Devuelve

capítulo 5

Sans estaba que moría de la preocupación.

Esa mañana todo era normal, por decirlo de una forma en sentido normal. Papyrus levantándose por sus locos sueños y Sans amaneciendo con una gran sonrisa mientras leía los mensajes que su novio le mandaba cada mañana. Era un lindo día como ya había dicho pero ese día fue diferente.

Papyrus estaba demasiado cansado esta vez, apenas podía mantenerse atento a lo que pasaba a su alrededor. No quería ir a entrenar hoy pero tenia que hacerlo o sino Undyne lo mataría.

—jefe, no creo que sea razonable que vaya en ese estado, apenas te puedes mantener en pie... —Sans, aun que le costara admitir, se preocupaba por su hermano cuando lo veía así.

—no me molestes Sans, come algo que se me hace tarde. La comida esta en la nevera, sólo usa esa cosa cuadrada que calienta y pon tus zapatos a cocinar... nos vemos en la mañana... —y se fue diciendo cosas sin sentido.

—sera mejor que lo siga. Puede que le pase algo al muy idiota...

Sans tomo algo de comida y corrió para alcanzar a su hermano. Éste llego con Undyne y comenzaron con su entrenamiento. Al principio todo iba bien pero no sabia lo que estaba haciendo por lo que en un golpe, termina perforando la casa de la chica pez.

—¡¿idiota que te sucede?! —Undyne lo miro algo preocupada, jamás su segundo líder había hecho una falta de respeto a su vivienda de esa forma, sólo cuando cocinan y eso porque ella lo provoca.

—¿que?... lo siento Undyne, pero no es mi día...

—¿que sucede huesos? ¿Tu hermano no deja que descanses?

Papyrus parpadeo varias veces y nego con su cabeza. Sans no era el culpable de sus pesadillas. De hecho. Solo con el podía dormir.

—¿entonces? —relajo su postura y camino con una mirada seria.

—nada importante... cosas mías.

—bien. Aun así quiero que me digas que es lo que te pasa...

Undyne podrá ser la líder de la guardia real. Aun así ella era calmada y seria, lo cual la volvía tan temible que podría matar a cualquiera con solo verte. Jamás pierde los estribos en sus peleas porque sabe que eso sólo la mataría.

—si quieres superarme. Tendrás que ganarme en pelea cuerpo a cuerpo... —La chica pez le lanzo una espada y cuando el esqueleto la atrapo ella también tenia una— ¿listo mi segundo líder?

—¡si!

La pelea entre ellos iba muy bien, lo cual hacia que Undyne se sintiera orgullosa de su amigo. Estaba incluso a punto de ganarle pero en un momento a otro este comenzaba a tambalearse.

Creyó que era para distraerla y siguió atacándolo pero cuando logro herirlo se dio cuenta de su error.

—¡¡Hermano!!

Unos huesos aparecieron de la nada alejando a Undyne de Papyrus que tenia la espada de Undyne clavada en el pecho.

Sans llego tarde, de distrajo un rato grabando mensajes cursis para Grillby y cuando escucho el sonido del metal golpear comprendió que debía apurarse. Tenia un muy mal presentimiento y no le gustaba para nada.

Ahora Sans tenia en sus brazos a su hermano que apenas podía hablar, Undyne llamo rápido a Alphys y trato de llevarse a Papyrus de ahí.

—¡NO! ¡No dejare que te lleves a mi hermano de mi lado!