Teach me math, baby » H.S

28

Marylise.

En mi garganta se construye un grito, pero no alcanza a salir de mi boca como tal; en vez de eso, emito un suspiro ahogado cuando Jason cae al suelo por el impacto y la fuerza del golpe que recibió.

Alcanzo a ver cómo el chico en el suelo barre con su pulgar su labio inferior y luego lo mira para divisar la sangre que salía por la herida en su boca. Pasa su lengua por el corte y finalmente se levanta, acomodando y sacudiendo su ropa un poco.

—Tienes el puño pesado, Styles— Suelta una risita y termina de limpiar la sangre de su boca. ¿Por qué lo llama Styles? ¿Lo conoce?—. Te advierto que yo la vi primero así que, puedes irte por dónde viniste— Dice, regalándole una sonrisa cínica y haciendo un ademán hacia el camino por donde llegamos aquí.

Ahora es turno de Harry de soltar una risotada carente de humor.

—En eso te equivocas, Jason— Dice, negando con la cabeza lentamente y mirándolo de esa forma tan... da miedo cuando se pone así, cuando te mira directo a los ojos y pareciera como si estuviese mirando algo más allá de éstos, lo que refleja un claro contraste con su sonrisa, que logra sacarte un estremecimiento con sólo verla.

— ¡Harry, no!— Vocifero (como puedo), al ver cómo el aludido empuña sus manos en la camisa de Jason y hace que su espalda se estampe contra el tronco de un árbol.

No me importa Jason, por mí que le haga lo que quiera, lo único que quiero es que Harry no se meta en problemas por mi culpa.

Estoy comenzando a sentirme mal, mi corazón palpita muy rápido y tengo que respirar por la boca porque el aire que entra por mis fosas nasales no es suficiente para abastecer a mis pulmones.

—Yo la vi, por mucho, antes que tú— Le informa, de forma severa y ruda, mirándolo hacia abajo como si fuese un débil e insignificante bicho.

Jason es alto, pero no le gana a Harry. Cuando se acercó a mí y me salvó de caer a la fogata, noté que casi le llegaba hasta por encima de su mentón, y a Harry con trabajo y le llego al pecho. Para mí es alto, pero para Harry de seguro es apenas un tapón de leche.

—Así que será mejor que te alejes de ella— Habla, con ese tono amenazador y peligroso que utiliza cuando intenta intimidar a alguien.

—Vaya— Se mofa—. No sabía que te gustaban tan jovencitas.

A Harry no pareció gustarle su comentario, ya que empuja aún más su cuerpo contra el árbol y Jason borra la sonrisa entretenida de su boca.

—Estoy hablando enserio, maldito bastardo— Eleva su voz considerablemente y aprieta aún más sus puños en la camisa del chico que tiene aprisionado—. Aléjate de ella o te las verás conmigo—. Advierte, mirándolo por última vez de forma desafiante, para finalmente empujarlo de nuevo y apartarse de él, dejándolo tranquilo.

Harry avanza a pasos rápidos hacia mí y me toma del antebrazo, llevándome con él para salir de ahí. Yo no reacciono rápidamente y me dejo llevar por él, no soy consciente de nada sino hasta segundos después, cuando noto cómo nos alejamos de la fiesta y nos acercamos a los autos aparcados, es hasta ese momento cuando me detengo y me zafo de su agarre. Él se gira hacia mí y me mira con desconcierto, intentando sujetarme de nuevo, pero yo no se lo permito, retrocediendo un par de pasos para alejarme de él.

— ¿Bebiste de eso?— Pregunta, algo alterado aún por la pelea previa.

Asiento en respuesta y, tan pronto como lo hago, él acerca su mano y me arrebata el vaso para arrojar lo poco que quedaba de este al suelo. Yo espeto en protesta, pero él solo ignora ese hecho. ¿Por qué hizo eso? ¿Qué le pasa?