Sentimientos Encontrados #FNAFHS [Bon X Bonnie]

Capítulo 25

Bon

Me pasé todo el ensayo pensando en que podía hacer para Bonnie me perdonase. Me sentía fatal por todo aquello que había dicho y necesitaba disculparme cuanto antes.

¡Seré estúpido!

Mangle, al ver lo distraído que estaba, dio por finalizado el ensayo, aunque no sin antes gritarme que debía estar atento en las prácticas.

Mientras Mangle acababa de recoger los micrófonos y los colocaba en la sala de al lado, Chic se acercó a mi.

-Vale. No te voy a decir que eres idiota porque estoy segura de que ya lo sabes, pero que sepas que igualmente lo eres. Como no salgas inmediatamente en busca de Bonnie y le pidas perdón, te juro por lo que quieras que probarás todo lo que he mejorado en karate. ¿Te ha quedado claro?

-S-si, totalmente.

Acabé de enfundar la guitarra y salí corriendo por la puerta.

¿Dónde podía haber ido Bonnie?

Decidí mirar en lugar donde solíamos ensayar. Al ser un lugar tranquilo podía haber ido allí.

Mientras corría hacia el parque pensé en todo lo que había dicho.

¡Este sitio está reservado para los Toys, no para nerds tontos como tú!'

'¡Ya déjame en paz!'

'¿Por qué iba a querer algo de un rarito como tú?'

Sabía perfectamente que le habría dolido. Había hablado justo como uno de aquellos chicos Nightmares que tanto le molestaban.

Recordé aquella promesa que me hice a mi mismo la primera vez que los vi golpeándole.

'No iba a permitir que le pusiesen la mano encima otra vez'

Aquello fue lo que me dije, pero... Esta vez era yo el que le había hecho daño.

Iba tan sumergido en mis pensamientos que no vi a aquél chico caminando.

Sentí un fuerte golpe en el trasero al caerme al suelo. Miré al chico que se agarraba fuertemente la cabeza.

-¡Lo siento! - me levanté rápidamente y lo ayudé a incorporarse.

-Ouch... ¿Tú estás bien?

-Sí. Lo siento, voy con algo de prisa...

-Ya me he dado cuenta - bromeó

Me fijé en él. Llevaba una sudadera verde oliva con lo que parecían ser unas orejas en la parte superior de la capucha.

Al mirarme pareció darse cuenta de algo.

-Ya veo. Así que eso era...

-¿Hm? Bueno, me voy, de verdad tengo prisa...

Iba a irme cuando noté su mano en mi antebrazo. Me giré sobresaltado al notar el contacto.

-No sé que le has hecho pero discúlpate con él, ¿sí? Está allí- dijo señalando con la mano un árbol cerca de unos arbustos.

-¡Gracias!

Me soltó y fui lo más rápido que pude hasta donde aquel chico había dicho. ¿Como sabía él todo aquello?

Gracias a mi extrema torpeza me volví a caer. Dos veces en menos de cinco minutos, aquello debía ser un récord.

Haciendo una mueca de dolor me puse de rodillas. En aquel momento me percaté de la persona que había a mi lado.

Bonnie estaba hecho un ovillo con la espalda apoyada en el árbol. Se podía notar claramente que había estado llorando, ya que sus mangas y ojos estaban húmedos. Sentí que se me rompía el corazón al verlo en aquel estado por mi culpa.

-¿Estás bien?

-S-si... - abrió mucho los ojos al ver que era yo.

Antes de pudiese decir nada empecé a hablar.

-¡Bonnie! - le abrazé con fuerza - L-lo siento muchísimo, m-me puse nervioso y ¡Mangle e-estaba allí... Dije un m-montón de cosas horribles pero te juro que n-no es lo que pienso. M-me arrepiento muchísimo, p-por favor, no me odies.  

La voz se me entrecortaba por culpa del llanto y montones de lágrimas se deslizaban por mis mejillas sin parar.

-Está bien, no pasa nada... 

Sin poderme creer aquellas palabras le miré a los ojos. Esos ojos que me hipnotizaban.

-¿L-lo dices enserio?

-Claro que sí. No se puede odiar a la persona que amas, ¿no?

Las lágrimas seguían cayendo desde mis ojos.

-Oh, dios. Te amo. Lo siento mucho, de verdad. No quería decir nada de lo que dije, lo prometo.

-Te creo, te creo...

-¿S-seguro que no me odias? - bajé la cabeza con temor a la respuesta.

-Claro que no, tonto. 

Noté como su mano se colocaba en mi barbilla y me obligaba a posar mis ojos sobre los suyos de nuevo.

Se inclinó ligeramente depositando un suave beso en mis labios. Un suave, dulce y torpe beso que hizo a mi corazón brincar como loco de alegría.

Cuando nos separamos me miró intensamente a los ojos.

-¿Prometes no volver a hacer algo así?

-Lo juro.

Y aquella era una promesa que no pensaba incumplir.

¡Hola a todos! Siento muchísimo no haber actualizado en tanto tiempo, pero entre que me fui de vacaciones y que he tenido que hacer muchas cosas para la vuelta al instituto se me ha hecho imposible. Infinitas gracias a todos por los muchos comentarios que me habéis dejado y daros las gracias también por esos 12.4k leídos. Sienta muy bien volver y ver eso. Como siempre no os olvidéis de hacerme saber si os ha gustado con un voto y comentando. Sé que el capítulo no ha avanzado nada con la historia, pero no tengo mucha inspiración últimamente. Por último, si queréis una historia de Foxangulo, _Srta_Cipher está escribiendo una que tiene buena pinta. ¡Hasta el siguiente capítulo!