GANADORA DEL PRIMER PUESTO EN LOS #PremiosParaTi en la categoría de ACCIÓN.
Beth, una chica como muchas otras, se ve obligada a mudarse dado que su padre ha sido trasladado de trabajo para llevar un caso policial en la ciudad de Los Ángeles. ¿Lo bue...
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Había sido un día muy largo y estaba agotada. Llegué a casa y nada mas entrar me encontré con mi madre en la cocina.
-¿Que tal el día cielo? -preguntó ella nada mas verme aparecer por allí.
-Muy bien mamá. Hemos estado en un montón de sitios y Kath me ha presentado a su primo Bill que tiene un restaurante de comida rápida en el centro.
-¿Bill? No me suena mucho...¿Que tal está Kath?
-Igual de loca de siempre. -dije riendo.
-Entonces igual que tu. -dijo Steph apareciendo en la cocina. La saqué la lengua como una niña pequeña y subí a mi habitación tras despedirme de mi madre con un beso en la frente.
Me pegué una ducha rápida y me quité el poco maquillaje que me quedaba en la cara y que me había puesto esta mañana. Me puse mi pijama de los Minions y me metí en la cama. Finalmente me quedé dormida soñando con un rubio que iba en moto.
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Melevantépor la mañana conladulcevozdemihermanalacualirradiabapaz.
Já, mas quisiera.
Steph me zarandeaba de un lado a otro mientras gritaba que yo le devolviera su pintalabios preferido porque no lo encontraba por ninguna parte. Claro, echémosle la culpa a la hermana pequeña.
-¡Déjame en paz plasta! Yo no he tocado tu estúpido pintalabios. ¡Y ahora déjame dormir, que son las ocho de la mañana!
-¡He quedado y necesito mi pintalabios! -gritaba ella.
-¿¡Acabamos de llegar a la ciudad y ya tienes un ligue?! ¡Debes estar desesperada mujer! -grité aún más alto.
-¿Se puede saber que pasa aquí? -preguntó papá entrando por la puerta de mi habitación.
-¡Me ha robado mi pintalabios favorito! -gritó Steph señalándome. Yo bufé frustrada y miré a mi padre pidiéndole ayuda con la mirada. Él se encogió de hombros. Me volví a tirar sobre la cama tapándome hasta la cara con las sábanas.
-No creo que B te haya robado algo que ni siquiera va a usar. -dijo por fin mi padre. Gracias a Dios hay alguien en esta familia que emplea el sentido de la lógica. Y diréis ¿B? Sí, mi padre me llama como la letra del abecedario. Es algo que hace desde que era mas pequeña, así que digamos que me he acostumbrado.
-Pero...estoy segura de que ella lo ha cogido papá. -volvió a decir Steph.
-Es más probable que lo hayas perdido. Siempre tienes la cabeza en otro sitio. -dije yo aún bajo las sábanas.