Las Bahamas
Luna de mielTodo lo que había vivido estos últimos años eran increíbles. Todo gracias al gruñón de mi jefe, y ahora mi esposo.
Nos habíamos cambiado y lo agradecía, no quería arruinar mi vestido. Salimos corriendo al aeropuerto y ya habíamos ya llegado a Las Bahamas. Estaba maravillada con el color del agua y toda la flora.
—Llegamos— dijo sonriendo cuando ya tenía las llaves de la habitación.
Entramos al ascensor y me cargo haciendo reír.
—¡Shawn!— dije riendo.
—Es tradición cargar a la esposa hasta a la habitación.
Cuando el ascensor se abrió Shawn camino sonriente hasta la habitación conmigo en brazos. Cogí la tarjeta y abrí la puerta dejándonos ver una gran habitación. Él fue directo a la cama, sabía sus intenciones y empecé a reírme.
—¿De qué te ríes?— preguntó inocente.
—De qué soy feliz de tenerte a mi lado.
Sonrío y besó mi frente.
Tocaron la puerta y él fue a abrirla. Por lo que escuche eran nuestras cosas.
—Shawn..
—Sí amor.
—Quisiera estudiar otra vez, sé que es una locura, pero me gustaría estudiar algo relacionado a la ciencia.
—Te apoyaré en todo lo que quieras mi vida.
Se acostó al lado mío y lo abracé.
—Si tuviera qué pasar por todas las cosas que pasé otra vez lo haría feliz, por qué gracias a eso Shawn puedo estar aquí junto a ti.
Él me apretó y lo sentí suspirar, lo sentía un poco raro pero no le di importancia tal vez era el cansancio.
Lo observé unos segundos y él me sonrió para luego besarme. El beso de subió de tono hasta que entregue completamente a él.
***
Estábamos en nuestra casa. La luna de miel había sido perfecta y estaba segura de que jamás cambiaría mi amor por Shawn. Estábamos desayunando y él estaba muy callado. Estábamos listo para salir a nuestras empresas pero no me iría hasta saber que le pasaba.
—¿Amor estás bien?
—Si, claro..
Asentí no muy convencida y me llevé los platos vacíos. Los fregué y busque mis cosas para despedirme.
—Pasaré por ti en la tarde— dijo abrazándome y luego besándome.
—De acuerdo, te amo mucho.
—Te amo, te amo, te amo mucho más— dijo besándome repetitivamente.
Sonreí y salimos. Él se fue en su auto mientras que yo me fui en el mío.
Cuando llegue a la empresa mi tía me saludo feliz y me fui a la oficina a trabajar.
***
Perdí la noción del tiempo y mire mi celular extrañada. Shawn no me había llamado y ya era hora de salir. Iba a marcarle pero una llamada de Aaliyah lo impidió.
—Hola Aaliyah ¿cómo estás?— dije feliz.
—Lia, Shawn está mal.
Esa palabras hicieron que me asustara y mucho. Ella estaba llorando y casi no la entendía.
Me levante y salí alarmada de la oficina.
—Aaliyah ¿qué tiene Shawn? ¿Qué le pasó? ¿Aaliyah?
—No lo sé, estoy de camino al hospital, lo único que sé es que se había desmayado en la empresa.
—¡Oh por Dios!— dije llorando.
—¿Lia estás bien?— preguntó mi tía asustada.
—Es Shawn, tengo que irme.
—No estás en condiciones de guiar, te llevaré.
Colgué la llamada y le di las indicaciones del hospital mientras sentía que todo en mi se desvanecía. Cuando llegamos estaba sus padres junto Aaliyah y Josh.
Aaliyah corrió hacía mí y me abrazó. Todo estaba pasando muy rápido. Escuchamos a un doctor decir sus apellidos y Manny reaccionó.
—¿Cómo está mi hijo?
El doctor no tenía ninguna expresión. Se quitó sus espejuelos y se los puso nuevamente.
Me acerqué a el desesperada.
—¿Cómo está mi esposo? ¡Díganos ya!— grite desesperada.
Él suspiro y dijo las palabras que jamás me hubiera imaginado. A él decir esas palabras todo mi mundo se cayó.
—Lo siento, acaba de fallecer.
Ese momento pasó en cámara lenta. Escuchaba mis latidos acelerados, mis manos temblaban, caí al suelo. Lloré, lloré como nunca. Escuchaba gritos y llantos descontrolados y pude ver cómo Karen se desmayaba. Entonces comencé a gritar lo más fuerte que pude. Aaliyah y Josh me abrazaron llorando también. No me importaba nada, solo lo quería aquí. Quería que esto fuera una pesadilla. Él no podía estar muerto.
—¡Él no está muerto! ¡Mi Shawn no está muerto! ¡Suéltenme, yo quiero estar con él! ¡Shawn! ¡Shawn!
Trataba de salirme del agarre de Aaliyah.
—¡¿Por qué?! ¡Quiero verlo! ¡Shawn!
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Never be alone
FanficSu mirada tenía un no sé qué, que me ponía nerviosa más de lo normal. Sentía la sensación de obedecerlo en todo lo qué me pedía. Y cuando menos lo esperé arriesgó su vida por mí. Así fue escrita nuestra historia.