Harry
Ya había pasado una semana de las clase del joven Snape y me había acostumbrado a sus nuevas facciones, era hermoso sin importar que edad tuviera, había hecho explotar tres calderos en esa semana y no era porque no estaba prestando atención a lo que hacia, al contrario, el hacia que perdiera la concentración poniéndose detrás de mi y susurrando cerca de mi oído cosas como "no está mal" o "podria estar mucho peor " y "mocoso idiota" cuando explotaban, los gemelos ya sabían quien me daba las clases de poción y se pasaban día y noche bromeando sobre eso.
Y estaba muy emocionado, Ron y Hermione vendrían a visitarme hoy, era sábado así que la mamá de Thonk me había traído a mi ahijado y los gemelos emocionados compraron cerveza de mantequilla y wisky de fuego, Teddy volvía a tener el cabello negro y me encantaba. Sonó el timbre así que baje las escaleras corriendo y abrí lo más rápido que pude.
-¡Harry!- Hermione se hecho a mis brazos, sobre su hombro pude ver a Ron sonriendo.
-Lo vas a asfixiar Granger- ella me soltó y me abrazo mi amigo.
-Me alegra que por fin lleguen, aunque no sé porque no usaron la red flu- señale la chimenea.
-Nos aparecimos Harry- me sentí un poco avergonzado por haber olvidado aquello, teniendo en cuenta que cuando buscábamos los horrocruxes ella era la que nos hacia aparecer en distintos lugares.
Fuimos y nos sentamos en el sofá, Ron había comenzado a contar el viaje para conocer a los padres de Hermione, el cual fue un desastre ya que estaba tan nervioso que había roto su plato cuando iban a almorzar y luego en la cena se derramó su zumo de naranja en los pantalones. Hablamos de cosas diversas y al rato llegaron los gemelos, hasta que escuche el llanto de Teddy y fui a buscarlo.
-Se parece tanto a Remus y Thonk- dijo Hermione y comenzó a llorar, Ron envolvió sus brazos en la cintura de su novia abrazandola- a veces me digo, tengo que visitar a Thonk para luego recordar que están.
No pudo decir la ultima palabra y un nudo se me formo en la garganta, después de un rato callados me dispuse a hablar.
-¿Ustedes no habían comprado Cerveza de mantequilla y wisky de fuego?- pregunte a los gemelos, los cuales asintieron y les dirigí una sonrisa- vayan a buscarlo pues.
-Accio cerveza de mantequilla- dijo Fred- Accio wisky de fuego- termino George.
-Accio galletas- dije sin pensarlo, las agarre y las puse en la mesa.
-Toma Harry- Ron me extendió la Cerveza, mire que todos tuvieran una bebida y alce la mía.
-Por los caídos en batalla, Sirius, Lupin, Thonk, Ojoloco, Albus, Dobby y demás, ¡Por ellos!- grite.
-¡Por ellos!- gritaron todos al unísono y bebimos. Esa fue la única botella que bebí pues tenia que cuidar al pequeño pero eso no detuvo a los demás, los cuales ya estaban ebrios.
Mire el reloj ya pasaban de las diez de la noche.
-B-bueno Harry creoo- arrastró las palabras- que Ron y yo debemos irnos.
-Nada de eso Hermione tu y Ron se quedan- mire a los gemelos buscando apoyo pero se estaban besuqueando.
-No quieeero abusar de tu hooospitalidad Harry- dijo Ron.
-No lo hacen- Teddy halaba mi cabello- siganme -y para mi suerte así lo hicieron, los guíe a mi cuarto- pueden dormir.
Ambos se acostaron y abrazaron, apunte mi varita hacia ellos y les puse un pijama. Volví a bajar las escaleras y vi que los gemelos habían desparecido, supongo que ya se encontraban en su habitación haciendo una de las suyas. No quería dormir en el sofá y ni siquiera tenia sueño así que salí del edificio y camine al de Snape, ni siquiera sabia que hacia allí pero de igual manera subí las escaleras con Teddy, toque su puerta y espere y en menos de un minuto abrió. Se encontraba vestido con un pijama color negro con el logo de Slytherin.
-Harry- su cara era de sorpresa- ¿qué haces aquí?
-No quiero molestar Severus pero es que ni Edward ni yo podíamos dormir.
-Bueno pues pasa- se hizo a un lado así que entre- no deberías sacar a ese bebé a estas horas de la noche, podría enfermarse.
Me sentí un poco avergonzado, él tenía razón ¿y si el pequeño se enfermaba? No quería que eso pasará solo por mi capricho de querer venir a ver a Severus. Me senté en la esquina de su sofá.
-¿Quieres algo de tomar? ¿té, zumo, café?
-Un té estará bien, gracias- se dirigió a la cocina, los ojos de Teddy se tornaron negros al igual que su pelo, se volvía a parecer a Snape.
-Aquí tienes- me sobresalte al escuchar su voz, agarre la taza y le di un sorbo, luego la deje en la mesa- es idea mía o el niño tienes los ojos marrón claro y el cabello amarillo- mire a Ted y en efecto si los tenía.
-Es como su madre un metamorfomago siempre los cambia de color.
Agarre la taza y fui a dar un sorbo cuando Teddy estornudo y bote un poco del liquido caliente en mi pierna, deje la taza rápidamente y lo levante.
-Agh joder, tenlo un momento Severus- le extendi al niño y él con dudas lo agarro. Me baje los pantalones y vi que tenia una marca rosada en mi pierna.
-Emm Potter, mini Lupin se durmió en mis brazos- lo mire y era cierto, se veía tan tierno acunando con sus brazos al pequeño, hice aparecer una cuna junto a él.
-Acuestalo ahí- el asintió y con cuidado lo dejo dentro.
-¿Te encuentras bien?- me miro preocupado, me encogi se hombros tratando de parecer indiferente pero si me dolía- accio hielo.
Tenia en la mano una bolsita de hielo se sentó junto a mi y sin dudarlo la puso en mi pierna, un alivio recorrió mi cuerpo.
-Gracias- le mire, estaba mordiéndose el labio y mirando hacia abajo, seguí su mirada, ¡estaba viendo mi pene!
No pude resistirme más, agarre su cara entre mis manos y lo bese, un beso lento, disfrutando sentir aquellos labios tan carnosos junto a los mios, me separe y vi sus ojos buscando rechazó pero como lo esperaba no llego.
-Lo siento Snape- pero en realidades no lo sentía, estaba completamente feliz por haberlo hecho.
-No tienes porque disculparte- acarició mi mejilla.
Aparte la bolsa de hielo y subi mi pantalón con cuidado de no rozar la quemadura, apoye mi cabeza en su hombro, disfrutando del silencio, un lindo y cómodo silencio.
Bendito sea Edward Remus Lupin :3
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Mocoso Idiota
FanfictionLa guerra trajo consecuencias severas, como dejar la puerta del amor abierta de par en par, crear vínculos en las personas menos esperadas y dejar lo que tu-sabes-quien nunca tuvo "amor"