Karma #2

Capítulo 17: Entrevista

Estaba sentada en una esquina de la cama con la cabeza apoyada en mis manos. Él veía a la ventana, algo fuera de la realidad.

Había silencio, nadie decía nada, los dos estábamos tan confundidos y con dolor de cabeza; con costos podíamos respirar.

-Eres mi amigo, mejor amigo.- solté.

-No estamos seguros si tuvimos...ahg...no puedo ni decirlo.- golpeó su cabeza y se arrepintió, ya que luego la sostuvo.

-¡¿No estamos seguros!?- lo señalé, ya que estaba solo con una sabana encima de él. -¡Es obvio! ¡Y asqueroso!

-Tampoco es que nunca te vi desnuda.

-Pero no metiste nada en mi. - rodé los ojos. -¿Sabes que me haría Emily?

-¿Sabes que ya no somos nada, ni lo seremos? Además, fue solo una borrachera y no recordamos nada, no vale.- dijo firme. -Sólo haremos que nada paso.- sacudió sus manos.

-¿Y entonces todo queda en duda y ya?- alcé una ceja.

-Ni duda, porque no pasó.- sacudió su dedo índice. -Entiende Adriana, nada paso, solo viniste a quedarte al departamento y ya.

-Esto es incómodo.

-Y la de la idea de tomar fuiste tu. -me señaló. -Así que eres mas culpable que yo.- intentó quitarse.

-Aunque tal vez, mi "yo" borracha lo agradezca, porque lleva más de cinco años sin acción. -reí.

-Tal vez mi "yo" borracho, también. -movió sus hombros.

-Bueno.- suspire. -Entonces, no pasó nada.

-Exacto. -alzó su pulgar. -Me iré a bañar tranquilo, porque nada pasó. - se levantó y dejó caer la sábana, que hizo que viera todo su trasero.

-¡Ted!- grite. Él se dio media vuelta.

-¿A poco no te gusta la vista? -se burló.

-Ponte algo o entra rápido al baño.

-¿Sabes que nunca hubo nada entre nosotros?

-Sí. - trate de ver a otro lado, para evitar mirar su amigo.

-Sonará estúpido, porque tal vez aurrine las cosas.- lo miré a los ojos algo confundida. -¿Y si lo tratamos sobrios?

-¿Tratar qué?- intenté pensar que no era lo que yo creía.

Había vuelto al departamento más tarde de lo usual, la mayoría de veces, cuando salgo, vuelvo en la mañana. Eran las 3:09 pm y yo estaba entrando al departamento, con una Emily preocupada y un Max coloreando relajado sin saber porque su madre estaba así.

-Mami paso maldiciendo.- dijo Max cuando me senté frente a él en el comedor, donde coloreaba dibujos de Nemo.

-Max.- soltó Emily en un pequeño regaño, él agarró sus cosas y se fue a su habitación.

No dije nada y espere que dijera todas las cosas de siempre, como si fuera mi madre.

-Adriana, necesito que madurez, si quieres que mantengamos este lugar.

-¿De que hablas?- me sentí confundida, ya que solo llegue más tarde de lo usual, a cuidar a Max en lo que Emily iba a trabajar.

-Necesitas un empleo, hacer valer algo tu título.- dejó de hacer lo que sea que hacía, y me miró- ¿Cuando pretendes tambien pagar la renta? La mitad, es a lo que me refiero. También, comprar comida decente y poder mantener una buena vida sin alguien, es decir, que yo este pagando todo y comprando todo.