Capitulo 18.

875 55 3
                                    


Después de cinco días llegue a Boston. Todavía caminada como un vaquero pero no me importaba en lo mas mínimo. Cuando llegue a casa Enna me recibió, sirvió mi comida y la llevo a la habitación. No era como sentirse en el cielo cuando bajabas o subías una escalera.

Tomaba mis medicinas al pie de la letra. Pero al día siguiente tenia que comenzar mi rutina laboral. Pase la primera noche poniendo las fotos de la boda en retratos, los cuales puse sobre la peinadora que si tenia dos lociones era mucho.


Era le tercera mañana de mi llegada Boston. Estaba inundado en papeles que habían llegado durante mis días fuera del país . Jose Angel me ayudo bastante pero los papeles que me rodeaban eran los mas importantes, esos que tenia que revisar con lupa en mano para saber que nada me sorprendería tiempo después.

La puerta se abrió y Amanda entro con dos sobres amarillos. Resople. No volvería a irme durante tanto tiempo. O por lo menos, no sin llevarme a Jose Angel conmigo.

-Su sobrino esta afuera ¿Lo dejo pasar?

-¿Que sobrino? -Pone los sobres en la mesa y me mira nerviosa.

-Richard Taylor, señor.

-Si hazlo pasar.

Richard venia de la universidad, estaba con un bolso colgando de sus hombros. Parecía molesto y eso no era algo normal en el. Su ceño estaba fruncido, tanto que intimidaba. Pero no hablo de lo que le molestaba, primera conversamos sobre las clases, las chicas del instituto. Lo cual me hizo recordar que mi Princesa tenia una beca en esa universidad.. Y que Lian también estudiaba allí... Moriré de un infarto.

-¿Que es lo que te molesta?  -Le solté- Pareces molesto y siempre te he dicho que me digas lo que te molesta si es que esta en mis manos solucionarlo.

-Mama se molestaría si te pido algo mas.

-A la porra Brida. Habla.

-Es Lian... Sabes que nosotros nos llevamos pero que en algunas ocasiones el me saca de quicio.

-Me imaginaba que seria por tu hermano ¿Que hizo?

-La camioneta... Sabes la Tahoe.

-Si,la recuerdo. Después de todo es el único que les he comprado -Dos chicos, un carro. Ya se cual es el problema- No quiere compartirlo..

-Exacto. Utilizaría el de mama pero una Minivan no esta bien vista. Ademas de que me gustan las camionetas grandes.

-Comprare una para ti -El se alarma y su ceño se borra.

-No!Mama me mataría. Dice que nosotros somos grandes y que debemos obtener nuestras cosas por méritos propios.

-¿Pero como trabajaras para comprarte una camioneta si casi no sales de una biblioteca, la universidad y tu habitación?.

-No lo se. Pero la loca de mi madre se molestaría si compras algo para mi.

-No comprare nada -Pienso y digo- Puedes tomar ''Prestado'' uno de los que hay en casa. Después de todo tengo bastantes. ¿Y tu hermano? -Dije eliminado algo de mi proyecto que no me convencía.

-Bueno, en la universidad, llego de monte carlo y nada nuevo.

-¿No se supone que termino el trimestre?.

-Se supone pero tendrá que hacer unos cuantos trabajos porque hay una materia que no paso o algo así. -Asiento.

-¿Y tu porque no fuiste a Monte carlo?

-Sabes que Denyse es insoportable y si a eso le sumamos a Aureliano peor. Ademas yo no soy tan unido con alexis. ¿Y tu porque no fuiste?

-Estaba en Londres. Unas cosas de trabajo.

-Ah..

Cuando llegue del trabajo tome un baño. Cuando venia de la cocina pase frente al gimnasio. No puedo hacer ejercicio hasta dentro de un mes. No puedo hacer nada de fuerza con las piernas ni con la parte baja del abdomen. Subí lentamente las escaleras y cuando llegue a la puerta de mi habitación gire y entre a la que estaba al frente. Vi la pintura rosa en las paredes, la cama con dosel blanco como la nieve, la araña que colgaba del no tan alto techo. Las mesas de noches que eran de espejos. La peinadora de Acrílico blanco. Llame a Ignacio por teléfono y le dije que subiera. Camine hasta mi habitación y de una caja de zapatos saque cuatro fajas de billetes de cien dolares.

-Señor Marco -Lo miro y le dio tres de las cuatro fajas. El me mira sin entender.

-Llevaras a Bolenna a un centro comercial, si es posible, al mas grande de todo Boston. Ella comprara ropa de mujer y todo lo que una necesita una.Cuando se le acabe el dinero dale mas. No quiero que vuelvan hasta que no quede ni un solo dolar ¿Bien?

-Si, señor Marco.

-Dile a Bolenna que venga.

El sale de la habitación y yo lo sigo, entro a la otra. Todavía hay un leve olor a pintura. Observo los estantes de acrílico color lila, donde hay unos libros de moda. Reconozco nombre como coco chanel y luois vuitton. Entro al baño que tiene cambios, hay pequeños azulejos color lila y resalta el blanco de la tina. El Vestier sigue vació, pero eso no durara demasiado.

Siento una presencia tras de mi. Cundo volteo la veo con su uniforme y postura desenfadada. Se dirige con respeto.

-Señor..

-Bolenna.

-Dígame.

-Toma -Le doy la faja de billetes- Compra ropa de mujer, todo lo que alcance con ese dinero, confió en que compres cosas recatadas, de señorita, que no muestren tanta piel. Compra perfumes, geles de baño, ropa interior. Todo lo que una mujer necesita y mas. Los colores pasteles estarán bien. También colores tierras. Compra vestidos que queden a medio muslo y de tiros gruesos. Ignacio ira contigo, el tiene tres mas de esas, compra todo lo que se atraviese en tu camino que tenga las características que te pedí, por favor que sea ropa de marca -Le detalle el cuerpo. Era un poco mas delgada pero tenia caderas y trasero bien formado. Como mi princesa.- Que sea una talla mas grande que la tuya. Ah! Y zapatos también, ve a cambiarte.


El fuerte dolor de cabeza no me dejaba dormir, y mañana temprano tengo una junta en la empresa. Mi teléfono comienza a sonar, es una llamada de julio, mi abogado. Deseaba tomar algo que me quitara el dolor pero no se me estaba permitido auto medicarme.

-¿Que quieres? -Comenzaron a tocar a mi puerta- Espera -Me levante y abrí la puerta de mi habitación, bolenna estaba tapada por un montón de bolsas, reí- ¿Que sucede?

-¿Señor que hago con toda la ropa? -Pregunta entre las bolsas. Asomo la cabeza por la puerta y veo que mas atrás viene Ignacio y dos chicas mas con montones de bolsas y cada una se veía pesada.

-Llévala al vestier de la habitación de el frente, guarden todo. Pídele a las chicas que te ayuden.

-Si señor -Se fue y cerré la puerta.

-¿Que pasa julio?.

-Se trata de tu esposa.

-¿Que quiere maritza?

-Cerramos el trato. Se quedara con todo lo que tu estas dispuesto a entregar y llegamos a dividir todo. Claro que ella se quedo con montones de propiedades y tu con unas pocas. El divorcio ya esta en puerta. Están por imprimirlo.

-Eso es una buena noticia.

-Si, pero tendrás que verla. Al final sera tu socia.

-No, yo separare la empresa, una parte se la quedara ella, la otra yo y yo no volveré a ver a esa insufrible mujer.

-Bien. Entonces nos vemos mañana después de la junta.

Ahora si! ultimo capitulo de la semana.


Solamente tuya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora