19| Baile de bienvenida e imprevisto

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A la mañana siguiente, el despertador volvió a sobresaltarme y acabó hecho pedazos de nuevo. Una lástima...

En realidad aquella mañana me levanté antes de tiempo. Me vestí para ir a clase y desayune junto con mi familia. Jacob y yo llegamos juntos al instituto y nos dirigimos a clase de Historia.

El bueno del profesor Philip no vino, por lo que tuvimos hora libre. Las chicas y yo nos pusimos alrededor de una mesa y empezamos a charlar. Ellas ya sospechaban que pasaba algo entre Jacob y yo así que les tuve que contar con pelos y señales, petición de las gemelas, lo que sucedió anoche.

A la hora del recreo nos fuimos a una cafetería cercana al instituto donde comimos unos buenos churros con chocolate caliente.

Cada vez quedaba menos para el otoño, y con él venía el baile de Bienvenida. Jacob ya me había pedido que fuéramos juntos, y yo no dudé en aceptar.

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Por fin el tan esperado baile llegó. Yo no estaba muy entusiasmada. En mi antiguo colegio no había asistido a ninguno de los bailes anuales. Sinceramente prefería quedarme en casa viendo una maratón de The Walking Dead. Eso sí era diversión.

Entre Kath y las gemelas, que por cierto habían hecho muy buenas migas, me convencieron para llevar un vestido blanco de gasa, con flores que me llegaban desde la altura del pecho hasta la cintura. A este lo acompañaba un cinturón del mismo color y unos tacones, tos, taconazos, cortesía de las gemelas. Creo que esta noche llegaría a casa con muletas.

Ya era hora de salir, mi madre me avisó de que Jacob ya estaba abajo, pero yo seguía sintiéndome insegura con aquellos tacones. Me los quité y los sustituí por unas converse, mas o menos del mismo tono, que me había regalado mi tío Mike hace tiempo.

-Uf, mucho mejor. -susurré para mi. Llevaba el cabello recogido en una alta cola de caballo. Algunos pelos rebeldes se habían posicionado a ambos lados de mi rostro.

Salí de casa y vi a Jacob apoyado en su moto. Llevaba un traje azul marino y una camisa blanca por fuera  del pantalón. No llevaba corbata, pero aún así se veía elegante. Su rubio pelo se alborotaba por el viento que empezaba a soplar.

Alzó la vista y me miró sorprendido abriendo ligeramente la boca. Me sonrojé.

-Eh...estas preciosa. -tartamudeó cuando me acerqué.

-¡Chicos, chicos! -gritó mi madre saliendo de casa con la cámara. -Una foto, venga. -sonreí.

Me apoyé en el hombro de Jacob y él me sujetó de la cintura. Seguidamente sonreímos a la cámara. Clic.

-Perfecto. -dijo mi madre. Se acercó para darme un beso. -Que os divirtáis.

-Gracias mamá. -dije abrazándola y tras aquello, ella volvió a entrar en casa.

-¿Vamos? -preguntó Jacob.

-Vamos.

Llegamos al baile sobre las diez de la noche. Nos encontramos con el grupo, todos estaban muy guapos.

Marco llevaba un traje negro junto con una camisa blanca y una corbata roja. Las gemelas llevaban vestidos idénticos. Lo único que variaba era el color. El de Cindy era negro y el de Lisa azul índigo. Estaban estupendas.

Kath llevaba un palabra de honor granate el cual había combinado con unos tacones del mismo color. Y Noa llevaba un vestido largo que iba desde el blanco por la parte de arriba hasta el verde esmeralda por la parte de abajo. Era un vestido degradado. Realmente precioso.

-Estás guapísima. -dijo Lisa mirándome de arriba a abajo. -¿Y tus tacones?

-¿De veras creíste que iba a ponérmelos?

-Eh...¿si? -dudó.

-Parecía un maldito flamenco. Solo me faltaba ir de rosa. -ella rió y me guió hacia la pista de baile.

Into you de Ariana Grande sonaba por los altavoces. Bailé como una retrasada al ritmo de la música. Noa y Kath hacían muecas graciosas y las gemelas empezaron a saltar de un lado a otro como auténticas dementes. La gente nos miraba raro. Me entró la risa y no pude parar hasta que de lejos vi como Lesly, la rubia oxigenada, nos miraba con desprecio. Me llevé el dedo índice al cuello, lo crucé de lado a lado horizontalmente, y formé con mis labios un "Estas muerta". Ella abrió los ojos y salió de allí. Reí. Cobarde.

Empezó a sonar Will you marry me de Once Jameson. Busqué a Jacob con la mirada y lo encontré hablando con Marco y con el DJ.

Él pareció escuchar también la canción lenta y empezó a buscar a alguien por todo el salón. Sus oscuros ojos se fijaron en los míos. Sonreí. Se acercó hacia donde yo estaba y me tendió la mano.

-¿Haría el honor de concederme este baile? -preguntó con una tímida sonrisa en el rostro. Asentí.

-Será un placer. -dije aceptando su mano. Nos dirigimos hacia el centro de la pista y empezamos a bailar. Nos mecíamos al ritmo de la música de un lado a otro. Apoyé mi cabeza en su hombro y cerré los ojos disfrutando del momento.

Pero éste, al parecer, no duró mucho. Mi teléfono empezó a sonar con una melodía alarmante. Sin duda debía cambiarla. Descolgué.

-¿Si?

-Bethany, soy Evelyn. -dijo su voz al otro lado del teléfono. Noté pánico e histerismo en ella.

-¿Que ocurre Ev? ¿Estás bien? -ella suspiró con pesadez al otro lado de la línea. -¿Ev? -pregunté al ver que no contestaba.

-Ivanov se ha escapado.

Editado

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ΔlohΔ personillas!

Nuevo capítulo, algo corto, pero es que estoy en época de exámenes. Esta semana pasada tuve diez, literalmente.

Espero que os haya gustado, no os olvidéis de comentar y darle a esas lindas estrellitas que se encuentran en la parte de abajo.

Querría dedicar este capítulo a _PerfectError_ la chica que me leyó la mente y que está escribiendo una historia que tiene muy buena pinta. Os recomiendo pasaros por 'Bailarina entre partituras'. Un besazo enorme. Nos leemos en el próximo capítulo.

~Alex~

 La Pelirroja de mi VecinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora