Capítulo 23:

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Al verle algo me pasó por el cuerpo,se me heló el corazón. Hacía semanas que no lo veía ni sabía nada de él y ahora por fin de nuevo lo veo,algo más cambiado, pero veía que seguía como siempre.

-Oh Paul,pasa,en la cocina está Dean

Se dieron dos besos,él y yo nos dedicamos una mirada. Justo cuando iba a cerrar la puerta alguien lo impidió. Ahora sí, era Karen. Las tres nos abrazamos y entramos dentro. Luego fuimos al salón. Las dos hablaban sobre cómo les iba la vida. Yo me quedé mirando a Paul,él hacía lo mismo conmigo. Era una mirada perdida. Lo echaba de menos,pero fue por nuestro bien lo de dejarnos. Entonces Karen me tocó el brazo y se dio cuenta de que miraba a Paul

-Estás en Babia jaja -dijo

+¿Qué decíais?

-Pues que  qué  tal tus cosas -me dijo

+Como siempre

-Al que veo muy cambiado es a Paul-mierda,ya me sacó el tema.

+No estoy  con él

Tuve que contarle la historia. Luego decidimos ir a bailar,como en los viejos tiempos. Disfrutamos mucho y la noche se iba poco a poco. Eran las 2.

-Chicas os tengo que dejar,mañana voy a llevar a mi madre a un jardín botánico

Nos despedimos de ella y se fue. Yo también me iría pronto. Le di la enhorabuena a Amanda por su piso,era realmente bonito. Me subí en el coche pero no  quería ir a casa así que di una vuelta con el coche. Decidí ir a ese lago que Paul me enseñó en su día. Y así hice.
   
Cuando llegué me senté en la orilla y mojé mis pies. De repente sonaban pasos y me asusté.

-¿Quién es?-dije. Entonces de entre la oscuridad apareció Paul.

+Perdona,no sabía que nadie viniera aquí

-Oh,yo ya me voy- recogí mis cosas pero me sujetó

+Tranquila,quédate ahí. Yo voy a bañarme.

Así hice,me senté en la orilla y observaba como se desnudaba para entrar en el agua. Tenía el torso más definido,se veia guapo con esa barba. Entonces se tiró al lago. Yo, callada, tiraba pequeños cantos al agua. Al cabo de un rato salió del agua y se puso a mi lado. Estaba nerviosa.

-Desde que lo dejamos,llevo viniendo aquí cada noche- me dijo. Preferí no hablar. Comenzó a vestirse.

-Te invito a una copa- intentó de nuevo

+Creo que es mejor que me vaya a mi casa

-No,por  favor, como amigos. Vamos a mi casa,he comprado nuevos whiskys

+Está bien.

Estaba algo incómoda pero solo me apetecía estar a su lado. Subí a mi coche y le seguí. Él entró el coche en su garage y yo lo dejé fuera. Esperé a que me abriera la puerta. La casa estaba igual que siempre. Nos dirigimos a su bar,y le pedí permiso para ir al servicio. Fui y cerré la puerta con cerrojo.

   Me apoyé en el lavabo mientras me miraba en el espejo. Estaba nerviosa,me lavé la cara y me la  sequé. Luego salí de allí y fui al bar. Me esperaba con dos copas.

El hijo de mi jefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora