Solamente Omegas ✔

Capítulo 22.

Adiós.

Los días pasaron y el momento más temido llego.

Me levante más temprano que los demás aprovechando que es domingo, arme las maletas y las deje debajo de mi cama.

Dolía hacer todo esto a escondidas, pero estaba dispuesta a hablar correctamente en el desayuno.

Poco a poco fueron despertando y bajando a desayunar.

Cuando estuvimos todos y me dispuse a hablar el timbre sonó. Mi hermano se dirigió a abrir y volvió rápidamente acompañado por mi papá.

-Ayelen trae las maletas-ordeno en cuanto me encontró sentada.

-Dijiste que era por la tarde-reproche molesta poniéndome de pie.

-No importa lo que dije, ayer en la noche debiste haber armado las maletas para estar lista en cuanto llegara.

-Pero...

-¿Acaso no les dijiste?

Baje la mirada y negué apenada. Ahora se enterarían de la peor forma. Subí las escaleras y logre escuchar como papá comenzaba a explicarles todo.

Tome las maletas y luego de ver mi cuarto por última vez baje hasta donde el asistente de mis padres me esperaba listo para guardarlas.

-Fue irresponsable de tu parte no decirles-hablo el mayor mirándome serio.

-¿Irresponsable dices? ¡Sabes acaso lo que es que te obliguen a dejar todo lo que quieres, todo lo que hace feliz, solo para que tus padres se sientan felices! ¡Estoy abandonando mi felicidad para que ustedes estén en paz! ¿Eso es irresponsable?

-No discutiremos más este tema, ya tuvimos suficiente con esto.

-Nunca tendremos suficiente, me estas separando de todo lo que amo solo para que ustedes se sientan bien consigo mismos, para intentar arreglar todo lo que paso últimamente.

-No lo repetiré, despídete y punto.

Mi papá se da media vuelta mientras me deja a mí sollozando en medio de la sala.

-Jamás les perdonare esto.

Él no se detiene, solo sigue camino al auto. ¿Y yo?, estoy en medio de la sala intentando controlarme, pero me es imposible.

La primera en acercarse en Brenda, quien me abraza mientras me dice que esto no termina aquí, que sea fuerte.

-Cuida de mi hermano-le susurro-, no te dejes manipular, no dejes de ser tan tú.

Mi mejor amiga asiente y me suelta. La siguiente en abrazarme es Linds la cual comienza a llorar en mi hombro.

-Me vas a hacer llorar más aun-digo y ella ríe pero lagrimas siguen cayendo por sus mejillas-, serás fuerte, cumplirás tu sueño e iremos a Australia juntas, veremos canguros y nos reiremos mucho.

Kiara y Alaska se acercan, pero no decimos nada, todo ya está dicho y ellas comprenden que cuando les hable sobre irse me refería a mí.

Scar se acerca y eso provoca que solloce más fuerte y deba cubrirme la boca con la mano.

Le abrazo como si fuera la última vez que la veré, pero sé que ella me buscara como sea, me lo prometió y nunca ha roto una promesa.

Sigo despidiéndome de los chicos hasta que quedan tres.

Abrazo con fuerza a Roy, Brenda lo llamo y el no dudo en venir. No decimos nada, porque eso nos haría llorar el doble.

El siguiente es mi hermano el cual me hace doler más, nunca estuve separada de mi gemelo, no nos hablábamos pero estábamos en el mismo lugar. Nos abrazamos con fuerza sabiendo que este no es un adiós es un hasta pronto. Él me dice cuanto lamenta no haberme hablado por años, cuanto lamenta haber mal gastado el tiempo, pero me promete que este tiempo a distancia será corto, me hace prometer que seré fuerte.

Pero sin ellos no seré nadie, solo una persona más en un mundo desconocido.

Llego al último y el más doloroso de todos. No decimos nada, solo nos abrazamos y tratamos de recordar todo lo que podamos sobre el otro, antes de separarme me entrega una carta y es cuando veo que está a punto de llorar.

No puedo con esto, no puedo verlo llorar, no puedo ver como los pierdo lentamente.

Sin más apretó con fuerza la carta y salgo seguida por ellos. Subo al auto y observo por la ventanilla a mi familia.

Los observo intentando recordar las facciones de cada uno, sus gustos, sus temores, todo.

No quiero olvidar ni un solo detalle y a pesar de tener fotos y videos quiero poder cerrar los ojos e imaginarlos frente a mí riendo y molestando.

Quiero ser capaz de recordar los treinta pares de zapatos de Linds, los musicales de Kiara y Alaska, los dibujos de Brenda, las historias de Scar, las bromas de los gemelos, la mala suerte de Scott, las facetas de Jake, los ronquidos de mi gemelo y todo de Matt.

Bajo la mirada a la carta, pero en estos momentos no es un simple pedazo de papel, es un recuerdo y un tesoro que conservare.

El auto comienza a andar y los veo por última vez, observo sus expresiones, sus lágrimas y me siento culpable por causarle ese sufrimiento, por no ser capaz de hacer hecho algo.

Y así termino por alejarme de todos, por un error que causo esto.

"Toda acción tiene su reacción."

¿Por qué nunca le hice caso a esas palabras?

¿Por qué las ignore?