Esta etapa de mi vida se llama resilencia, tengo que superar este maldito sentimiento, superarlo o enfrentarlo, una de dos, la amo, y ya lo he aceptado, ahora viene lo demás, es como ella lo dijo:
LA MEJOR MANERA DE SUPERAR UN SENTIMIENTO ES ENFRENTÁNDOLO.
NO MEJORES POR OTRA PERSONA, MEJOR POR TI MISMO, PARA SER UNA BUENA PERSONA.
Tenía razón, mucha razón.
Terminé de escribir la carta para Estefany, la guardé en un libro y me miré al espejo mis ojos estaban completamente rojos, mi polo estaba casi completamente empapado, mi alma estaba rota, seguía llorando sin cesar, me di pena yo mismo, es una sensación horrible, no se la deseo a nadie, el avergonzarte de ti, es lo peor que puedes hacer.
Declamo un poema corto, un poema mío.
Miro al cielo y busco los astros, uno que me mire directamente y me consuele, pero no los encuentro y siento frío, por eso tengo a la poesía como abrigo, soy consciente que aún no encuentro mi destino.
Debe ser por mi corta edad, o tal vez porque simplemente llega el final,
y me tengo que reencontrar con aquella poesía que deje a medio escribir, con aquella persona cuya vida interrumpí.Intento devolverte tu tiempo, intento olvidar los recuerdos y me frusto por que no puedo, y es que eres realmente bella, no solo por dentro, si no también por fuera, no pregunten quién, es obvio que me refiero a ella.
Solo pienso en ti y en lo feliz que en algún momento me hiciste sentir, debo los ojos abrir y dejarte de insistir, pero creo que antes dejaría de escribir, porque tú eres mi inspiración, ya es oficial, tienes la dedicatoria de esta composición.
Señores, con esto último me declaro culpable puesto que me siento responsable de buscar y esperar amor donde solo hay una hermosa complicidad, complicidad que se reduce a una simple amistad.
Termino la poesía, mis ojos están ya más que cristalizados, me saco el polo, dirijo mi vista hacia mi vientre plano, veo los abdominales, se observan seis bien marcados, giro y contemplo mis costillas.
¿Cuanto sufrí para tener este cuerpo? Cuerpo del que por cierto me avergüenzo.
Soy masoquista Estefany, sigo escribiendo para ti.
No hay final sin un comienzo, me pongo tenso, el cariño que siento es inmenso, veo el camino y realmente es muy extenso, no puedo olvidar los momentos, los tengo dentro, justo donde están los sentimientos, olvidarte no puedo, el tiempo no me ayudará a hacerlo.
Agarro mi celular, le timbro a Almeyda, él contesta.
Trato de fingir la voz, lo consigo, o eso creo.
~ ¿Hola?.
~ Hola Ricardo, soy Lauren.
~ Ah, Lauren, ¿Qué pasó? ¿Por qué llamas a estas horas?
~ Estoy un poco enfermo, mañana no podré ir, lo siento.
~ ¡Bah! No te preocupes, la salud es lo primero, tomate el día libre si deseas, no hay problema.
~ Gracias - lo dije casi para mí, como un simple susurro.Colgué el teléfono y lo tiré a la cama, acto seguido, me tiré yo.
Cerré mis ojos, pensé en Estefany y en todo lo que pasamos, luego comencé a meditar, cambié de posición, me puse boca arriba, mirando al infinito, y la recuerdo a ella, recuerdo a Flor, a mi mejor amiga, a la chica a la que enamoré, a la chica que destruí, a la chica a la que le debo todo.
Ag, fui un ingrato, un mal agradecido, cogí de nuevo el teléfono y la llamé.
"Ti-ti".
Ese ruido me volvía loco, ¡Joder!
No contestó mi llamada.
Suspiré y decidí volver a llamar.
Era la tercera timbrada y escucho su voz.
~ ¿Hola?
Me quedé helado y no pude pronunciar palabra alguna.
Ella insiste...~ ¿Sí? ¿Hay alguien?
~ Ah, Hola...Respondió de inmediato.
~ ¡Lauren!
~ Soy yo... Hola Flor.
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Paralelos
RandomLauren es un chico golpeado por el destino, pero no tanto como Estefany, una joven que con solo 19 años sabe ya lo que es frustración, resentimiento y odio. Ellos tienen tres cosas en común: El cariño que se tienen, el odio a una persona en especial...