Leo entre lineas

Apuesta

- Acepto - dijo ella con una sonrisa maliciosa, yo sonreí de igual forma.
Adoro cuando Kira esta de mi lado, ahora podre hacer realidad uno de mis muchos sueños (la mayoría inapropiados) y el no se acordara de nada.
- Esto es perfecto - pensé al momento de volver a la cama y quedarme dormido.
Toda la noche me la pase imaginando sobre mi encuentro con el, como sera someterlo y tenerlo gimiendo debajo de mi. Claro, sin quitar el hecho de que lo compartiré.

<<Tengo todo listo>>

Oh, mi amado Tiger Claw, no tienes idea de lo que te espera pero no importa, yo y Kira nos aseguraremos de que lo disfrutes. Al día siguiente, me desperté con una gran sonrisa pero supe disimularla, como siempre.
- No creas que ganaras, Bobonardo. Le ganare a Tiger Claw - dijo Rapha con un tono de superioridad.
- Claro, con todo esto de la fantasía olvide la apuesta - pensé para ver a Rapha con una sonrisa burlona - Eso quiero verlo.

<<Grabare tu fracaso, Raphael>>

Camine con tranquilidad hacia la salida acompañado de mis hermanos, saltamos por los tejados hasta que vimos a los del pie.
- ¡No intentes detenerme! - dijo Rapha yendo directo contra Tiger Claw.
- ¡No lo iba a hacer tampoco! - dije sabiendo que el ya no me escuchaba.
Tuve que ver como mi hermano peleaba contra mi amor platónico, que tortura. Sin embargo, me vino a la mente mi plan con Kira y se me paso.
- ¡Leo, Rapha tiene problemas! - dijo Donnie señalando a Rapha tirado en el suelo.
- ¡Voy por el! - dije yendo a mi encuentro.
Lo sabia, Rapha puede ser fuerte pero no es rival para Tiger Claw. Un golpe en el pecho fue suficiente para desestabilizar a Tiger Claw y rescatar a mi hermano. Anuncie la retirada y aquí estoy, curando las heridas de Rapha en el laboratorio.
- Te dije que era mala idea - dije pasando alcohol en una herida.
- No me digas que hacer - se quejo Rapha.
Termine con mi labor y me encerré en mi cuarto, esperando la hora de actuar. Mi amado, esta noche sera inolvidable... al menos para mi. No tienes idea de lo que te espera... pero pronto lo sabrás.
Continuara...