Su mirada tenía un no sé qué, que me ponía nerviosa más de lo normal.
Sentía la sensación de obedecerlo en todo lo qué me pedía.
Y cuando menos lo esperé arriesgó su vida por mí.
Así fue escrita nuestra historia.
Este era el mejor día de mi vida. Shawn había vuelto a caminar. Era la chica más feliz del planeta. Todos esos meses de terapia había resultado.
—¡Lo hago Lia! ¡Por fin lo hago!— gritó riendo.
Mis lágrimas salían muy rápido. Caminó hacía mi riendo y me abrazó. Yo no paraba de llorar. Se podía escuchar como todos alrededor de nosotros reían emocionados. Lo abracé tan fuerte.
—Lo logré gracias a ti amor— me susurró y luego lo besé.
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Me volvió a abrazar y me alzó para darme vueltas en el aire. Toda su familia comenzó a aplaudir eufóricos. Me bajó y todos vinieron a abrazarlo.
—¡No puedo esperar para la boda!— dijo mi tía abrazándome.
Era idéntica a mi, era yo un poco más madura y con 39 años aunque pareciera de menos.
***
Mi tía, mis amigas, Aaliyah y Karen lograron separarme de Shawn para ir a medirme el vestido. Estaban tan emocionadas que hacían que me pusiera más nerviosa.
Todo de la boda estaba perfecto. Las flores, decoraciones, lugar, música, invitados, todo. Shawn todavía era una persona reconocida y los medios nos habían puesto con la etiqueta de "pareja perfecta" y "la boda del año". En ocasiones nos seguían a todas partes.
Pero eso no me importaba, era feliz con la persona que más amaba.
—Serás la novia más hermosa que haya existido— dijo Karen.
Sonreí y me volteé para verme en el espejo con el vestido. Amaba el vestido. Amaba sus detalles. Amaba el hecho de que me iba a casar con Shawn.
—Te ves hermosa Lia— dijeron mis amigas felices.
—Tengo tantos nervios— dije mirándolas a todas.
—Es normal, pero no te preocupes en tres días se irán— dijo Aaliyah sonriéndome.
En tres días sería Lia Mendes.
Me quite el vestido con cuidado y con ayuda de ellas y luego volvimos a la casa. Empezaron a reír al ver que me fui a buscar a Shawn.
—¡Ya volvieron!— dijo Shawn feliz.
Sonreí y caminé hasta él. Su padre y Josh se levantaron riendo y se fueron.
—¿Por qué se van?— le pregunté sentándome en sus piernas.
—Saben cuando queremos privacidad— dijo coqueto y reí.
Me acosté en su pecho y me abrazó.
—¿Has hablado con tu tía sobre la empresa?— preguntó y negué.
—Shawn no sé cómo dirigir una empresa así, mi tía puede hacerlo.
—Cariño es tu empresa, tus padres trabajaron mucho en ella.
Resultaba que mis padres tenían acciones con una gran empresa y mi tía se hizo cargo en cuanto ellos fallecieron ya que yo desaparecí y no había ningún familiar interesado o que entendiera sobre los negocios. Mi tía compró las demás acciones de las demás personas haciéndose ella la única dueña de la empresa. Hizo un gran trabajo y ahora quería dármela.
—Está bien Shawn, lo haré pero luego de la boda— dije sonriendo.
Aaliyah entró grabando con su celular.
—¿Están nerviosos?— preguntó apuntándonos con el celular.
—Muchoooo— dije riendo.
—Yo nací para casarme con esta mujer, no sé el significado de estar nervioso— dijo Shawn besando mi mejilla.
