Suspiré una vez antes de entrar a la sala y ver la batería en el fondo. Abrí la puerta de la sala de instrumentos y al ver a Ashton sentado al lado de su batería solo hizo que mi estómago se revolviese.
En cuanto me vio se levantó y me sonrió.
–¿estás lista?–me preguntó
No, no estoy lista, estoy hecha un manojo de nervios. Hace aproximadamente, las cosas entre Ashton y yo fueron cambiando conforme nos fuimos conociendo, y siendo sincera, nuestra relación es un tanto rara, ya que somos amigos pero nos tratamos como si fuéramos pareja y tenemos peleas como lo hacen las parejas, y es realmente extraño para mí. Y ahora estoy aquí, con Ashton, que me quiere dar clases de batería por que, según el, debería aprender.
Más no dije nada y asentí, con los nervios a flor de piel. Él me sonrió mostrando unos adorables hoyuelos y me señaló la silla detrás de la batería para sentarme.
Con pasos algo torpes y nerviosos me senté y tomé las baquetas que él me daba.
Al sentir sus dedos rozar los míos sentí como cada pelo de mi cuerpo se erizaba, torpemente me acomodé y puse mis manos encima de los tambores esperando las indicaciones de Ashton.
–bueno, primero empezaremos con los básico, golpea con la baqueta ahí–dijo señalándome el tambor frente mío–y con la izquierda le das a este–señaló el tambor de mi izquierda.
Asentí un tanto insegura e hice lo que me pidió.
–muy bien, ahora intenta dar dos golpes en cada tambor y al final dar un golpe con el pedal de tu pie derecho
Fruncí mi ceño y suspiré por segunda vez, golpee los tambores y el me sonrió.
–lo estás haciendo muy bien, ahora, lo haremos un poco más complicado. Intenta golpear con tu mano izquierda el tambor de tu derecha y con la derecha el tambor de enfrente mientras das unos golpes con el pedal
Intenté hacerlo pero no pude, mis brazos no podía coordinarlos al mismo tiempo que mi pie.
–no-no puedo hacerlo, Ashton. Soy pésima en esto...–me quejé lanzando un gruñido de frustración.
–pero si lo estabas haciendo muy bien...esta bien, te ayudaré
Me pidió que me levantara y él se sentó, luego palmeo sus piernas y me le quedé mirando unos segundos con el ceño ligeramente fruncido, cuando movió su cabeza hacia un lado confundido ante mi mueca reaccione y me senté en sus piernas. El tomó mis manos entre las suyas tomando las baquetas y me ayudó a tocar.
–mira, primero das dos golpes en este tambor–comenzó a mover sus manos contra las mías, y sentí como una chispa de electricidad mandaba mi cuerpo haciendo que un escalofrío me cubriera entera–luego, das un golpe rápidamente cuando terminas de dar los dos golpes–movió mi mano derecha y dio el golpe–después con tu pie pisas el pedal–pide el pedal y asentí. –creo que ya estás aprendiendo, una vez más
Sus manos se volvieron a mover y poco a poco comenzaba a entender y a cordinar mis manos y mis pies.
–ahora, trata de hacerlo tú sola–asentí y sus manos dejaron las mías hasta dirigirse a mi cintura.
Lentamente comencé a tocar la batería con miedo a equivocarme hasta que sentí como sus labios se pegaban a mi cuello.
–bien, ahora toca algo. Lo que sea–asentí, y por última vez suspiré. Di dos golpes al tambor de mi derecha con mi mano izquierda y con mi mano derecha di un golpe en el del medio, luego mientras tocaba pisaba el pedal. Hasta yo misma me sorprendí con la rapidez que mi cerebro pudo coordinar bien cada movimiento sin equivocarme.
–lo estás haciendo muy bien–susurró en mi cuello mientras seguía tocando. Su aliento me causaba cosquillas, y sus labios me erizaban la piel.
Comenzó a repartir besos desde el hueco de mi cuello hasta mi hombro, al mismo tiempo que mordía ligeramente mi piel. Mi cuerpo lentamente comenzó a sentirse caliente con cada mordida y beso que dejaba. Sus labios fueron subiendo hasta el lóbulo de mi oreja, un escalofrío. Después dejó de besarme y deje las baquetas en el aro de la batería. Me voltee de manera que mis piernas quedaron sobre las suyas mientras me sentaba en una de ellas. Pase mis brazos por sobre su cuello y lo miré con el ceño entre fruncido.
El sonrió con inocencia y enarqué una ceja.
–¿que?
–¡Ashton! Estoy tratando de aprender a tocar la batería y tú me distraes...
¡Genial! Ahora cree que soy una tonta y que me distraigo fácilmente
–así que te distraigo–dijo, con picardía mientras me miraba con una sonrisa burlona. Yo lo miré con el ceño medio fruncido y el rió.
–si, y realmente quiero concentrarme, así que por favor te pid...
Las palabras quedaron al aire al mismo tiempo que sentía sus labios moverse con los míos. Me quedé estática, jamás había pasado algo como esto, y realmente no sé cómo reaccionar.
¿Que debo hacer? Seguirle, separarlo, detenerlo..¿que?
Opté por la opción más convincente, le seguí y el sonrió cuando sintió mis labios moverse.
Me apretó más contra si y siguió sin separase.
–Ashton–dije con dificultad ya que seguía besándome.
–mmhn–murmuró, roncamente.
–¿seguiremos con las clases o...?–pregunté, el se separó y me miró con una sonrisa. Asintió y tomó entre sus manos las mías, agarrando las baquetas y tocando algo.
