Mi gran secreto-Harry Styles y tu-Editando.

-El secreto de Harry-

                                                      Capitulo 21

Maratòn 2/?

"Vete a la mierda, Styles".-Contesté, mientras las lagrimas comenzaban a caer por mis mejillas. Alguien me abrazó por detrás, pero en este momento lo que menos me importaba era saber quién era, solo necesitaba un abrazo. Sentí como sacaba sus brazos lentamente, me giré y me encontré con Harry.

-¿Estás bien pequeña?.-Preguntó él, posando su mano en mi mejilla.

-Si.-Contesté seca mientras alejaba su mano de mi mejilla.

-No te enojes amor...-Lo interrumpí.

-¿Qué no me enoje? Hace unas horas me dijiste que terminarías con ella y ahora... ¡Se están besando y diciendo cosas lindas!.-Exclamé, enfurecida.-¿Me estas tomando por idiota? ¿Te gusta jugar conmigo?.-Pregunté, él frunció su ceño. Parecía hasta casi ofendido por lo que le estaba diciendo pero solo era la verdad. No era mas que la estúpida con la cual se divertía jugando.

-No estoy jugando contigo, es por lo que te dije...-Lo interrumpí.

-¿¡Por el estúpido secreto!?.-Pregunté, irritada. Él asintió.-¿Por qué no me lo quieres decir?.-Dije, mirándolo seria.

-Porque... no puedo decírtelo.-Respondió él, bufé. Me importaba una mierda si no podía, se suponía que tendría que confiar en mí. ¡Maldición!

-Bueno, quédate con Ashley y hazme el favor de no molestarme más, ni de jugar conmigo.-Comencé a caminar pero él me detuvo.

-Amor...-Lo interrumpí.

-No me digas así.-Dije casi en un susurro, intentando no elevar la voz y comenzar a gritarle como lo merecía. No quería hacer una escena con todos mis amigos allí dentro y mucho menos frente a Ashley. Esa arpía estaba consiguiendo lo que estuvo buscando en todo este tiempo.

-Pero yo te amo.-Comentó él.

-¿Cuántas veces me lo has dicho, Harry?.-Pregunté.-Millones, pero así como lo dices se lo lleva el viento y terminas con Ashley-Gruñí, molesta-No te quiero cerca de mí, si quieres puedes ir a buscar a Sharon, pero a mi si es posible no me dirijas la palabra.-Fruncí mi ceño y comencé a caminar.

-¿Quieres que te lleve?.-Preguntó, haciendo que parara.

-Prefiero irme con un asesino serial antes que contigo ¿Eso te dice algo?.-Respondí para luego entrar nuevamente a la casa y dirigirme hacia el comedor. La mirada de todos se posaron sobre mi cuando ingresé al lugar e intenté poner mi mejor sonrisa mientras me acercaba a la mesa. Bien, todo esto estaba siendo demasiado incomodo.

-¿Estás bien?.-Preguntó Louis, entre frunciendo su ceño.

-Si.-Sonreí y me senté en mi asiento.

-¿Dónde está mi novio?.-Preguntó Ashley, tratando de hacerme enojar.-Nicky, ¿No has...-La interrumpí.

-¿¡Por  qué mierda tendría que haberlo visto!?.-Exclame, enfurecida. Sonrió triunfante, había conseguido lo que quería, hacerme enojar. Era una maldita zorra y yo quería controlarme lo mas que pudiera para no abalanzarme hacia ella y golpearla. 

-Tranquila pequeña.-Dijo Liam, mientras se paraba y caminaba hasta donde me encontraba.

-¡No me quedo tranquila, ha estado queriendo molestarme desde que entré aquí!.-Exclamé, mirando enfurecida a la rubia.

-Tranquila, te llevaré a casa.-Comentó Liam, mientras pasaba un brazo sobre mis hombros y con su mano acariciaba mi brazo.  No podía tranquilizarme, había llegado al punto limite donde solo quería golpear a la novia de Harry hasta cansarme.