Holaaa...!! Bueno hemos decidido contar la historia de Namjoon y Jin a la par que Jimin y Yoongi. Publicaremos los especiales en medio de la historia original. Esperamos que os gusten, besos y asta el próximo miércoles. =^w^=
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Narrador omnisciente
Había que ser muy valiente, o muy estúpido, para cruzarse delante suya en el momento que despedía su trabajo con paso rápido y firme deseando no volver a ver a los brutos del equipo de fútbol que siempre terminaban con heridas tras sus trifulcas vanas y claro, Le tocaba a él tratar a esos bárbaros.
Seokjin se cambió y salió de la Universidad en cuestión de segundos. El día agotador había hecho mella en su rostro que ahora lucía cansado, pero decidió mantener actitud positiva porque el resto del día sería maravilloso. Y es que hacía buen tiempo, perfecto para pasear y eso era lo que tenía que hacer para llegar hasta la cafetería en la que había quedado con Namjoon. El policía se reuniría con él allí tan pronto como termine de trabajar.
Solo pensar que tendría una cita con aquel chico hacía a Seokjin sonreír y pensar que valía la pena una agitada mañana.
Al llegar se sentó en una solitaria mesa del exterior del local alejada del resto de personas porque con Namjoon nunca sabías dónde acabaría la conversación y era mejor prevenirse de oídos indiscretos.
Sacó su móvil para mandarle un mensaje de "Ya estoy esperándote Namjoonie <3" mientras llegaba el café. Aún quedaba un rato para las cinco, hora a la que quedaron, así que se dedicó a rellenar el papeleo del trabajo, disfrutar del sereno entorno y de su café.
Inevitablemente su mente escapaba de los papeles de esguinces y recetas y llegaba hasta el chico aunaba sus sentidos. Últimamente todo era Namjoon, cada sonrisa era por él, su bálsamo curativo en los malos momentos era él. Siempre era bien recibido entre sus brazos y en su apartamento, donde ya casi dormía más noches que en su propia casa. Incluso fue invitado a quedarse permanentemente a vivir en aquel décimo piso donde Namjoon vivía pero rechazo la oferta porque no quiero invadir tu espacio ni privarte de intimidad.
En síntesis, Namjoon era exactamente lo que buscaba. Le comparaba con Yoongi, les colocaba en una balanza imaginaria y esta siempre se inclinaba hacia Kim, porque con el chico pálido todo eran angustias, debían ser cuidadosos en aquel psiquiátrico ya que nadie debía enterarse de que mantenían sexo, buen sexo aunque prohibido. También están los rechazos, la frialdad y el desinterés de Yoongi hacia él, pero le quiso en aquel momento, le quiso en pasado y de alguna manera lo sigue haciendo pero sin implicarse demasiado con él. Él ahora quiere a Namjoon, quien le aporta la tranquilidad, cariño y seguridad de la que echaba en falta antes.
[...]
Su reloj marcaba las diez y cuarenta y la silla delante de él seguía vacía. Había anochecido, la cafetería de había llenado de gente y el camarero estaba muy ajetreado pero el muy bastardo no se molestó en ocultar sus miradas y su sonrisa burlona que le decía serás muy guapo pero te han dado plantón.
A Seokjin no le importaba nada de eso, en su mente solo estaba asesinando a su cita. No respondió ninguno de los mensajes y mucho menos las llamadas y él estaba que se arrancaba sus propios cabellos. Pidió la cuenta cansado de esperar. Había algo que no andaba bien, conocía a Namjoon y él nunca le dejaría plantado sin un motivo de gran importancia, eso le hizo preocupar y apuró al camarero a que le diese la maldita cuenta.
Su solitaria tarde la había costado dieciocho euros* en cafés y dulces. Sacó su cartera para coger el dinero pero cuando fue a dejarlo en la mesa el importe fue puesto de un manotazo en la mesa. Namjoon había llegado, respirando costosamente, sudado y con una desolada expresión triste. Dejando los dieciocho euros en la mesa agarró a Seokjin y le hizo levante para después abrazarle fuerte.
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PSYCHO
FanfictionJimin es un chico que ya sufría abusos en la escuela y los sigue sufriendo en la lujosa Universidad a la que asiste ni él sabe cómo. Yoongi era su mejor amigo desde siempre, a pesar de que lo que el sentía hacia su menor no eran sentimientos de amig...