Los Niñeros [EDITANDO]

Introducción

Me llamo _______, nací y crecí en una familia rica y poderosa junto con mi hermano con quien comparto la mayor parte del tiempo; tengo dieciséis años y dentro de poco cumpliré los diecisiete, estudio en una de las mejores escuelas en la cual intento pasar desapercibida entre las chicas y los chicos, mi vida es genial, no?

Pues la realidad es esta.

No me gusta mucho mi forma de vivir.

...

...

...

— ¡Oh cariño! ¡¡¡Estás aquí!!!

— ¡M-Mamá! — grité del susto.

— ¡Vamos, ponte este traje! ¡Llegaremos tarde a la fiesta de cumpleaños de tu primo! — dijo mientras me arrojaba la ropa en el rostro. —- ¡Rápido! ¡Solo tenemos cuatro horas y tu hermana aún no se ha vestido! Todavía tengo que hacer que la maquillen y la arreglen muy bien

— Pero mamá-

— Quiero saber cómo le va a quedar el vestido, ¡Tiene que verse presentable!

— Mamá, escucha-

— Sin mencionar sus accesorios y... ¡¿Aún no te has vestido?! Vamos cariño, que no ves que el tiempo es corto y-

— ¡¡MAMÁ, SOY _______!!— grité molesta al ver que mi mamá no me dejaba hablar. — ¡Mi hermano todavía sigue en el baño!

— ... Pero... ¡¿Y tu cabello?!

— Ah, ¿Esto? Es una peluca— dije mientras tocaba los flequillos de la peluca. — Mahiri me pidió que me lo ponga para saber que tal me queda y pues, iba hacer un videochat para enseñárselo

— Ah... Una peluca... — parecía que su alma había vuelto a su cuerpo.

Es cierto que ella adoraba mi cabello aunque a mí igual me gustaba, de hecho, era lo único que me gustaba de mí.

Sólo por una razón en particular.

— Bueno... — parecía ponerse nerviosa. — Entonces, ve a tu habitación y hagamos como que esto nunca pasó

La última frase hizo que una sonrisa traviesa se formara en mi rostro.

— Oh madre, no se lo voy a dejar tan fácil— dije mientras me dirigía a la puerta, deteniéndome en la entrada para voltear a ver a mi mamá quien parecía ponerse más nerviosa. — Me has confundido por quinta vez con mi hermano esta semana, no va a retractarse, ¿verdad? ¿O acaso le va a enseñar a sus hijos a no cumplir con sus palabras? — dije con un ligero tono burlón y superioridad.

Amaba molestar a mi querida madre.

— ¡Cla-Claro que no! Ugh... Solo vístete— dijo mientras se dirigía hasta mí. — Antes de ir al cumpleaños de tu primo iremos a comprar lo que tú quiera...- — dicho eso me dio un pequeño beso en la frente y se fue de la habitación.

— ¡Okey~!— dije mientras me despedía con la mano en alto aun sabiendo que ella no me miraba.

Por si aún no captan ¡Lo que está sucediendo aquí es fácil! Desde que tengo memoria, mis padres y la mayor parte de mi familia siempre me han confundido con mi hermano, somos mellizos aunque él se crea el mayor por doce minutos, nuestros rostros son casi idénticos sin mencionar que tenemos la misma altura y, gracias a la pubertad a quien le pareció bien no hacerme casi ningún cambio al igual que a mi hermano, nuestra apariencia es casi la misma cuando usamos ropas un poco grandes o para ser exactos, suéteres o sudadera ya que es lo que más nos gusta, sobre todo los de color negro.