Looking For Him. | L.S

Diecisiete.

Ya era viernes, eso significaba que era el último día que Harry tenía como excusa para visitar a Louis. La siguiente semana serían los exámenes finales para lo cuales habían estudiado tanto.

Se sentía un poco triste, primero, porque ya no podía ir a la casa de Louis con tanta frecuencia como lo hizo esa semana. Segundo, porque la semana había terminado y no pudo haberle confesado sus sentimientos a Louis.

Demonios, si no le confesaba lo que sentía para hoy por la noche, habrá perdido la apuesta que hizo con Niall.
Sí. Sonaba totalmente estupido, pero, como siempre, el ego de Harry era muy superior como para rechazar cualquier tipo de trato que lo subestimara.

"– ¡No me jodas con que eres marica, Harry!– Gritó Niall. Harry sintió su rostro arder con intensidad y rápidamente le arrebató su teléfono de las manos.

– No me jodas, Niall.– Dijo e intentó irse, pero el rubio se interpuso en su camino y lo tomó de los hombros. Eran los únicos en el vestidor de hombres, y se estaban alistando para ya irse.

– ¿Por qué mierdas tienes una jodida foto de Louis Tomlinson como fondo de pantalla?

Harry tragó duro. Demonios, lo habían atrapado. Sabía que era muy obvio poner tal foto en su celular. ¡Pero es que era imposible no ponerla! Era Louis, con el cabello completamente despeinado, usando una camiseta negra, y levantando el dedo de en medio, y con la cara enojada. Recordó aquel día, Louis estaba jodidamente molesto, solo porque Harry había destruido su maqueta de ciencias que había tardado dos semanas en hacer. El ojiverde no le tomó mucha importancia, pensó que solo era un simple modelo escala de un agujero negro. Pero para Louis, era el universo entero, ¡Qué exagerado! En fin, se veía tan adorable con sus mejillas rojas de la ira y los músculos de sus brazos contraídos del estrés.

Era secreto que tenía esa foto en su celular, hasta ese día, que el entrometido de Niall decidió tomar su teléfono para "ver la hora". Maldito.

– ¡Harry!

– ¡Joder, Niall! ¡Sí!– Harry se rindió– Soy gay.

– ¡Lo sabía! ¡Lo sabía!– Niall levantó sus brazos en gesto de victoria.

– ¿Qué mierd...– Dijo Harry con una mueca de confusión.

– Oh, Harry, deberías aprender a actuar un poco más. Se te nota bastante lo marica.

– Claro que no, Niall. Nadie lo ha notado. Solo tú.– Trató de defenderse. Tomó su mochila y empezó a caminar hacia la puerta.

– Yo soy más inteligente que los demás, ¿no crees?

– Jodete.– Dijo y salió del vestidor, ignorando al rubio. Pero luego sintió unos pasos seguirlo.

– No se lo has dicho, ¿cierto?

– No.

– No me sorprende– Se burló Niall– Eres un gallina.

Harry lo miró ofendido– ¡No lo soy! Se lo diré algún día. Además, tengo que estar seguro de que sea gay también.

– Yo creo que también lo es.– Dijo Niall con una amo en su barbilla, pensativo.

– No, no creo. Le gustan las mujeres, créeme.– Harry dijo con nostalgia.

– Nunca lo sabrás, Harry.– Niall dice con misterio. Harry lo mira con gracia– Digo, si nunca le presentas la oportunidad.

– ¿De qué hablas?– Harry empezó a caminar más lento, con toda su atención en el rubio.

– Yo digo que deberías decírselo. Luego, él decidirá. Pero yo no creo que sea cien por ciento hetero, ¿sabes?– Dice Niall intentando animar a Harry, pues notó su tristeza al hablar de Louis.

– Olvídalo, Niall.

– Bien, lo sabía, eres un gallina.– Niall dijo y empezó a caminar más rápido, alejándose de Harry.
Esta vez fue el rizado quien apuro sus pasos para alcanzar al otro.

– ¡Espera! ¡Yo podría hacerlo!– Dijo con aires de superioridad.

– Pruébalo.– Dijo Niall cruzándose de brazos.

– Lo haré, algún día.

– Apuesto a que no podrás hacerlo hasta dentro de unos sesenta años cuando estés apunto de morir y tus nietos te pidan tus últimas palabras. Luego, sabrás que fuiste un imbecil por no haber confesado tu amor hacia la persona que siempre amaste y lo dirás en silencio, esperando una muérete solitaria y dolorosa.

Harry hizo una mueca de horror.
– C-Claro que no.– Dijo, tragando duro, pues la imagen de tal escena lo perturbó– Puedo hacerlo para esta semana– Dijo un poco inseguro.

– Trato. Si no lo haces, me dejaras ser el capitán del equipo.

– ¿Qué? ¡No!

– ¿Tienes miedo de perder, Styles?

Harry frunció el ceño y sintió sus manos sudar– No. Acepto.– Estiró su brazo y ofreció su mano.

Niall la aceptó sin dudarlo, pero la soltó rápidamente.– Que asco, estás sudando."