Paralelos

Capítulo 22: "Una poesía."

Comienzo a hablar solo.

ESTACIÓN DE DESAMOR.

Carta en su honor - Lauren.

Poema: "Sin título."

Pasan casualmente nuestros momentos por mi mente, siento frío, miro al cielo: Llueve, eso me conmueve, veo las gotas de lluvia caer lentamente mientras lloro de repente.

Cojo una hoja y escribo una nota: ¨Me alejo solo porque soy un completo idiota, estoy herido, pero no vencido", luego introduzco mis dedos en los bolsillos, abro la caja y saco algunos cigarrillos, dejo atrás la cobardía y me propongo escribir la mejor de mis poesías plasmando en cada estrofa mi melancolía, agarro el lápiz y vuelvo a escribir: "Me declaro culpable, puesto que soy responsable de buscar y esperar amor donde solo hay amistad condicionada con cariño incondicional¨, no engañaré más a mi mente diciendo que ella estar conmigo quiere.

Mañana, cuando la vea, procuraré que sea como la vez primera, dos veces traté de olvidarla, esta ya es la tercera, este puede ser el final de una historia, una historia que por su parte tal vez ni comenzó, que nos vaya bien es lo que espero, juro en nombre de Dios que es mi mayor deseo, escribo de nuevo: "Aunque ella por mí nada sienta, pido de rodillas a mi señor que a mi lado permanezca y que para la próxima ocasión tenga en cuenta el dolor y el profundo hueco de mi corazón¨.

¿Saben por qué la amo? La amo porque cuando ella apareció a mi vida le otorgó color, es cierto que ahora su nombre significa resentimiento y dolor, pero no puedo olvidar que también fue pasión, que convirtió la amistad en amor, que a la muerte la cambió por vida, que de la nada se volvió todo, todo lo que yo quería, era tanto lo que sentía, y ahora me reclamo el por qué no lo decía, yo llegaré lejos, pero aún siendo feliz, siempre estaré pendiente de ti.

Las lágrimas empiezan por mi rostro a descender y es por el tan triste cambio de atardecer a anochecer o tal vez por que probablemente esta sea mi primera y última poesía, dejo claro que solo escribo por el amor y la tranquilidad que el aura de ella me transmitía, quiero acercarme y preguntarle: ¿Me extrañas? ¿Haz olvidado nuestras madrugadas?

Escucha mis últimas palabras querida: No siempre las despedidas son para toda la vida, pero por lo pronto me alejaré, a menos hasta que las heridas cierren, a menos hasta que las lágrimas cesen, a menos hasta que el destino me premie y alguien me consuele, cuando acabe de redactar me voy a poner a pensar y seguramente que me voy a preguntar: "¿Por qué esto está terminando? Si yo aún te sigo amando", me voy a reclamar el cómo te empecé a querer sin querer, me voy a poner las penas a olvidar, pero como quizá no lo vaya a lograr, simplemente me voy a ahogar en cigarros y tragos baratos y amargos, después de todo, no hay mal que mil años exista, ni poeta que la resista, ¿Verdad?

A los que me quieren les prometo siempre mantener los pies en la tierra, aunque advierto que seré feliz a mi manera y que siempre tendré en alto la cabeza para nunca dejar de mirar las nubes, contemplandolas seguro me preguntaré: "¿Por qué?", ¿Por qué creí en el amor? Si el mismo Shakespeare dijo que el amor no existía, él aceptó que solo era fantasía y que poco a poco nos carcomería, y sí, lo acepto, el alejarse es la acción más cobarde, pero, ¿Qué se puede hacer cuando se acaba el aguante?, inconscientemente terminé escribiendo: "Perdón si a alguien ofendo, pero el amor te termina destruyendo, tanto por fuera como por dentro", y es que el amor les dió a unos tanto, y a otros, como yo, tan poco.

Se acabó, final, final, es el último capítulo, eres la protagonista, entonces se tú quién ponga el título, esta historia es más sagrada que los mismísimos versículos, no olvidaré jamás que mi madre me dijo: "Hijo tranquilo, que las cosas buenas llegan siempre después de la tormenta", la sonrisa en algún momento volverá y obviamente el dolor cesará, mis pupilas con el solo hecho de verla se deleitan, luego se dilatan y delatan lo que le pedí a Dios como último favor: "Aunque me vaya, no la quites de mi alma, ni de mi mente y menos de mi corazón."

Me doy cuenta que ya no estoy en el hospital, sino en el techo en el último piso, ciertamente esta lloviendo, solo atino a reírme, es impresionante que me salió una poesía de la nada, es impresionante como ella me inspira, es impresionante que no me di cuenta lo mucho que caminé, es impresionante que no me importe quienes me vieron, es impresionante lo que hago por ella.