Rescatada Por Tu Amor

Capitulo 30

Me despierto sola en mi cama anoche Aiden y yo hicimos el amor y arreglamos nuestras diferencias con respecto a la estupidez que cometí, hoy es nuestra cita para saber cómo está nuestro hijo espero que todo marche bien por una vez en mi vida...me levanto envuelta en las sábanas porque estoy desnuda y busco a Aiden por toda la vivienda pero no lo encuentro aparentemente salió de la casa tal vez estará buscando el desayuno porque aquí no tenemos provisiones,decido darme un baño y estar lista para cuando mi esposo llegue nos marchemos a la consulta con la doctora. 20 minutos más tardes estoy vestida con una falda de tubo negra en cuero con un top blanco y una cazadora de cuero negra y unos botines negros, mi pelo esta recogido en una cola de caballo decido no maquillarme porque no estoy de ánimos...
Ya ha pasado una hora y Aiden no me da señales de vida y eso me inquieta lo he llamado más de 10 veces y no me contesta y se acerca la hora de la cita,decido irme sin el no puedo perder la cita, bajo hasta la calzada para tomar un taxi porque aquí ya no tengo coche pero veo a mi esposo en el mismo coche de ayer y con el mismo chofer y se detiene delante de mi, el chofer sale y me abre la puerta trasera y yo entro mi esposo no se ve del todo bien esta un tanto ofuscado como si acabara de pelear con alguien en cuanto nos miramos se que ha pasado algo pero el cambia el suaviza el gesto y me besa en los labios,lo noto un poco raro pero decido no indagar en el asunto no me siento nada bien tengo unas náuseas asquerosas, el conductor pone el coche en marcha y hacemos todo el trayecto hacia la consulta en silencio pero no es de esos silencios que te relajan más bien es un silencio incomodo....

Media hora más tarde estamos sentados en la sala de espera del con consultorio de la doctora thomas,Aiden no me pone caso en absoluto esta como inquieto y nervioso se la ha pasado tecleando en móvil.
-oye cariño, ¿Que te pasa?. El ni se inmuta pero se que me ha escuchado así que vuelvo a insistir.
-Aiden...
-A ver cielo no me pasa nada solo estoy un poco nervioso, tengo miedo de que las cosas no estén bien con nuestro bebé. - No se porque pero no me convence su explicación puede que esté así en parte por el bebé porque yo también lo estoy pero se que me esconde algo más, somos llamados por la Secretaría de la doctora que babea a mares por mi esposo y el ni por enterado yo me abrazo a el para que esa zorra sepa que tiene dueño,entramos al despacho de la mujer y de inmediato somos inundados por fotografías de bebé y eso hace que mis nervios aumenten, somos recibidos por una señora de unos cincuenta años con pelo Cano y unos ojos azules hermosos su gesto es amable y veo que el efecto Anders no puede con ella y eso me agrada.
-Bienvenidos soy Elisabeth thomas, supongo que ustedes son los señores Anders,tomen asiento por favor.
Obedecemos a la mujer que es tan amable y Aiden me toma de la mano y se lo agradezco dándole un apretón la verdad necesito su contacto en este momento.
- A ver Aranda,tu médico de cabeza en Londres me ha enviado tu expediente médico y por lo que veo estas de unas nueve semanas y media y eso serían unos dos meses y medio, vamos a ver que tal esta esa criatura.
Soy dirigida por la doctora a una camilla donde se encuentra el monitor que mostrará a nuestro bebé, es la primera vez que Aiden y yo lo veremos porque las primeras veces no notábamos nada,Aiden se posiciona a mi lado sin soltar mi mano y la doctora hace lo propio,me pone ese gel cristalino que tanto odio por su frialdad y enciende la máquina y empieza a mover la barita que busca a mi bebé.
-Bueno como sabrán esta no es una visita normal y ustedes están aquí pasa saber cómo está el feto,pues la criatura esta bien y tiene el tamaño ideal para su edad, lo que si te voy a recomendar Aranda es que comas más y más saludable te noto muy baja de peso para cargar con este bebé, sigue tomando las pastillas prenatales y el ácido folico,esto es todo por hoy sigan cuidando a esa criatura.

***
Aiden y yo estamos en el sofá de mi casa hablando de lo felices que estamos porque nuestro bebé está bien pero somos interrumpidos por que alguien toca la puerta, Aiden se levanta del sofá y va hasta la puerta y la abre no puedo ver bien quién es porque la ancha espalda de mi marido me quita visión, pero noto que la visita no es deseada por mi esposo porque todo su cuerpo está en tensión, el de hace a un lado y deja pasar a mi padre y a mi nana,la visita de mi padre no me sorprende porque el ya me había advertido de que vendría pero se me hace extraña la presencia de mi nana aquí si hoy en la noche mi esposo y yo volaríamos a casa.
-Nana ¿que haces aquí? -me atrevo a preguntar para romper el hielo pero ella baja la cabeza y es mi padre el que responde por ella.
-Aranda,la traje yo tenemos algo que contarte. - los dos toman asiento delante de mi y mi esposo lo hace a mi lado el actúa como si supiera lo que estás dos personas van a decirme.
-y bien? -ambos saben que no me gustan los rodeos así que directo a la yugular. - mi padre se aclara la garganta y empieza hablar.
-Hija estoy aquí porque han pasado muchos sucesos terribles cerca de ti y que ya no aguantas más, se que has sufrido desde la pérdida de tu madre y eso es mi culpa y desde ahí hasta hora culpa me por todo lo malo que te ha pasado,te preguntarás a que viene esto ahora a estas altura de tu vida, pero yo ya no puedo más con este secreto y está amargura, tu nana y yo hicimos una promesa de amor a tu madre de no decirte nada nunca sobre su enfermedad, pero creo que ya es hora de que lo sepas y no lo hago para ganarme tu afecto ni para limpiar mis culpas ni para ensuciar el nombre de tu madre porque si algo tienes que tener claro es el gran amor que tu madre te tenía tu eras la luz de sus ojos.
-papa todo eso lo sé por favor dímelo que tienes que decir y ya. Mi esposo se revuelve incómodo en su asiento y me toma de la mano.
-Bien hija tienes razón, Aranda tu madre no tenia cáncer,si tenía una enfermedad terminal pero no era lo que ella te dejo escrito en esa carta que te fue entregada el día de tu matrimonio, tu mamá tenía SIDA... -¿Que? Papá eres un mentiroso como te atreves a ensuciar la memoria de mi madre estas loco o que diablos pretendes te largas de mi casa y tú nana como permites que hable así de ella,era tu mejor amiga por Dios ambos se largan de mi casa. -digo ofuscada levantándome del sofá y dirigiéndome a la puerta para que se vallan.
-niña Aranda yo se que es muy dolorosa esta confesión pero lo que dice tu papá es cierto tu madre se contagió de esa rastrera enfermedad.
-Aranda ven por favor sintate piensa en nuestro bebé dejalos que hablen pero tranquila. -dice mi esposo y me lleva con el hasta el sofá.
-Hija mía se que para ti es muy duro saber algo así y por eso es que tu madre nos hizo jurar que nunca te diríamos nada,yo me enteré del problema de tu madre dos meses antes de tu cumpleaños,ella me confesó su infidelidad con el antiguo chofer de la casa según ella se sentía sola porque yo solo le dedicaba tiempo a mi trabajo y en eso le doy toda su razón, hija quiero que sepas que tu madre me fue infiel a mi primero que yo a ella mi descontrol vino a raíz de eso yo a tu madre la amaba con el alma y el día de tu cumpleaños la discusión vino porque ella se realizó unos estudios y le daban dos meses de vida y yo no aguante mas esa situación y me volví loco de rabia y de celos ella quería dejarme y llevarte con ella y morir a tu lado por Dios eras una niña y yo no podía permitir semejante insensatez y ahí fue que cometí el peor error de mi vida y eso no me ha dejado vivir hija se que he cometido muchos errores pero cuando me enteré de tu embarazo cambio todo y está vez voy a devolverte la libertad a ser feliz que tantos años te he negado....