PSYCHO

#Day 10

¡Holaa! Les traemos aquí el capítulo 10. Esperamos que os guste, me despido hasta el próximo miércoles :3

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Yoongi Pov

Jimin caminaba nervioso de un lado al otro de la habitación, el miedo hizo crecer sus oscuras pupilas y su respiración se aceleraba, mientras qué soltaba algún que otro murmullo inaudible incluso para él mismo.

-Yoongi - Estaba claramente alterado, era fácilmente perceptible en su voz torpe y expresión compungida, no me gustaba verle en ese estado.

Kyung se había despertado.

Me acerqué a él y lo miré de arriba a bajo con verdadera repugnancia y miles de cosas atroces que rondaron por mi cabeza.

-Yoongi ... -La voz entrecortada de mi mejor amigo me sacó abruptamente de mis pensamientos obligándome a regresar a la situación- Está despierto, ¿que vamos hacer con él  ahora?

Me giré en su dirección y acaricié su adorable rostro asustado con mis frías manos, provocando que se estremeciera entre ellas, mi tacto buscaba tranquilizarlo y mi esperanza era conseguirlo.

-¿Recuerdas porqué estamos aquí?  -Asintió algo inseguro- Comprenderé si quieres irte y dejarme el trabajo sucio, sabes que desde el principio nunca quise involucrarte en esto.

-Yoongi -repitió mi acción y también cogió mi cara, mi nombre no dejaba de salir de su boca y comenzaba a desviar mis pensamientos- Te quiero, y no pienses que voy a dejar que cargues con todo esto tú solo, me tienes a tú lado para lo que sea, para cualquier cosa -recalcó las dos últimas palabras dándome a entender que estaba conmigo en toda mi mierda.

Nos aproximamos, de manera lenta pero a la misma vez decidida, al rostro del otro para juntar nuestros labios pero cuando estábamos a milímetros de hacerlo un jadeo por parte de Kyung captó nuestra atención, haciendo que nos detuviéramos y que nos diéramos cuenta de su presencia. Iba a pagar por su intromisión.

-Kyung ... ¿Como estás? -pregunté sonriendo lleno de ironía mientras que me sentaba a un lado de él en la enorme cama, dentro de poco parecería un magnífico escenario de la película Saw- Te voy a explicar, así por encima dado que mi tiempo es muy valioso y quiero pasarlo con él -Señalé a Jimin y este se sonrojó-No soy tan malo como parece. De hecho, tú tienes la culpa de esto. Mi odio hacia ti empezó hace unos años, cuando le jodísteis a Park Jimin, mi mejor amigo y la persona más importante de mi vida. Hace poco estuve con uno de tus amigos y bueno -Sonreí- Debo admitir que la situación se me fue un poquito de las manos... No te gustará saber cómo quedó ni dónde está.

Me detuve uno segundos para dirigir mi mirada hacía él, su rostro mostraba terror, me gustaba, amaba saber que estaba experimentando lo mismo que Jiminie en aquella época.

-... bueno, ahora ya no importa. Pequeño, pásame la mochila que traje de tu casa.

-¿D-donde e-está?

-En el salón.

Aprovechando que él no se encontraba allí me acerqué, de manera rápida, a la persona que estaba sobre la cama y aprisioné su cuello entre mi mano derecha.

-¡Aaah por favor! Yo no quería hacerle daño. Yo solo quería complacer a Jihoon...

-Simplemente eres un hijo de puta al que se le acabó la suerte, ¿pensaste que todos estos años de acoso hacía él iban a quedar en el olvido? Y una mierda -solté el agarre y lo miré directamente a los ojos, los cuales se encontraban llenos de lágrimas- No pienses que vas a morir de esta manera tan sencilla, pienso torturarte hasta que me aburra de ti.

-Yoongi, ya la encontré.

Cogí la mochila y la abrí, estaba indeciso de lo que debería utilizar primero. Tijeras, buena elección, vamos hacer mi primera sesión de manicura.

-¿Quieres mirar o prefieres irte? -Esta vez la indecisión invadió mi voz, no estaba seguro de querer que Jimin viera esto.

-Q-quiero quedarme y contemplar el dolor en su rostro.

Sonreí orgulloso de su respuesta y volví a colocarme al lado de Kyung, entre mis manos capturé uno de sus dedos, esto iba a ser divertido.

El primer grito se hizo presente cuando con las tijeras arranqué una uña y sin darle apenas un margen de tiempo proseguí arrancando las otras cuatro.

-Parece que te duele -Escuché susurrar detrás de mi- Seguramente no se compare con los años que tuve que aguantar vuestros golpes y humillaciones.

Rabia, era lo que sentía dentro de mi cuando lo escuché. Sin pensármelo dos veces las clave en su mano atravesando el colchón a la par, repetí la acción varías veces dejando un amplio agujero en su mano, mano que había tocado el cuerpo de mi pequeño reiteradas veces.

Observé su otra mano con indiferencia y eliminé la opción de hacerle lo mismo, sería demasiado aburrido y le quitaría la diversión al asunto. Opté por algo mejor, coloqué uno de sus dedos entre las afiladas hojas de la tijera, si esto salía como yo quería iba a ser brutal. Las cerré fuertemente ante su mirada aterrada.

-Joder -Torcí el gesto con fastidio- ¿Por qué coño no lo arrancó? -Volví hacerlo obteniendo el mismo resultado- Pásame uno de los cuchillos, tendremos que hacerlo a la antigua.

Acepté el cuchillo que me pasó y rocé uno de sus dedos con él, no sin antes asegurarme de que cortaría uno de sus tendones. Harto de esos pequeños roces me deshice de sus dedos, uno a uno, dejando una impresionante mancha de sangre bajo su mano.

-¿Sigues vivo? -Le pinché en un brazo y se extremeció casi sin fuerzas- Bien, por lo visto sí.  Sabes Kyung, su hubieras sido un chico normal, un chico decente que no se metiera con las personas nada de esto abría pasado. Tú estarías feliz con tu pareja y tendrías una vida normal-Me levanté con el cuchillo entre mis manos y lo aproximé a su cuello- Tendrías amigos, una carrera universitaria e incluso una linda familia -Presioné la cuchilla contra su yugular. Quería que terminara ya con esto- Ningún ser humano se merece este tipo de muerte ... pero tú no eres humano. No después de todo lo echo a Jimin -Corté su cuello provocando que mucha sangre saliera de la herida recién hecha- Cuando le jodes la vida a alguien pierdes todos lo derechos de tu propia vida.

Me puse en pie y observé, con la mirada perdida, el cadáver. Sentí como unos brazos rodeban mi cintura dándome consuelo. Entrelazamos nuestras mano, yo aún de espalda, y sonreí victorioso ante lo que acababa de hacer.

-No eres un monstruo Yoongi, eres humano -Sus palabras consiguieron reconfortarme.

-Tú también eres humano, que hayas observado un asesinato y lo disfrutaras no indica lo contrario. Se lo merecía. Todos ellos se lo merecen.

Estábamos metidos en nuestra burbuja, una en la que imaginábamos que solo estábamos nosotros hasta que una voz proveniente de la entrada nos sobresaltó y nos separamos sorprendidos.

-Escóndete al lado de la puerta y coge cualquier objeto para golpear a alguien, creo que va hacer falta.

-¿Kyung? -Llamó la persona desde el piso inferior adentrándose en la casa- ¿Estás en la habitación?  -Sentí sus pasos acercándose, una vez llegó al cuarto sus ojos se abrieron al verme dentro- ¿Quién er...?

-Jimin, creo que le diste muy fuerte-Caminé hacia el desconocido y le di la vuelta encontrándome con su rostro- Rectifico, bien echo pequeño.

Jihoon, otra de los cabrones que le había echo la vida imposible al amor de mi vida.