Solamente Omegas ✔

Capítulo 06.

 El baile.

Y aquí estamos, entrando los doce a el baile tan esperado por nuestra pelirroja amiga. Linds no ha parado de correr en todo el día y eso nos está exasperando en cierto modo.

-Estos tacones me están matando- comento Scar sosteniéndose del hombro de Scott para no caer.

-Aún no entramos y ya me quiero ir- mencione-, ¿no sería mejor pasar la noche viendo series y comiendo comida chatarra?

-Hubieran traído zapatillas- espeto indiferente Linds.

-¡Tú no nos dejaste!- gritamos todas molestas.

Los chicos aún no lo saben, ellos creen que el caos comenzara mañana, pero esta noche es cuando todo empezara y será el momento donde deberé hacerle frente a mis fantasmas.

-Estás en tu mundo- comento mi hermano mirando a mi mejor amiga de reojo.

- Solo pienso, algo que deberías hacer más seguido tu- hable adelantándome.

Acelere el paso al igual que los demás, que confundidos me seguían. Entre al gimnasio donde el baile sería y lo vi.

-Sigues igual que siempre- comento mirándome de reojo.

Desde lejos chicas lo inspeccionaban de pies a cabeza, esperando para mañana ya saber todo sobre él, pero nadie lo conoce tan bien como yo.

Dylan se acercó a mí y tomo mi mano.

-Para tu suerte, la inútil de tu amiga se escapó ella misma lejos de aquí, solo me ahorraste los problemas- susurro. Pero he vuelto por Lauren, y por ti.

Al mencionar a la que fingía ser mi aliada pero era mi mejor amiga, mi confidente imagine que ya estaba enterada y seguramente rondaba por aquí en busca de escapar de los ojos de nuestra pesadilla.

-Para tu mala suerte, no voy contigo ni a mitad de cuadra- comente alejándome notablemente de él.

Dylan subió la mirada y se fijó en algo detrás de mí.

-Así que este es Matthew Brown- dijo con sorna mientras se acercaba a mis amigos tirando de mi mano.

-No tienes nada que hacer aquí- espete tratando de empujarlo.

-Tengo que revisar que mi ex novia se hunda conmigo, claro que tengo que hacer algo- contradijo.

-Mantente alejado de ellos no tienen nada que ver.

-¿Por qué insistes en que me aleje de ellos?

-Porque yo no me meto con tus amigos y familia.

Dylan me miro serio intentando descubrir mis secretos como siempre lo ha hecho.

-Mañana será otro día y hablaremos seriamente.

-No tengo nada que hablar contigo.

-Pero supongo que querrás hablar con tu amiga antes de cualquier decisión, ¿o me equivoco?

-Solo saldré contigo si Lauren se encuentra presente.

Dylan asintió conforme y se alejó hasta una rubia cabizbaja. La reconocí enseguida como la ya nombrada, Lauren me miro por unos segundos y me brindo una sonrisa débil para luego salir tras Dylan del establecimiento.

-¿Quién era esa rubia?- pregunto confundido Bruno.

-Lauren- murmure.

Comencé a pensar en todo lo que Dylan habrá hecho para que Lauren lo esté siguiendo.

Mañana tendré que cambiar las cosas seriamente.

El resto de la noche se pasó rápidamente entre risas y demás. Pero aun así en mi mente solo estaba pensando en que decir mañana.

En toda la noche no logre conciliar el sueño, para distraerme comencé a ver videos en mi celular.

Los primeros eran de hace unos años, uno de ellos era un paseo por toda la residencia que habíamos elegido y que aún no habíamos amueblado, las chicas se paseaban por toda la casa diciendo que sería cada cosa.

Otro video es de una pelea que tuvimos entre Alfas y Omegas, donde sin querer le lance mi helado a Matt y así comenzamos un pelea de comida.

Seguí viendo videos hasta que amaneció y escuche pasos en el pasillo.

Camine al baño y aprecie mi apariencia, unas notables ojeras estaban debajo de mis ojos adormilados, mi pelo se encontraba despeinado y mi boca reseca.

Me arregle lo mejor que pude para no ser tan evidente y cuando estuve lista baje a la sala donde Linds, Scar, Bruno y Matt se encontraban sentados desayunando.

-Te ves horrible- comento Linds al verme, logrando que los demás la imiten y hagan una mueca.

-No dormí- admití.

-¿Enserio iras con Dylan?- pregunto Scar sin dejar de desayunar.

-Tiene bajo amenaza a Lauren, y pronto estaré igual, prefiero arreglar las cosas ahora.

-Solo no digas cosas que causen tu muerte repentina- bromeo Linds abrazándome.

-Nunca me matara, aún le soy útil.

Y espero que eso siga por un tiempo, sino, mi funeral estará más cerca de lo planeado.

Un mensaje de Dylan llego a mi celular diciendo donde nos veríamos y la hora.

Faltan dos horas y media.

Durante ese tiempo estuve encerrada en mi cuarto preparándome, usando zapatos bajos en caso de necesitar correr, y una saco negro para disimular en caso de tener que perderlo de vista.

Estas son las consecuencias de jugar con fuego.