola hasta el interior de un jardín que llevaba a una bonita casa de tonalidades azules.

Golpeo la puerta viendo como un hombre de chaqueta negra abría, tenía los ojos de Harry y el cabello peinado hacia atrás. Miro asombrado al chico que le sonrió mientras apretaba la mano de la chica, ella solo bajo la mirada.

-¿Harry? ¿Qué haces aquí?

-Vine a presentarte a mi novia, Papa.-Sus palabras salieron apenas tratando de fingir alguna emoción, pero su estómago se revolvía de solo sentir su apestoso aliento a alcohol.

-¿Estás seguro? Diablos pense que nunca volvieras con tu viejo, vamos pasen chicos ¡siéntanse en casa!

Entraron notando como el hombre caminaba hasta la mesa con dos botellas de whisky y cerveza, se sentó con una gran sonrisa en su rostro. Parecía aun no creer que estuviera pasando.

-Vamos acompáñenme, tengo la boca más seca que la de una monja.-Murmura dándole una mirada a la chica que parecía incomoda.-Muñeca, haz lo que quieras, fuma aquí dentro, tira las cenizas al puto suelo. Ya no estamos en Kansas, aquí eres libre de cojones.

-¡Amen joder!-Harry vocifero dándole un trago a su cerveza con entusiasmo, ella sabía que esto no saldría nada bien. Parecía que él estaba olvidando todo.

-No me lo puedo creer...esto.-Apunto a ambos con los ojos brillantes.-tu y yo juntos finalmente, soy como un cachorro con dos pollas. No hay nada más importante que la sangre.

-Voy a fuera, necesito respirar aire fresco.-Mascullo ella poniéndose de pie de mala gana, camino hasta lograr llegar a un jardín trasero donde se sentó en una silla de playa.

Harry dejo el vaso a medio tomar sobre la mesa, su mirada había seguido a la chica pero no la iba a ir a ver aun. No era del tipo que corre tras su chica si esta tiene los ojos llorosos. Se le pasara luego. Pero su paciencia estaba llegando al límite con aquel hombre que parecía demasiado ilusionado.

-Toda una princesita ¿No? Esa clase de chica no suele fijarse en tipos como nosotros, solo se preocupan de gastarles el dinero a sus padres. Follar con niños ricos y que su culo sea de calidad ¿Que cojones haces con ella?

-Ella no es así, no la conoces para nada. La he visto comer y beber como un camionero. Una vez se comió un sándwich de gusanos para molestar a su hermano. También me pregunto que hace conmigo aun, es muy buena.

-Debe quererte de una manera muy mala para estar aquí, hay un cuarto disponible al fondo. Pueden quedarse el tiempo que quieran ¡Es su casa! Yo iré a dormir un poco.

Charlotte saco la cabeza de sus rodillas viendo como Harry la miraba desde la puerta, un cigarrillo en sus labios y una mirada indiferente. Mientras alzaba sus cejas. Quizá se preguntaba porque lloraba de nuevo. Ella solo le sonrió, tenían aquella costumbre. Pero desde hace un tiempo el fumaba mucho más, y ella lloraba demasiado. Ocultándolo todo detrás de miradas y sonrisas falsas.

-¿Estás bien? Mierda no debes llorar por todo, sé que esto no es tan lindo pero prometo que mejorara, solo dame tiempo ¿Puedes hacerlo? Solo aguanta un poco.

-Mama solía decirme que cuando me sintiera mal solo debía llorar, así tu organismo libera aquellas cosas malas. Siempre se sentaba a mi lado y me contaba sus anécdotas de joven. Lo siento solo es un tiempo difícil...yo la extraño tanto.

-Lose, también me siento de mierda, no puedo dejar de pensar en Anne, viendo a ese malparido sonreír sin culpas. Solo esperare lo suficiente para poder irnos ¿Aun quieres seguir en esta travesía?

-No tengo de otra, no puedo seguir sin ti. Ya no.

Porque la amaba a su manera, de una manera cruel, vil, de manera déspota. Él no la amaba, pero simulaba hacerlo.

La amaba con celos, con prohibiciones, con su aferramiento que la agobiaba.

Y por una extraña, muy extraña y estúpida razón , ella lo amaba.

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Quedan exactamente dos capitulos y el epilogo ¡Tadaaaaaaaaaaa!

Bueno agradecerles las leidas y todo eso, las quiero muchooo.

Rose