Solamente Omegas ✔

Capítulo 09.

Cita.

-¿Ya vamos?- pregunto Scar desde afuera.

-Son las seis de la mañana, espera un poco más- respondí intentando volver a dormir.

-Pero...

-Ve a molestar a alguien más- la interrumpí.

-¡Brenda, Bruno!- chillo nuestra amiga ahora en otra carpa.

...

-Tengo sueño- murmuro Linds arrastrando los pies.

Luego de que todos nos cansáramos de tener a una Scar aburrida deambulando por todas las carpas mientras habla y habla, decidimos al fin venir a la cascada.

Dejamos las cosas aún lado y los chicos saltaron al agua.

-¡Esta helada!- chillo Linds al meter un pie.

-¡Vamos!- dijo Scar tomando a la pelirroja del brazo para lanzarse ambas al agua.

-Hagamos algo- menciono Chad-, jugaremos un juego, nosotros las tenemos que atrapar en menos de cinco minutos, si ese tiempo se cumple y no lo logramos ustedes nos pueden pedir lo que quieran, pero si lo logramos nosotros les pediremos lo que queramos.

-Parece una forma de ligar indirectamente- comente abrazando mis piernas.

-Nosotros no necesitamos buscar otras maneras de ligar y menos con ustedes- contrataco Matt.

-Lo que te haga dormir feliz, Brown.

-¿Todos participan?- pregunto Simón.

-Si- respondemos todos preparándonos.

-¡Tiempo!- grita Chad comenzando a correr.

Corro entre los chicos que persiguen a las demás y noto a Matt siguiéndome a una gran velocidad que yo no alcanzaría ni en años.

Veo a Linds correr hacia mí y en minutos ambas estamos cayendo al agua.

Ignorando las quejas de Linds tomo rumbo hacia arriba de la cascada con Matt pisándome los talones. Siento como me empieza a tomar del brazo cuando mi hermano y Brenda pasan entremedio de nosotros separándonos una buena distancia.

Con esta pequeña ventaja sigo corriendo más rápido pero veo como Chad está caminando hacia atrás frente a mí logrando que nos choquemos.

Me levanto rápidamente ignorando las quejas de uno de los gemelos y sigo con mi objetivo. Cuando creo estar a salvo Matt aparece logrando que quede acorralada en la cima, o salto o me dejo atrapar.

En cuanto el comienza a avanzar yo retrocedo.

-Faltan segundos- avisa Chad.

Es ahora o nunca.

Cuando pretendo saltar siento como Matt toma mi brazo cayendo ambos como si de una película se tratara.

Salimos del agua mientras yo maldigo en todos los idiomas que puedo.

-¿Cómo quedaron los resultados?- pregunta Linds.

-No la atrape- dicen Chad y Simón a la vez mientras Alaska y Kiara aplauden felices.

-La atrape- menciona mi hermano mientras Brenda lo maldice.

-Yo igual- dice Jake.

-No lo logre- comenta Scott.

-Yo si- habla Matt.

-Entonces Alaska, Kiara y Scarlett deben decidir mientras que Bruno, Jake, Matt también- menciono Linds.

-¿Por qué no vamos todos al parque de diversiones?- propuso Brenda.

-Hay uno que abrieron hace poco a unos minutos de aquí- investigo Alaska mirando su celular.

-Vallamos mañana- hablo mi hermano.

-Esperemos que no llueva- suplico Brenda mirando el cielo que esta nublado.

-El pronóstico dice que no, y nunca miente- aseguro Chad.

-Siempre se equivoca- comente recordando las veces que aseguro un día soleado y termine volviendo mojada.

-Pues, eso fue porque a ti no te quiere.

-¿Y a ti si?

-Me quiere más que Matt a ti.

-Entonces no será mucho amor.

-Si eso dices.

...

-¿A dónde vamos?- pregunte mientras Matt me arrastra por todo el lugar.

-Ya te dije, no pienso matarte por ahora.

-Que tranquilizador.

Cuando estaba a punto de acostarme a dormir, Matt comenzó a hablar hasta comenzar a arrastrarme por un camino que no veo a causa de no tener linternas.

-Al menos dime si debo preocuparme- me queje intentando no caerme.

-Por ahora no.

Cada vez nos adentrábamos más en el camino y cada vez mis nervios eran más notables logrando bromas del castaño.

-Llegamos- aviso y se sento en lo que era el borde de la cascada.

-¿Por qué estamos aquí?- pregunte imitándolo.

-Para hablar. Si no te alejo de posibles ideas de escapar es imposible.

-¿Y de qué quieres hablar?

-¿Por qué haces todo tan difícil?

-¿De qué hablas?

-Cada vez que trato de acercarme para aclarar las cosas te limitas a huir.

Y como si de un álbum de fotos se tratase en mi mente aparecieron todos los momentos incomodos donde él se acercaba y yo decía que debía hacer algo o hablar con alguien.

-No es sencillo.

-Si lo es, tú lo complicas con tu mente que suele crear películas de cosas que tal vez no sucedan.

Bueno, solo sucede a veces.

-Ese no es el punto, sé que hablar solo complicara las cosas.

-Hagamos esto, mañana cuando vallamos al parque de diversiones pasaremos el día juntos, así tomaremos la confianza que teníamos años atrás y dejaras de huir dejándome parado en el centro del pasillo como un perro abandonado.

-Está bien.

-Es una cita.

¿Qué acabo de aceptar?