Scott.
Entramos al parque de diversiones luego de un cansador viaje, el calor aún estaba presente y no podíamos hacer más que suplicar la llegada del invierno.
Música, puestos y bullicio formaban parte de este lugar. La última vez que vinimos a uno con mi familia Bruno vomito causando que nos fuéramos antes de los fuegos artificiales.
-¿A dónde vamos primero?- pregunta Matt pero todos ya se fueron dejándonos a nosotros parados en el centro del lugar.
-Cuanta amistad- murmuro irónica al ver a todos nuestros amigos esparcidos por el lugar.
-Hagamos una apuesta- suelta mirándome-, iremos a todos los puestos y el que gane en la mayoría le ordenara al otro por un día.
-Acepto.
El primer juego fue uno de fuerza el cual gano Matt.
Los siguientes juegos solo nos hicieron ir empatados logrando que ahora ambos debamos cumplir las órdenes mutuamente.
-¿Dónde están?- le pregunte a Brenda a través de nuestra llamada.
-En los puestos de comida, los esperamos- dijo y colgó.
Tomamos rumbo hacia ellos que están al otro lado del parque.
En menos de cinco minutos llegamos y los localizamos haciendo el ridículo.
-¿A cuál subimos ahora?- pregunto Scar emocionada.
-¡Vamos a la casita del horror!- chillo mi hermano.
Votamos y ganaron por mayoría ya que Scar apoyo la idea.
Entramos y todo parecía demasiado normal como para hacerse llamar "casita del horror", era un simple camino cubierto de ladrillos y telarañas.
-Bruno deja de jugar con mi pelo- se quejó Brenda golpeando a mi hermano.
-¡Yo no fui! Estoy molestando a Linds- menciono mi hermano.
Seguimos avanzando y el camino cada vez se hacía más estrecho consiguiendo que fuéramos enfilados.
Un chillido de Linds descoloco todo logrando que cayéramos unos sobre otros.
-Matt salte, pesas- me queje levantándome de la espalda de mi hermano.
-¿Sienten eso?- pregunto el castaño que sigue sobre mí.
-¿Qué cosa?
De un momento a otro Matt fue tirado hacia atrás con fuerza y como me quiere mucho tomo mis tobillos logrando que yo también fuera arrastrada por el rasposo suelo.
-¡Bruno!- grite y mi hermano me tomo de la mano evitando que siguiéramos nuestro paseo ya casi subterráneo.
Nos levantamos y note como mi ropa estaba completamente sucia por la tierra del suelo.
-¿Era necesario arrastrarme contigo?- pregunte intentando limpiar mi ropa.
-Mira el lado positivo, hubiéramos estado juntos hasta en la muerte y no hasta que la muerte nos separe- comenta mientras frota sus manos.
Ignoro su comentario al ver la salida a unos cuantos pasos.
Comienzo a correr hacia la luz que se filtra gracias a la puerta entreabierta cuando choco con alguien.
-¿Tú también quieres huir de aquí?- pregunta un chico divertido.
-Fui arrastrada medio camino, ya no me sorprende si esa puerta lleva a una piscina- comento frustrada.
-En realidad si lleva a la salida pero estoy huyendo de mi ex novia.
-¿Necesitas ayuda?
-Necesito distraerla.
-¡Matt!- chillo y veo como se acerca corriendo-, ve afuera y consíguete algo de diversión.
-¿Qué?- pregunto aturdido por mi petición.
-En lo posible a una rubia chillona- interviene el chico.
Matt niega.
-Oh no, no lo hare, ya estoy retirado.
-Por favor- pido mientras me apoyo en su hombro.
-Estoy intentado cambiar Smith, Scott lo hará.
El susodicho pasa a nuestro lado y sale, luego se escucha una conversación y como se alejan.
-¿Desde cuando quieres cambiar?- pregunto elevando ambas cejas.
-Desde que paso lo de Stephanie.
-Pues gracias enserio, adiós- se despidió el desconocido saliendo por la puerta.
Todos lo imitamos para por fin salir de esa atracción extraña.
Matt comenzó a rebuscar en sus bolsillos algo hasta que pareció entender algo.
-Me tiraron al suelo para robarme el celular y la billetera.
-Por suerte tengo yo las llaves del auto- agradecí mirando al cielo.
Fuimos a un par de juegos más donde las chicas ganaron algunos premios.
En cuanto a través de los megáfonos avisaron que el parque cerraría en unos minutos fuimos hasta los autos dispuestos a volver al campamento.
El viaje fue tranquilo gracias a que Alaska y Chad se durmieron.
-Mañana habrá una fiesta en la cascada- comente leyendo el mensaje enviado por los administradores del lugar.
-Iremos- aseguro Matt.
El resto del viaje se basó en silencio para no despertar a los demonios que dormían en la parte trasera.
En cuanto llegamos y nos encontramos con todos lo note.
-¿Dónde está Scott?
-¿No esta con ustedes?- pregunto mi hermano confundido.
-No...
-¿Lo dejamos allí, verdad?- menciono Jake divertido.
-El sabrá como volver- aseguro Simón.
Nos fuimos a dormir rápidamente ya que con esfuerzo y nos manteníamos despiertos.
Me desperté por un grito y sentí que no había dormido nada, pero por lo que veía era de día.
-¿Me extrañaron?- pregunto alguien entrando en nuestra carpa y tirándose entre nosotros.
-¿Scott?- pregunto Matt adormilado.
-¿Recién llegas?- cuestione al verlo cubierto de tierra y ramas.
-Sí, tal vez si mis amigos no me hubieran olvidado con esa ardilla chillona que se hace llamar humana yo estaría plácidamente durmiendo.
-Juro que pensamos en ti toda la noche- aseguro Matt.
-Pues tú lo habrás hecho, yo creí que ya había llegado hace horas- espete corriendo mi pelo hacia mi hombro izquierdo.
-Siempre tan amable- se burló Scott tomando mi mejilla-, iré a molestar a sus vecinos.
Scott salió de nuestra carpa para luego gritar en la de Brenda y Bruno.
A pesar de todo no sé qué hubiera sido de mí sin ellos en estos momentos.
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Solamente Omegas ✔
Teen FictionPrimera novela de la saga Legado Smith. Ella quería una segunda oportunidad. Y la vida se la dio, pero también se la otorgó a su mayor enemigo. Ahora, Ayelen Smith ha comenzado de cero junto con sus amigas, con una regla algo extraña y un nue...