Capitulo 2

486 50 24
                                    



--G...Golden... ¿Qué haces aquí?...no deberías estar...Tranquilo Freddy... ¿no es acaso Golden tu amigo?—me sorprendí de su cambio repentino de actitud, ¿Por qué se cuestionaba a él mismo?—Tú...calla, ¡No tienes control sobre mí!

--¿Freddy...? ¿Qué pasa? Me estas asustando...--trate de acercarme a él pero me dedico una mirada de desprecio.

--No me toques, ¡Nadie te pidió tu ayuda! —espetó, pero en vez de sentirme ofendido, me dio la sensación de que quería protegerme—Vamos Freddy... ¿Por qué no dejas que vea...lo que realmente eres?...no, no, ¡Yo no soy tú!

--Freddy...--trate de tocarle el hombro, pero me empujó hacia atrás.

--¡Largo! Vete de aquí...--me dijo sin siquiera mirarme—No quiero...lastimar...a nadie más—dijo con un tono de voz frágil.

¿Qué estaba pasando?, ¿De qué estaba hablando?... ¿Que se suponía que debía hacer yo?...

--Freddy...deja...deja que él sepa, lo que eres en realidad... ¿o acaso...tienes miedo...de que él también te odie?—soltó una risa tétrica--¡Basta!—tomó el vaso que estaba en la mesita de alado, lo apretó tan fuerte que lo rompió.

--¡Estoy harto!...voy...a acabar con los dos...--apunto un pedazo de vidrio hacia su estómago. Estaba en estado de shock, no sabía qué hacer, y sin darme cuenta, mi mano ya estaba sosteniendo la suya. Forcejeo un tanto intentando hacer que su mano avanzara, pero no lo deje. Finalmente soltó el vidrio, y cayo de rodillas al suelo.

Comenzó a llorar, no se me ocurría que hacer, aun no estaba del todo consiente, ni si quera sé cómo es que logre detener su mano. Solo quería entender...qué demonios estaba pasando. Pero aunque no entendía nada, me puse de rodillas frente a él.

--F...Freddy...--podía sentir el nudo en mi garganta.

-- ¿Por qué...?... ¿Por qué me detuviste?—dijo mientras lloraba. ¿Cómo se supone que respondes a eso?

--Yo...solo...actué por instinto...--Mierda, estaba diciendo idioteces. Tenía que concentrarme en lo que salía de mi boca—Freddy...no podía dejar que lo hicieras.

--¡Solo quiero desaparecer!—dijo entre sus ahogados gritos que trataba de contener. Hizo una mueca de dolor y se tocó la cabeza—Jamás...te vas a librar de mi...Freddy. No, ya basta...--se tocó de nuevo la cabeza, parecía desesperado, pero yo no entendía nada. Solo sabía...que tenía que ayudarlo de cualquier manera.

--Freddy...tranquilízate—se desesperó aún más, me dio un terror horrible de que intentara tomar un vidrio de nuevo así que lo tomé de ambos brazos y los hice hacia arriba—Freddy...

--Déjame en paz... no lo entiendes...tengo...

--Freddy mírame—seguía forcejeando tratando de que lo soltará, pero no pretendía hacerlo—Mírame Freddy.

--¡No!...yo...no quiero...vivir más...así—se calmó un poco, pero aún estaba intentando que lo soltará. Cuando lo escuche decir que no quería vivir más sentí un hueco en el estómago, sentí el peor miedo que jamás había sentido en mi vida. Lo peor es que no sabía nada, mi maldita mente estaba en blanco, solo podía retener sus manos, intentando que no cometiera una locura.

--Freddy mírame...--no se me ocurría otra cosa—Por favor...Freddy mírame—Finalmente me miro, su cara estaba llena de lágrimas, tenía una mueca de sufrimiento que jamás había visto en mi vida, estábamos tan cerca que podía escuchar su agitada respiración. ¿Y ahora qué?, me dije, ¿Qué hago?

Pensamientos distintosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora