XXXII

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¿Verosímil? 

Inexpugnable, 

esta realidad. 

Yo no pido palabras apasionadas,

te pido el clamor 

de una mirada silenciosa. 


Inverosímil. 

Contradictorio, 

Yo pido destellos de luz

que gobiernan altos cetros 

despeinados,

yo pido una lisura, 

un compás y una bienvenida.


Lo que acompaña este bello hecho,

es la tristeza de las palabras,

de los acontecimientos .

Lo que me aguarda 

es un sendero que ni yo me prometo, 

y lo que me espera no es más 

que una larga vida de cadenas, 

cadenas libertarias 

hacia la paz de las palabras...

Junto con el tormento 

silabario 

de tener que observar

como se desmorona ese vicio

sin poder hacer nada. 

¿Que tanto entonces permaneces

incluso recitando viejas palabras?

De tanto en tanto.

Yo no miento,

son vehementes e inusitadas,

incluso sin fundamento,

pero son reales, 

como el brillo que roza tu cara. 

¿creerías un relato que no llega

a visualizar tu alma?

Y pacta, 

con ese corazón,

¿indomable?

¿certero? 

¿permisivo? 

Pacta. 

Y deja caer las cortinas,

y mira los dobladillos,

y observa, por favor observa,

los destellos, el éter puro, 

que se desliza con el polvo,

el polvo que roza tus ojos.

Si lo ves.

Drayos y Centenas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora