Él vivía ermitaño a las afueras del pequeño pueblo, para lo único que iba era para comprar algunos alimentos, pero no socializaba con nadie, no tenía amigos y muchos contaban que su familia había desaparecido. Era leñador y cazador, se mantenía con esfuerzo y trabajo, vendía madera para sostener su hogar y a veces piel de venado o lobo según la temporada.
Un día mientras talaba unos cuantos árboles en lo alto de la montaña, logró notar que el cielo cambiaba violentamente de color y el viento soplaba fuertemente contra su piel y algunas pequeñas gotas que caían. Enseguida supo que era hora de marcharse, cargando los leños a su espalda comenzó su regreso a casa, después de unos minutos de caminata, la lluvia soltó su furia y el viento corría de manera que se escuchaba chiflar, él se aferraba con sus pies a la tierra, pues el camino era engañoso, un paso en falso y caerse podría ser un destino fatal. Rayos comenzaron a sonar de fondo, uno más ruidoso que el otro, la tierra temblaba tan pronto estos la tocaban, él empezaba a desesperarse, su camino se había desviado y ahora no tenía noción de donde se encontraba. Mientras miraba a su alrededor para orientarse, su pie resbalo en el barro y rodo cuesta abajo por una colina, su descuido termino golpeándolo contra un árbol, lo que hizo que perdiera la conciencia.
Al abrir los ojos sintió su cuerpo golpeado, el dolor por suerte era soportable, cuando logró aclararse vio el lugar en el que estaba, una cueva, al moverse logró ver que estaba acostado en una pila de hojas. Intento pararse pero comenzó a marearse, en su cabeza una ligera abertura estaba sanada con una especie de formula casera. En ese momento muchas dudas inundaban su cabeza, ¿Cómo había llegado allí?, el ultimo recuerdo que tenía era la caída casi mortal que había tenido hace unos momentos. Al lograrse incorporar se aproximó a la salida, sólo para notar que aun llovía diluvialmente, y que si quería salir aun no era el momento indicado a menos que quisiera tener un accidente de nuevo, no tuvo de otra que esperar en ese lugar un poco más, con sus ojos acostumbrados a la oscuridad vio alrededor, sus cosas, incluyendo la madera que había cortado, estaban junto a donde había estado dormido. Comenzó a sentir frio, y buscando en su mochila saco unos fósforos, con su sabiduría en acampar hizo en un tris una fogata.
No sabía cuánto tiempo había pasado ya, pero creía ya era de noche y la lluvia no paraba. Moría de hambre, pero para su suerte en su mochila no contaba con comida, intento salir un momento para buscar algo que cazar, sin éxito alguno regreso a la cueva con bayas que no lo llenaron.
Estaba a punto de salir de nuevo a probar su suerte una vez más, cuando en la entrada de la cueva se paró un ser de figura extraña, la luz no lo iluminaba en su totalidad, y solo podía verse que era de un tamaño intimidante, ninguno de los dos se movieron, él solo contuvo la respiración y aseguro que por primera vez en su vida había tenido miedo. El ser comenzó a aproximarse, y él no dejaba de mirarlo mientras daba pasos hacia atrás hasta que fue detenido por el fondo de la cueva. Su respiración comenzaba a agitarse y el ser no se detenía.
Cuando la luz de la fogata lo ilumino, logró verlo muy bien, era una mujer, o eso pensaba, estaba desnuda, sus piernas era adornada de lo que parecían plumas pequeñas y sus pies tenían una extraña forma entre pies humanos y otra cosa, su estatura era notablemente mayor a la de él (y él era considerablemente alto), su figura era ligeramente musculosa, lo que le daba una mayor imagen intimidante. Por otra parte, su rostro era delicado y hermoso, sus ojos brillaban con la luz del fuego y se distinguía un color marrón en ellos. Pero sin duda lo que más le sorprendía eran las enormes alas que estaban en su espalda, aun guardadas se notaban que eran de entre uno o dos metros de largo.
Él miraba intentando entender lo que sucedía, y por un momento creyó desfallecer, ella lo miraba con curiosidad, esperando que dijera algo o se moviera.
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Pequeños universos
Short StoryMe gustan las historias cortas pero con mucho significado, salen sencillamente de mi cabeza, y son especiales para mi porque son pequeños universos hechos entre mis manos...