Los Niñeros [EDITANDO]

Trato

Créditos a SakiFuyu

Narras tú

— Te dije que no volvieras hacer esto— me susurró Mahiri al oído, escuchando la molestia en su tono de voz, aunque a mí parecer, era porque estaba nerviosa, lo cual me causaba cierta felicidad por ella.

— Vamos, no tienes porqué fingir que odias esto— le dije con una media sonrisa. — Además, esto lo hago por ti, ¡Eres mi mejor amiga! Haría lo que fuera por ti— tomé una de sus manos para transmitirle un poco de confianza. — No seas tímida

Por un instante, me dió la impresión de que la mirada que me había dedicado luego de mis palabras, parecía decir "no digas estupideces" con una pesada aura muy remarcada, dándome la ligera sensación de que, lo que yo estaba haciendo estaba mal.

Me pareció que por un momento, Mahiri intentaba decirme algo, sino fuera porque casi de inmediato logré divisar las silueta de mis niñeros. Al acercarnos a ellos decidimos caminar hasta donde habíamos acordado para pasar el rato. Era fin de semana, así que esta vez podíamos disfrutar más tiempo juntos y así Mahi conocería mejor a los chicos.

Una vez que llegamos a un pequeño restaurante de comida rápida, Los chicos fueron los primeros en buscar un lugar para que todos juntos pudiéramos sentarnos, siendo mi mejor amiga y yo las que pedirían algo en el cajero.

— _______, al menos dime que no me dejaras sola con alguno de ellos como lo hiciste en el Arcade— murmuró casi cerca de mis oído mientras yo terminaba de elegir nuestra comida.

Un pequeño silencio se instaló entre nosotras, y Mahi parecía haber visto un fantasma en ese momento.

— No lo ibas hacer, ¿Verdad?— sellando mi boca, aparté mi mirada de la suya. — ¿_______?

— Uh... ¿Cómo lo supiste?

— ¡_______!— me reprochó para luego suspirar con desgano, parecía agotada. — No puedes hacer lo que quieras solo porque te parezca bien; ni siquiera me preguntaste— me reprendía sin importarle que la cajera nos comenzaba a ver raro.

— ¿Por qué no?— traté de fingir inocencia mas su expresión de enfado me dió a entender de que ya me estaba pasado un poco con ella. — Bien, lo siento— me disculpé.

— Si sigues así, te parecerás a cierto chico de cabello rosado— se cruzó de brazos volteando su mirada.

Apenas escuché aquella comparación, sentí el verdadero terror.

"¿Yo, ¡siendo igual que Rei!? ¡Eso era completamente impensable!" en ese momento entendí que de verdad me había pasado con ella.

— No lo volveré hacer, de verdad lo siento— junté mis manos, inclinándome para demostrar que en verdad lo sentía, sintiendo un poco de alivio al ver que ella volvía a sonreírme. — Pero, ¿Entonces te irás?

Parecía que lo estaba pensando un poco. Yo en verdad quería ayudarla a ser más cercana a los chicos, pero si ella no quería mi ayuda, lo entendería. Luego de unos segundos, volvió a mirarme, encogiéndose de hombros.

— Bueno, ya pagué mi parte. Así que no pienso regalártelo así de fácil— volvió a sonreír, esta vez tomando mi muñeca y dando media vuelta. — Anda, vamos con tus amigos.

Dicho eso, decidimos dejar el tema a un lado, dirigiéndonos a donde se habían sentado los chicos; esta vez decidí sentarme con los tres menores mientras ella se sentaba con los otros del otro lado de la mesa. Con una pequeña sonrisa me senté a lado de Ichimatsu, notando como del otro lado Choromatsu empezaba a ponerse nervioso de estar a lado de ella, sobre todo porque estaban casi pegados de hombro a hombro.